Guiar a los nativos digitales por los peligros de Internet

¡°Los ni?os no nacen aprendidos, puede que tengan un menor respeto a la tecnolog¨ªa del que le tenemos los mayores, pero esto no quiere decir que sepan sacarle partido o que sepan a qu¨¦ se enfrentan en la red¡±, afirma Javier Pedreira, Wicho, coordinador del libro colaborativo Los nativos digitales no existen (Deusto), en el que 18 expertos en diferentes disciplinas relacionadas con las TIC ponen en entredicho un concepto, el de ¡°nativos digitales¡±, que se ha generalizado a la hora de referirnos a los ni?os nacidos en la Era Google, otorg¨¢ndoles, por el mero hecho de casi nacer con un smartphone en la mano, unos conocimientos y un saber estar en la red que no se corresponde con la realidad. ?Existen los nativos digitales? ?Los padres controlan lo que ven sus hijos en la Red? Dos preguntas a tener en cuenta este martes 7 de febrero, jornada en la que se celebra el D¨ªa Internacional de Internet Seguro.?

¡°Es cierto que en muchos casos los padres y las madres dejan hacer a los menores ante su supuesto mayor nivel de conocimientos y capacidades t¨¦cnicas¡±, corroboran desde el equipo de menores de la Oficina de Seguridad Internauta (OSI), perteneciente al Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE). ?Podemos decir, por tanto, que estamos subestimando los padres los peligros de internet? ¡°En general, las familias s¨ª que se preocupan por la seguridad de sus hijos e hijas en Internet como demuestran las miles de consultas atendidas¡°, manifiestan desde OSI. Una opini¨®n que refrenda Pedreira que considera que es m¨¢s bien una ¡°especie de ignorancia feliz que hace que les presupongamos superdotados en este sentido, minusvalorando la existencia de riesgos¡±. El cocreador de la web sobre tecnolog¨ªa Microsiervos es un gran defensor ¡°de las bondades de Internet¡±, pero reconoce que como cualquier otra herramienta, la red ¡°tiene un lado oscuro¡± que los padres tienen que explicar a los hijos, precisamente para que estos sepan discernir.

Ese lado oscuro tiene nombres y apellidos: ciberacoso, grooming, sexting, malware o suplantaci¨®n de identidad. Conceptos que cada vez tienen m¨¢s espacio en los medios de comunicaci¨®n a la par que se multiplican los casos de ni?os y adolescentes que sufren sus consecuencias. El EMEA Parents Survey de Google, un estudio en el que han participado 2.411 padres con ni?os de entre tres y 16 a?os de seis pa¨ªses distintos, entre ellos Espa?a, demuestra que los progenitores son cada vez m¨¢s conscientes de estos riesgos. No en vano, el que entren en contacto con extra?os (37%), accedan a contenido inapropiado (22%), les suplanten la identidad (10%) o compartan informaci¨®n personal (8%) figuran entre los mayores miedos de los padres, que sobre todo a partir de los seis a?os, en porcentajes que se aproximan al 50% (y se incrementan con la edad) dicen hablar con sus hijos sobre estos peligros de Internet.

¡°Conviene que seamos conscientes de que los riesgos a los que se enfrentan los menores en l¨ªnea son equivalentes a los que se pueden encontrar en su mundo f¨ªsico. Internet es un espacio p¨²blico como una calle o plaza, y por lo tanto est¨¢ lleno de posibilidades, de gente, aunque tambi¨¦n de riesgos¡±, afirman desde la Oficina de Seguridad Internauta. Al final, como afirma Javier Pedreira, en Internet deber¨ªamos actuar con la misma cautela que cuando decimos a nuestros hijos que no se vayan con desconocidos por la calle. ¡°El problema es que muchos padres no lo hacen¡±, a?ade, antes de tachar de ¡°irresponsabilidad¡± el que los progenitores no quieran saber nada de nada de la red y de las webs por las que navegan sus hijos, ya que ¡°queramos o no forman parte de Internet, de un mundo interconectado¡±.

La importancia del acompa?amiento

Seg¨²n datos del estudio llevado a cabo por Google, un 38% de los menores acceden a la red a trav¨¦s de los dispositivos de sus padres, utilizando el perfil de estos o uno ficticio y pudiendo acceder por tanto a contenido no recomendado. ¡°Muchas veces los padres usan los dispositivos tecnol¨®gicos como apagani?os. Desde edades muy tempranas los peque?os est¨¢n muy acostumbrados a manejar smartphones y tabletas, a ver v¨ªdeos de Peppa Pig en Youtube. Pero en Youtube, por ejemplo, si te descuidas acaban viendo un v¨ªdeo que no deber¨ªan ver¡±, reflexiona Pedreira.

