Uno de cada seis ni?os en Argentina tiene una madre adolescente
El embarazo precoz es frecuente en poblaciones vulnerables. En el 69% de los casos no fue intencional
Cuando Tamara Vescovo ten¨ªa 17 a?os dio a luz a su primer hijo. En ese momento, dej¨® la escuela para dedicar su tiempo al cuidado de Yair. Ahora con 19 a?os, tambi¨¦n tiene a Neyen, su segundo beb¨¦ de nueve meses. Ella los cr¨ªa sola ya que su expareja fue arrestada a los dos meses del segundo embarazo. La joven es cartonera y algunas veces hace tareas de limpieza. Durante las largas jornadas de trabajo, le paga a una amiga para que cuide a los ni?os.
La historia de Tamara representa un caso de maternidad en la adolescencia. El 15% de las j¨®venes argentinas vivi¨® una situaci¨®n similar. Seg¨²n las estad¨ªsticas oficiales, uno de cada seis ni?os es hijo de una madre adolescente y el 69% de los embarazos no fue intencional.
¡°Me daba mucho miedo contarle a mi mam¨¢ que hab¨ªa quedado embarazada. Mi hermana me ayud¨® mucho. En ese momento todas mis amigas ten¨ªan hijos y no me pareci¨® raro¡±, cuenta Vescovo. Actualmente, vive con su madre y la familia de una de sus hermanas en el Conurbano de Buenos Aires.
Uno de los arrepentimientos de Tamara es el abandono de sus estudios: ¡°Quiero terminar el secundario porque hay muchas cosas que no s¨¦. En unos a?os, mi hijo va a ir a la escuela y cuando me pida que lo ayude no voy a poder¡±.
Durante el primer embarazo, la joven estuvo acompa?ada por su pareja, que era quien trabajaba. Ya la crianza del segundo beb¨¦ la vivi¨® sola. ¡°En ese momento me daba verg¨¹enza pedirle plata a mi mam¨¢ para comprar los pa?ales¡±, comenta. A pesar de todas las dificultades, la adolescente asegura que sus hijos le alegran la vida: ¡°Me cuesta ser madre, pero ellos me ense?an algo nuevo todos los d¨ªas.
Problemas y desaf¨ªos de madres adolescentes
En la primera relaci¨®n sexual no puede producirse un embarazo o la mujer es la ¨²nica responsable de evitarlo son algunos de los mitos falsos que circulan en la sociedad. Si bien en Argentina existe la Ley de Educaci¨®n Sexual Integral desde el 2006, aun no llega a todos los alumnos en todo el pa¨ªs. La Ley dice que hay que abordar la tem¨¢tica en todos los niveles de la educaci¨®n, pero la realidad es que no se implementa en el nivel inicial ni en el primario. Por otro lado, los servicios p¨²blicos de Salud deber¨ªan atender a los adolescentes e informarlos, pero en muchos casos no lo hacen. ¡°Es necesario que haya una supervisi¨®n m¨¢s rigurosa sobre que sucede en el interior de las aulas sobre este tema. El primer paso concreto para disminuir los embarazos en las j¨®venes es la educaci¨®n y el segundo es la entrega gratuita de los m¨¦todos anticonceptivos que elija la persona en los hospitales p¨²blicos¡±, destaca Gala D¨ªaz Langou, directora de Protecci¨®n Social de la organizaci¨®n sin fines de lucro Cippec.
Con el embarazo en una pareja joven lo que tiende a ocurrir es que las chicas se retiran del mercado laboral y se recluyen en el hogar
Seg¨²n la presidenta y fundadora de la organizaci¨®n FEIM, Mabel Bianco, el embarazo adolescente en Argentina, al igual que en otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, tiende a crecer. Sobre todo, se observan aumentos en los embarazos de chicas con menos de 15 a?os. Bianco afirma: ¡°Uno considerada que en esos casos, la maternidad no ha sido elegida. Una ni?a no tiene capacidad de elegir si quiere ser madre o no¡±.
