Rimas reivindicativas de mujer africana
Los poemas cuentan las inquietudes femeninas sobre represi¨®n, migraciones o sexualidad
¡°Las mujeres africanas toman la palabra en la poes¨ªa. Lo han hecho desde tiempos inmemoriales, transmitiendo la cultura, las costumbres y la sabidur¨ªa de la tradici¨®n oral en los mitos, las historias, los relatos, las canciones y poemas de los pueblos africanos de generaci¨®n en generaci¨®n como educadoras y como griots o l¨ªderes de la palabra hablada¡±, escribe Eva Torre Fern¨¢ndez, experta en literatura africana en ingl¨¦s. Una apasionada de la poes¨ªa de este continente, que abri¨® hace a?os un blog especializado en este g¨¦nero, Mashairi ya Afrika.
Duele,la mism¨ªsima angustiaen las almas de nuestros cuerposcerca y a distancia.
El fragmento pertenece al poema?Mi dolor, traducido por Alejandro de los Santos, de la mozambique?a No¨¦mia de Sousa, ya fallecida, que ¡°fue la primera mujer africana que alcanz¨® reputaci¨®n internacional como poeta, jugando un papel principal en los movimientos de protesta de la negritud entre pintores, poetas y escritores que lideraron el renacimiento cultural en Maputo en los a?os 40 y 50¡±, tal y como nos recuerda Torre.
Sin duda, a trav¨¦s de miles de poemas, las voces de las mujeres africanas se han retorcido, moldeado, se han vuelto del derecho y del rev¨¦s para expresarse, mostrar su/el mundo, compartir sus sue?os, vivencias, alegr¨ªas y tristezas. La poes¨ªa siempre ha sido (y es) un arma poderosa para lograrlo. Y si ?frica es el territorio de la oralidad, ?c¨®mo no tener en este g¨¦nero literario uno de los m¨¢s habituales y frecuentados medios para transmitir miles de pensamientos, miles de experiencias, miles de sentimientos, miles de gritos?. As¨ª lo han hecho sus mujeres, utilizando la poes¨ªa a modo de ventana abierta por la que penetrar en sus mundos, en un viaje a trav¨¦s del que se reivindican y alzan su voz.
Los ejemplos abundan. Dentro de la antolog¨ªa Ellas [tambi¨¦n] cuentan, edici¨®n de Federico Vivanco, que en fechas pr¨®ximas publicar¨¢n Casa ?frica y Baile del Sol, encontramos este poema de la liberiana Mary Laurene Browne titulado Son las mujeres de ?frica, que nos habla de las duras condiciones de vida que muchas de ellas soportan y de la importancia de su liberaci¨®n tanto para ellas mismas como para el futuro del continente:
Sus alas se extienden pero las normas culturalesdemoran su vuelouna d¨¦cada m¨¢stal vez dosotal vez un siglo.
Ella no sabe leer los tiemposo alzar la voz para decir lo que piensa.
El arduo trabajo contin¨²a desde el alba hasta que oscurece.En los campos y en sus hogares para familiares y amigos.Y cuando por fin caen en la esterilla el beb¨¦ llora reclamando su alimentootro ni?o gime afiebradoexigiendo s¨®lo la caricia de una madre.
Oh! mujer africanade muchas tonalidadesdemasiado peso hiere tu alma.Este vuelo demoradoremontar¨¢ a gran altitudelev¨¢ndose cada vez, m¨¢s alto, m¨¢s alto.
Vital para ti.Esencial para ?frica.
Verso a verso estas escritoras van mostrando sus preocupaciones socio-econ¨®micas y pol¨ªticas y van poniendo palabras a sus denuncias. Verso a verso escriben poemas contra la esclavitud, la opresi¨®n colonial o el apartheid. Se debaten entre la dicotom¨ªa tradici¨®n y modernidad y se resisten ellas a escribir para los de siempre. Buscan un p¨²blico mucho m¨¢s extenso, que englobe a aquellos para los que nadie escribe poemas, los que no saben leer ni escribir, situaci¨®n que sufren en mayor medida las mujeres. ¡°Un tema que ocupa muchas p¨¢ginas el de la tiran¨ªa y el abuso del hombre hacia la mujer en una sociedad patriarcal y tradicional¡±, a?ade Eva Torre, situaci¨®n que se agrava muchas veces ya que las mujeres tienen que sacudirse la doble carga de la etnia y la clase social, a la que se a?ade la discriminaci¨®n por g¨¦nero. Escriben as¨ª contra problem¨¢ticas que las persiguen desde que nacen como la mutilaci¨®n genital femenina, los matrimonios forzosos o la importancia de la educaci¨®n.
