Los pa¨ªses que mejores y peores notas sacan en Educaci¨®n en Iberoam¨¦rica

No siempre un mayor esfuerzo de un pa¨ªs para apoyar econ¨®micamente su sistema educativo rinde los resultados esperables. Al menos, en el caso de algunos pa¨ªses de Iberoam¨¦rica. Una comparativa del dinero que destinan los Gobiernos a la educaci¨®n revela enormes desigualdades. Nicaragua y Guatemala son, aparte de Costa Rica, los Estados que mayor porcentaje de su dinero p¨²blico gastan en educaci¨®n. Sin embargo, en muchas variables que miden la calidad de su sistema presentan resultados desalentadores, seg¨²n demuestra muestra el informe Miradas sobre la Educaci¨®n en Iberoam¨¦rica, que ha puesto a prueba la educaci¨®n desde infantil a doctorado de los pa¨ªses miembros.

El nombre del an¨¢lisis, Miradas, evidencia que no solo basta una visi¨®n, sino varias, para comparar los sistemas educativos. Guatemala, por ejemplo, es uno de los pa¨ªses con menos esperanza de vida escolar (la media del tiempo que sus habitantes reciben formaci¨®n es de 10,7 a?os). Y Espa?a, que aparece en pen¨²ltima posici¨®n con menos de un 10% del gasto p¨²blico destinado a educaci¨®n, saca la mejor nota en longevidad del estudiante: 17,6 a?os.

Esta corta vida escolar afecta, l¨®gicamente, a las matriculaciones en educaci¨®n secundaria. Honduras (42%), Guatemala (45%) y Nicaragua (51%) son los pa¨ªses que menor tasa presentan en este concepto. En el otro extremo, Cuba (94%), Espa?a (93%) y Argentina (90%) son los pa¨ªses con m¨¢s porcentaje de alumnos matriculados en ese nivel educativo.

El estudio revela situaciones de contraste dentro de un mismo pa¨ªs. Adem¨¢s de su porcentaje de alumnos en secundaria, Cuba obtiene un sobresaliente en aprobados en ese nivel educativo y, junto a Costa Rica, en el ratio de alumnos por profesor. Sin embargo, la disponibilidad de ordenadores para los alumnos cubanos de secundaria es la m¨¢s baja entre los pa¨ªses de los que hay datos: solo un equipo por cada 25 alumnos.

El informe, realizado por la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos, se nutre tambi¨¦n de otros indicadores que miden la calidad y la desigualdad, como el coeficiente de GINI, el ?ndice de Desarrollo Humano o los estudios PISA. Eso s¨ª, recoge los ¨²ltimos datos disponibles de las instituciones para la comparaci¨®n, que no siempre son recientes.