¡°El estr¨¦s no provoca un infarto¡±
Pero la tensi¨®n, si va acompa?ada de sobrepeso, tabaco y ausencia de ejercicio f¨ªsico, puede ser letal. M¨¢s a¨²n en mujeres despu¨¦s de la menopausia
La repentina muerte de la senadora Rita Barber¨¢ ha puesto de nuevo el foco sobre la relaci¨®n entre el estr¨¦s y el infarto de miocardio. ?Pueden la tensi¨®n y la presi¨®n provocar por s¨ª solas una crisis cardiaca de estas caracter¨ªsticas? Se lo hemos preguntado al doctor Alessandro Sion¨ªs Green, presidente de la Secci¨®n de Cardiopat¨ªa Isqu¨¦mica y Cuidados Agudos Cardiovasculares de la Sociedad Espa?ola de Cardiolog¨ªa.
"No", responde categ¨®ricamente. "El estr¨¦s puede ser el desencadenante del infarto, pero no lo provoca. Las causas son otras. B¨¢sicamente viene provocado por una arteriosclerosis: cuando una placa dentro de una arteria coronaria se rompe, el contenido de la placa entra en contacto con la sangre y forma un co¨¢gulo que obstruye la arteria. La falta de riego por ese co¨¢gulo causa el infarto. El hecho de estar en una situaci¨®n de mucho estr¨¦s lo que puede hacer es facilitar la rotura de la placa. Sabemos que todas las situaciones en que existe m¨¢s inflamaci¨®n arterial facilitan la rotura de placas: en los d¨ªas con m¨¢s contaminaci¨®n atmosf¨¦rica, o en ¨¦pocas de estr¨¦s, es m¨¢s f¨¢cil sufrir un infarto".
Y a?ade: "Pero si hay que ir a buscar un culpable, como en las novelas policiacas, el estr¨¦s no es el mayordomo. Hay toda una serie de culpables. Hay que pensar en t¨¦rminos probabil¨ªsticos. Si uno se compra todas las papeletas de loter¨ªa le toca s¨ª o s¨ª. Si una persona tiene muchos factores de riesgo aumentan las probabilidades de que desarrolle arterioesclerosis o de sufrir un infarto. Y los factores de riesgo son el tabaco, el sobrepeso, la hipertensi¨®n, la diabetes¡ y seguramente cierta predisposici¨®n gen¨¦tica".
En un repaso a la literatura cient¨ªfica sobre el tema, la Universidad de California (EE UU) tambi¨¦n decret¨® que ¡°aunque el estr¨¦s desencadena los eventos [coronarios] est¨¢ menos claro que el estr¨¦s cause dichos eventos¡±.
Seg¨²n un estudio del Centro de Investigaci¨®n del Coraz¨®n Framingham (EE UU), el estr¨¦s es uno m¨¢s en una lista de factores de riesgo que tambi¨¦n incluye el nivel de colesterol, la hipertensi¨®n, el tabaco, el sobrepeso, los niveles de az¨²car en la sangre y la ausencia de ejercicio f¨ªsico. El mismo estudio se?ala que rebajar esos factores de riesgo reduce la probabilidad de sufrir infartos, ictus y otras enfermedades cardiovasculares.
Dentro de los diferentes tipos de estr¨¦s, el prolongado es peor para el coraz¨®n que los episodios puntuales (por ejemplo, cuando recibimos una mala noticia). "Si la persona es diab¨¦tica, en una situaci¨®n de mucho estr¨¦s que se extiende en el tiempo es m¨¢s f¨¢cil que se descontrole la diabetes; si es hipertensa, es m¨¢s dif¨ªcil controlar la tensi¨®n", explica el doctor Sion¨ªs.
?En qu¨¦ se diferencia el infarto femenino?
El infarto de miocardio no afecta por igual a hombres y mujeres. Seg¨²n estudios realizados en Espa?a, es la causa de muerte en nuestro pa¨ªs de un 12% de los hombres y un 10% de las mujeres. Sin embargo, el pron¨®stico en ellas es peor, como alertan desde la Fundaci¨®n del Coraz¨®n: un porcentaje m¨¢s alto fallece antes de llegar al hospital (un 52%, frente a un 42% de hombres), y el pron¨®stico una vez hospitalizadas tambi¨¦n es peor.
El doctor Sion¨ªs lo justifica as¨ª: "Las mujeres suelen tener infartos en edadas m¨¢s avanzadas que los hombres. Suelen producirse sobre todo despu¨¦s de la menopausia. Por tanto, el pron¨®stico de un infarto en una persona mayor es peor que en una persona joven. De ah¨ª que la probabilidad de mortalidad por enfermedades cardiovasculares sea m¨¢s alta en mujeres".
Tambi¨¦n las se?ales de aviso pueden ser diferentes. Los s¨ªntomas cl¨¢sicos del infarto son dolor opresivo en el pecho o en el est¨®mago, que suele irradiarse a otras zonas como los brazos (sobre todo el izquierdo), cuello, mand¨ªbula o espalda. Esta dolencia tambi¨¦n suele provocar n¨¢useas y dificultad para respirar. Sin embargo, las mujeres presentan en ocasiones s¨ªntomas diferentes que hacen m¨¢s dif¨ªcil una r¨¢pida reacci¨®n. El dolor tor¨¢cico, por ejemplo, es menos espec¨ªfico en ellas. S¨ª se da una fatiga repentina o sudor fr¨ªo. La Fundaci¨®n Espa?ola del Coraz¨®n tambi¨¦n explica que ¡°antes de la menopausia, las mujeres est¨¢n m¨¢s protegidas por los estr¨®genos fisiol¨®gicos, pero tras la menopausia los niveles de colesterol y la tensi¨®n arterial tienden a alterarse¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.