¡°Ignorar la filosof¨ªa anula el esp¨ªritu cr¨ªtico de los j¨®venes¡±

Todos los ni?os sin excepci¨®n hacen preguntas. Es la base del aprendizaje. Y la filosof¨ªa consiste en hacerse preguntas. El 28 de noviembre de 2013, el Congreso de los Diputados aprob¨® en Espa?a una de las leyes m¨¢s pol¨¦micas para la educaci¨®n: que la filosof¨ªa solo ser¨ªa obligatoria en primero de bachillerato. Medida que se consigui¨® gracias a la mayor¨ªa absoluta del Partido Popular y que ha provocado que desde entonces muchos docentes y alumnos se hayan movilizado para evitar que los fundamentos del pensamiento occidental salgan del aula. Este jueves, tercero del mes de noviembre, est¨¢ se?alado por la UNESCO como el D¨ªa Mundial de la Filosof¨ªa, una jornada ideal para recordar su importancia. ?C¨®mo es posible que un Gobierno pueda hacer esto a su poblaci¨®n m¨¢s joven? ?C¨®mo es posible que a alguien se le haya ocurrido desterrar de los planes educativos algo tan b¨¢sico y tan ¨²til como es la filosof¨ªa?

Para muchos catedr¨¢ticos, la filosof¨ªa no deber¨ªa ser una asignatura, deber¨ªa ser el leit motiv de la ense?anza desde el principio hasta el final ya que es fundamental para la construcci¨®n del pensamiento y de la cultura saber qu¨¦ pensaron quienes nos precedieron. No solo sirve para entender el pasado, sirve para entender el presente en todos los ¨¢mbitos. Sirve para comprender a los pol¨ªticos (es tarea dif¨ªcil, pero con filosof¨ªa menos), una exposici¨®n de arte g¨®tica, barroca, de lo que sea. Sirve para comprender una obra literaria. Sirve para vivir, para disfrutar.

El fil¨®sofo Eduardo Rivero, de la Escuela Francisco de Miranda (Venezuela) recuerda que, aparte de lo citado, sobre todo ¡°la filosof¨ªa posee un gran valor de actitud interrogativa¡±. Y as¨ª es, porque en ella son m¨¢s importantes las preguntas que las respuestas que pueda ofrecer. ¡°Algo as¨ª como lo practicado por S¨®crates, La May¨¦utica, que no es m¨¢s que el m¨¦todo con el cual el maestro, mediante preguntas, va haciendo que el disc¨ªpulo descubra nociones que en ¨¦l estaban latentes¡±, sostiene Rivero.

Por su parte, Salvador Garc¨ªa Bard¨®n, profesor em¨¦rito de la Universidad de Lovaina, miembro de la Sociedad Filos¨®fica Lovaniense, Doctor en Filosof¨ªa por dicha universidad y Doctor en Ling¨¹¨ªstica por la Sorbona, cree que ¡°es grav¨ªsimo que la filosof¨ªa no est¨¦ en los planes, puesto que su ignorancia y, sobre todo, el esp¨ªritu cr¨ªtico que aporta es una manera de privar al ciudadano, a los j¨®venes, de autodefensas frente a las grav¨ªsimas agresiones que sufre en su independencia frente al pensamiento ¨²nico actual¡±. "Todos sabemos que sin independencia no hay libertad y que sin libertad, la democracia se transforma en una trampa suicida para ciudadanos idiotizados¡±, a?ade.

Para el profesor Bard¨®n, ¡°todo Gobierno que suprime la filosof¨ªa en la formaci¨®n acad¨¦mica de los ciudadanos que ayuda a educar, se autorretrata¡±. "Al hacerlo", se?ala, ¡°declara que desea suprimir la independencia de los ciudadanos y consecuentemente su libertad y la verdad de su democracia¡±. "Es m¨¢s, todo Gobierno que se respeta a s¨ª mismo y que respeta a los ciudadanos que les conf¨ªan la gesti¨®n de su bien com¨²n m¨¢s precioso, que son los valores de la Democracia aut¨¦ntica, tendr¨ªa que mejorar el estatuto de la Filosof¨ªa no solamente en la formaci¨®n acad¨¦mica de los ciudadanos sino tambi¨¦n en los ¨¢mbitos familiares y culturales de la vida ciudadana¡±, reitera.

El profesor, ya jubilado desde hace a?os, defiende que ¡°la formaci¨®n filos¨®fica deber¨ªa estar presente tanto en el seno de las familias como en todos los lugares comunitarios de la cultura, cuya obligaci¨®n principal es el ser subsidiarios, con respecto a la educaci¨®n, de la tarea educativa de las familias¡±. "La salud social de estos lugares culturales se mide por su contribuci¨®n a la formaci¨®n y al goce de la libertad de los ciudadanos. Se trata entonces de fomentar la filosof¨ªa tanto en los curr¨ªculos acad¨¦micos, desde la escuela primaria hasta la universidad, como en las diferentes pr¨¢cticas culturales, que transforman la vida ciudadana en una comuni¨®n dignificante y placentera de relaciones solidarias entre todos los ciudadanos", argumenta.

?Para qu¨¦ nos sirve la filosof¨ªa?

¡°La filosof¨ªa sirve ante todo para reemplazar el vergonzoso utilitarismo individualista actual, cuyo mayor responsable es la econom¨ªa pervertida de la especulaci¨®n financiera, por la solidaridad generosa y gozosa de la socio-econom¨ªa reorientada al servicio equitativo de las necesidades dom¨¦sticas de todos los ciudadanos", responde Bard¨®n. "A la luz de la justicia distributiva, Europa dispone de los medios necesarios para salir de la crisis socioecon¨®mica del utilitarismo individualista que tiene puestas de rodillas a nuestra juventud, a nuestra clase media y a nuestro cuarto mundo y que d¨ªa tras d¨ªa recoge los desechos humanos del desempleo¡±.

"Si no salimos de esta crisis es porque ni a la plutocracia europea ni a sus representantes pol¨ªticos les interesa que salgamos. Ellos saben muy bien que la solidaridad es incompatible con sus intereses propios, que por definici¨®n dogm¨¢tica de su econom¨ªa individualista son insolidarios", contin¨²a Bard¨®n.

?Qu¨¦ podemos hacer los padres para inculcar el amor a la Filosof¨ªa? El profesor, que adem¨¢s de padre es abuelo, cree que tanto unos como otros ¡°tenemos que transmitir a nuestros hijos y nietos los valores filos¨®ficos que nosotros mismos vivimos". "Ayud¨¢ndoles a ser libres como nosotros lo somos, en el respeto de la libertad de nuestros semejantes, que hace posible la vida en democracias aut¨¦nticas¡±, concluye.

Seg¨²n estas declaraciones, cuesta trabajo creerlo, pero hoy por hoy, y si el Parlamento no lo remedia, nuestros adolescentes est¨¢n cojos de una de las patas de la sabidur¨ªa esencial para enfrentar la vida. Para los expertos, se hace fundamental que esto se derogue y vuelva el pensamiento cr¨ªtico a los planes de estudios de los adolescentes espa?oles.