Por ello, casi desde el mismo momento en que los ni?os ¡°son capaces de manejar un rat¨®n¡±, los padres deber¨ªamos estar a su lado, acompa?¨¢ndoles en la navegaci¨®n, explic¨¢ndoles los riesgos, ense?¨¢ndoles a utilizar la red de forma segura. ¡°Somos un modelo para nuestros hijos e hijas. Aprenden m¨¢s de lo que hacemos que de lo que les decimos. Adem¨¢s, darles acceso a Internet sin ning¨²n tipo de control o supervisi¨®n ser¨ªa equivalente a dejarles salir a la calle libremente e irse donde quieran (o donde les lleven). Si a esa edad no les dejamos salir solos, quiz¨¢s tampoco debieran estar solos en Internet¡±, aseguran desde la Oficina de Seguridad Internauta.

Seg¨²n Google, un 47% de los padres utilizan su cuenta para navegar junto a sus hijos a diario o de forma muy frecuente, en contraposici¨®n con el 27% que o no lo hace nunca o solo lo hace como mucho una vez al mes. ¡°Lo ideal¡±, seg¨²n los responsables de OSI, es que se haga ¡°continuamente, de manera natural y adapt¨¢ndonos a la edad y madurez del menor¡± y que esta supervisi¨®n se lleve a cabo desde el primer contacto con la tecnolog¨ªa del menor, ¡°para ir comentando juntos y de manera sencilla algunas cosas en las que nos debemos fijar al navegar, como por ejemplo que no todo lo que sale en Internet es cierto¡±.

?Es m¨¢s efectiva esta navegaci¨®n conjunta que todas las herramientas que tenemos a nuestra disposici¨®n para evitar que nuestros hijos accedan a determinado contenido? Los resultados del estudio de Google colocan al antivirus como la herramienta m¨¢s utilizada por los padres (m¨¢s de la mitad lo usan), seguido por los programas de control parental (35%). Sin embargo, para el coordinador de Los nativos digitales no existen, herramientas como la del control parental ¡°dan una falsa sensaci¨®n de seguridad, ya que los filtros son imperfectos y luego, cuando salen de casa, los ni?os puede que se encuentren con dispositivos sin esos controles y lleguen a contenido no apropiado¡±, por lo que ser¨ªa mejor que mientras navegamos con ellos, lleguemos a ese tipo de contenido, para explicarles por qu¨¦ no hay que acceder a ¨¦l.

De la misma opini¨®n son en OSI, donde consideran que estas herramientas podr¨ªan ser ¡°un complemento ¨²til¡± para limitar y supervisar la actividad de los menores en internet, pero matizan que ¡°nunca¡± podr¨¢n reemplazar la necesaria labor de acompa?amiento y di¨¢logo que se ha de dar en la familia. En ese sentido, m¨¢s all¨¢ de tratar sobre las p¨¢ginas web poco apropiadas, de los banners de publicidad o de las descargas que podr¨ªan contener virus, desde la oficina estatal animan a ¡°fomentar un esp¨ªritu cr¨ªtico¡± en los menores que les permita ¡°cuestionarse la veracidad de una informaci¨®n para no caer en bulos, cadenas, ni tomar parte en modas peligrosas¡±; tambi¨¦n a ¡°trabajar su asertividad¡±, para que sean capaces de decir no, rechazando de esta forma ¡°contactos de desconocidos y otras peticiones que les incomoden¡±. Por ¨²ltimo, insisten en no olvidar ¡°el respeto hacia los dem¨¢s¡±, promoviendo la responsabilidad y la empat¨ªa ¡°para que no da?en a otras personas, ni directamente, ni compartiendo o d¨¢ndole un me gusta a un comentario hiriente o inapropiado¡±.

Lo fundamental, por tanto, es acompa?arles y aconsejarles, que no controlar o dirigir. Una f¨®rmula para ello, seg¨²n Javier Pedreira, podr¨ªa ser interesarnos por sus gustos, preguntarles qu¨¦ ven en la red y por qu¨¦ les interesa determinado youtuber, juego o red social. ¡°Hacer que ellos se sientan, por as¨ª decirlo, responsables de tu formaci¨®n. Al final, si no sabes que est¨¢n haciendo dif¨ªcilmente puedes aconsejarles, mientras que si fomentas los aspectos positivos de sus gustos, si sabes orientarles, van a disfrutar tanto haciendo lo que les gusta que no van a tener tiempo de buscar el lado oscuro de la red¡±, concluye. Una opini¨®n que refrendan desde la Oficina de Seguridad Internauta, ya que si conseguimos incluir en nuestro di¨¢logo cotidiano sus actividades online, sus juegos o los amigos con los que se relacionan por internet ¡°estaremos obteniendo mucha informaci¨®n ¨²til para prevenir o detectar un posible problema al mismo tiempo que reforzamos la confianza mutua, lo que es muy ¨²til para afrontar situaciones de conflicto¡±.