En tanto, Fernando Zingman, especialista en salud de Unicef, se?ala que para muchas adolescentes en situaci¨®n de vulnerabilidad tener un hijo es un modo de tener un proyecto, es decir, de cuidar a alguien o volver a estar en situaci¨®n de cuidado. De este modo, se refleja una brecha que habla de una desigualdad muy profunda: mientras que los sectores acomodados postergan cada vez m¨¢s la maternidad, los m¨¢s vulnerables la adelantan.
¡°Con la ocurrencia del embarazo en una pareja joven lo que tiende a ocurrir es que las chicas se retiran del mercado laboral y se recluyen en el hogar, mientras que los varones generan una inserci¨®n temprana y precaria en el mercado de trabajo para sostener a la familia. Ninguno de los dos logra terminar la educaci¨®n obligatoria y terminan tomando empleos precarios para la subsistencia b¨¢sica. Eso genera una trayectoria laboral de exclusi¨®n. Estos hogares reflejan c¨®mo se distribuye la pobreza en nuestro pa¨ªs. Hoy la estamos asignando a la infancia. La mitad de los ni?os menores de 14 a?os viven en situaci¨®n de pobreza. En esos chicos generamos las peores condiciones, en t¨¦rminos de oportunidades¡±, destaca D¨ªaz Langou.
Los adolescentes tienen derecho a disfrutar una vida sexual placentera y libre de todo tipo de violencia. En este sentido, Zingman dice: ¡°Actualmente, sigue existiendo una dominancia masculina en la pareja que se demuestra en el uso de preservativo. En la negociaci¨®n, el hombre decide si se usa o no se usa¡±.
El trabajo de ONG en los barrios
Embarazadas es el programa que lleva adelante la ONG Haciendo Camino en el norte del pa¨ªs. A trav¨¦s de esta iniciativa se promueven los cuidados durante el embarazo y el desarrollo del v¨ªnculo madre-hijo desde el periodo de gestaci¨®n. Las mam¨¢s, en situaci¨®n en extrema pobreza, asisten a los Centros para ser controladas y participan de charlas que las preparan para la maternidad. Si bien el programa no se enfoc¨® originalmente en adolescentes, la realidad mostr¨® que la mayor¨ªa de las mujeres que se acercaron eran madres muy j¨®venes.
Ivana Carbonari, coordinadora de la Regi¨®n de A?atuya, en la provincia de Santiago del Estero, cuenta la historia de Marcela, una joven de 15 a?os que se acerc¨® a la organizaci¨®n con un embarazo de 28 semanas. ¡°Ella es una mam¨¢ que tuvo muchos problemas de violencia de g¨¦nero de parte de su pareja. Finalmente, tuvo un embarazo prematuro. El beb¨¦ estuvo internado un mes hasta que lleg¨® al peso acorde. Con la contenci¨®n y ayuda de la organizaci¨®n ambos pudieron salir adelante¡±, relata.
En la organizaci¨®n social SonRisas, ubicada en Monte Grande, Provincia de Buenos Aires, percibieron la problem¨¢tica del embarazo adolescente en el barrio y decidieron implementar un taller apuntado a la prevenci¨®n e informaci¨®n al que llamaron Mejor Hablar de Ciertas Cosas. ¡°A pesar del curso, finalmente muchos adolescentes fueron madres o padres. Esto nos gener¨® muchas dudas internas y frustraci¨®n porque la informaci¨®n se brind¨®, pero de todos modos se tomaron otras decisiones. Pude observar que muchos corren el riesgo con un pensamiento de lo inmediato. En otros casos, buscan tener un hijo, lo desean y lo quieren mucho¡±, cuenta Martin Ferreira, fundador de la organizaci¨®n.
Por otro lado, Ferreira dice que muchos adolescentes del barrio, por temor, eligen contarle a ¨¦l antes que a los propios padres que van a tener un hijo. Relata: ¡°Una vez, un chico me vino a pedir plata para el test de embarazo porque no quer¨ªa que nadie se entere¡±. Como a los j¨®venes, les cuesta mucho sostener los gastos, se acercan m¨¢s la organizaci¨®n a pedir ayuda. Se les suele brindar mercader¨ªa, pa?ales y sobre todo mucha contenci¨®n.
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