Par¨ªs se pone 'heavy'
Han terminado los desfiles de hombre de la capital francesa, polarizados entre la fantas¨ªa rockera-joyera de Balmain y el lujo tranquilo de Herm¨¨s

Las colecciones del pr¨®ximo oto?o/invierno 2017 se han enamorado de lo pobre, de lo feo o de lo directamente aburrido, pero el desfile que celebr¨® Balmain el s¨¢bado en Par¨ªs fue como quedarse dormido y despertar en la casa de un dj decorada sin l¨ªmite de presupuesto por el joyero del zar. O algo as¨ª. La invitaci¨®n ya promet¨ªa (la ilustraba una imagen de un altavoz dorado con el logo de la casa), pero la realidad super¨® cualquier expectativa. Hab¨ªa conjuntos de yoga en punto ba?ado en oro, rebecas bordadas con cenefas de pedrer¨ªa m¨¢s intrincada que un huevo Faberg¨¦, estampados heavies, cazadoras de cocodrilo con mallas de punki y chaquetas de cuero negro guateado, como un bolso, con tachas doradas. ¡°Esta colecci¨®n rinde homenaje a lo m¨¢s duro del rock duro de los ochenta. Hombres que combinaban el esp¨ªritu primario, h¨ªper masculino y la actitud de 'me importa una mierda' con looks vistosos que romp¨ªan las anticuadas barreras del g¨¦nero¡±, dec¨ªan las notas del desfile. La m¨²sica subrayaba el mensaje. Arranc¨® con Show must go on de Queen, sigui¨® in crescendo con Scorpions y lleg¨® a los fuegos artificiales con un c¨®ctel de ¨¦xitos de Bon Jovi.

El desinhibido Rousteing es el personaje al que el establishment de la moda adora odiar (Bon Jovi atronando desde un altavoz dorado no es exactamente un sin¨®nimo del chic parisino). Pero si Mayhoola, el brazo inversor de la familia real de Catar, ha apostado por el futuro de Balmain, la diminuta casa que lidera, es porque opera en una lucrativa dimensi¨®n paralela a la del establishment. Una donde los seguidores se cuentan por millones, su respuesta es inmediata y el margen de crecimiento, casi ilimitado. Una poblada por futbolistas y Kardashians en la que los adolescentes se amontonan en la puerta de los desfiles e incluso copian la manera de vestir del dise?ador. Una dimensi¨®n menos fina, pero con engagement.
Si Rousteing tiene un rival en capacidad viralizadora, ese es Riccardo Tisci, el dise?ador de Givenchy. 12 a?os despu¨¦s de su llegada, Givenchy ha recuperado su lugar de peso pesado en la industria, generalmente asociada a un estilo que funde el lujo con una est¨¦tica entre callejera y tribal. Por eso sorprendi¨® que su desfile del viernes, que ocurri¨® en un lugar m¨¢s suntuoso que lo habitual (la grandiosa Biblioth¨¨que Nationale de France) y empez¨® despu¨¦s de un minuto de silencio por la recientemente fallecida Franca Sozzani, fuera m¨¢s bien amable. La sastrer¨ªa segu¨ªa siendo m¨¢s sexy que la de la competencia y la actitud de los modelos, desafiante, pero camisas de cuadros con apliques o chorreras, botones grandes como de juguete, o enjoyados en elegantes trajes con levita, serv¨ªan de contrapunto al hombre hipermasculino que este italiano suele imaginar. La sensibilidad nocturna de Riccardo Tisci parece haber visto la luz.

Los padres de todo esto
En la dimensi¨®n oficial de la moda de hombre de Par¨ªs, Dior Homme sigue reinando (la suya fue una colecci¨®n de sastrer¨ªa con esp¨ªritu hardcore), igual que Berluti (que ha estrenado dise?ador, el brillante Haider Ackermann) o Herm¨¨s. Esta ¨²ltima sigue atrincherada en su idea del lujo discreto y la artesan¨ªa, y se mantiene fiel al formato de desfile tradicional hasta el punto de que sustituye la ruidosa estrategia de celebridades e influencers por acercar a la ropa al p¨²blico f¨ªsico tanto como sea posible.
La intenci¨®n es que uno aprecie las sutilezas del trabajo de su dise?adora, V¨¦ronique Nichanian. En este caso, jers¨¦is de vis¨®n, cazadoras con una franja de borrego rasado, trajes cruzados de corte 'mod' o pantalones que, en el colmo de la modestia, se llevan amplios, altos y atados con cintur¨®n a lo Oliver Twist. Una especie de normcore suav¨ªsimo y en colores apagados que se a?ade, como si siempre hubiera estado ah¨ª, al continuo de colecciones que Nichanian lleva firmando para la casa desde 1988, cuando Jean-Louis Dumas, por entonces director creativo de la casa, le encomend¨® la misi¨®n de inaugurar la divisi¨®n de moda masculina.
La ¨²ltima entrega de esta s¨®lida relaci¨®n entre compa?¨ªa y dise?adora ha sido como un b¨¢lsamo en la semana de la moda de hombre que acaba de concluir, sacudida por la actualidad (la investidura de Trump y la marcha de las mujeres) y con el ambiente enrarecido por la r¨¢pida sucesi¨®n de cambios en la propia industria. La filosof¨ªa de Herm¨¨s, que se resume en fabricar algo tan duradero que disfrutes llev¨¢ndolo a arreglar, se revaloriza en tiempos de crisis.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