Las piezas m¨¢s contempor¨¢neas nos hablan de emigraci¨®n, exilio y desarraigo pero tambi¨¦n del poder de la poes¨ªa y la palabra como elemento pacificador en zonas en conflicto. En este sentido uno de los trabajos m¨¢s representativos de los ¨²ltimos tiempos es?100 days suma del esfuerzo que realiz¨® Juliane Okot Bitek al completar un poema para cada uno de los 100 d¨ªas ruandeses en los que el mundo pudo haberse detenido y no lo hizo.
tienes que entenderque nadie pone a sus hijos en un botesalvo que el agua sea m¨¢s segura que la tierra
Los anteriores son los conocidos versos del poema?Hogar de la joven keniata de padres somal¨ªes Warsan Shire, en el que desgrana algunas razones por las que una persona emigra de su pa¨ªs para vivir en otro, y que se ha convertido en lema para reivindicar los derechos a la migraci¨®n y el asilo, al tiempo que reclama solidaridad con los refugiados. El poema ha sido tambi¨¦n objeto de inspiraci¨®n para muchas personas, no solo para la cantante Beyonc¨¦ que ha utilizado la obra de la keniata para completar su ¨²ltimo ¨¢lbum musical.
Shire escribe desde la di¨¢spora sobre un buen pu?ado de temas intimistas y personales al igual que sobre otros m¨¢s pol¨ªticos y de denuncia. Junto a ella, otras j¨®venes describen el mundo que ven desde prismas de rabiosa actualidad. La poes¨ªa de Liyou Libsekal gira, por ejemplo, en torno a las influencias de la tradici¨®n, la modernizaci¨®n y la globalizaci¨®n en el r¨¢pido desarrollo de Etiop¨ªa, en las que no es ajena la presencia de China.
Cada vez con mayor frecuencia las voces se adentran en los duros conflictos que sufren miles de mujeres que quieren vivir tambi¨¦n su sexualidad en plenitud. La editorial Baphala publicar¨¢ en fechas pr¨®ximas una antolog¨ªa de poes¨ªa bajo el t¨ªtulo Como el viento intocable recopilada por Makhosozana Xaba. ¡°Lo que tiene de interesante este libro es que recopila poes¨ªas que son resultado del trabajo de mujeres zimbabuenses que en su mayor¨ªa no son poetas profesionales, sino que son participantes en unos talleres de escritura organizados por GALA y el Sexual Rights Centre. Las poes¨ªas hablan de la experiencia de ser queer en un mundo profundamente tradicional y hom¨®fobo¡±, dice Mariana Jorge, responsable de la editorial Baphala. Una muestra de este trabajo es el poema Poste, antes ¨¢rbol, que forma parte de la mencionada antolog¨ªa, de la escritora Caroline Mudzengi, traducido por Lawrence Schimel y Arrate Hidalgo.
La arrancaron de su sitioBelleza indigna para el rostro de la tierraLa llevaron a una tierra lejana Tras golpearla, amordazarla y colgarlaSu coraz¨®n sangr¨® y llor¨®Gritaba pero apresuraron su misi¨®nLa podaron, moldearon, engrasaron.
Y luego, como con rencor, la hincaron¡En el lugar donde la hab¨ªan sacado de ra¨ªzDonde vivi¨® una vez, majestuosamente viva;Ahora se yergue ex¨¢nime: inerte, sin alma.
Titilope Sonuga es un buen reflejo de la poes¨ªa que triunfa en este momento. Con gran presencia en los medios y en las redes sociales, llega desde sus or¨ªgenes nigerianos como una voz fresca, e interpreta sus poemas de manera hablada. Algunas de sus m¨¢s conocidas piezas se centran, como en el caso de Hide and Seek, en su pa¨ªs de origen y las tragedias que, en los ¨²ltimos tiempos en especial, le han sacudido bajo la sombra de Boko Haram, y que incluyen a cientos de v¨ªctimas sin nombre.
Sus versos son para los ni?os y ni?as de la masacre de Yobe, para las v¨ªctimas del bombardeo contra el campo de refugiados de Nyanya y para las m¨¢s de 200 ni?as de Chibcock secuestradas, cuyas familias siguen esperando. En su libro?Abscess escribe: ¡°A veces la verdad es un absceso; algo que se queda sin decir tanto tiempo en la boca, que se pudre¡±, en un intento de indagaci¨®n personal y de buceo en las experiencias de otras mujeres. En este sentido, en Unlearn (Desaprender), traducido por Eva Torre, habla del necesario camino de ¡°desaprender¡±.
Hay cosas que debemos desaprenderhistorias que ara?ar de nuestras gargantasmujeres enteras a las que regresar
?Qui¨¦n te ense?¨®a re¨ªr tap¨¢ndote los labios con la mano??Qui¨¦n te hizo perder los dientes??C¨®mo aprendiste a comenzar con ¡°lo siento¡±?
Cada vez que te levantastu cuerpo pide disculpascon su ir y veniralgo peque?o y menguante
?C¨®mo llegaste hasta aqu¨ª??Una ni?a temblorosa tan mujer pero no lo suficiente?
?Qui¨¦n te dio este nombre nuevo??Qui¨¦n te hizo tragar esta lengua retorcida??Qui¨¦n te ense?¨® este idioma de sufrimiento callado??Qui¨¦n te oblig¨® a olvidar?
?A recordar solo las partes y no el todo??Qui¨¦n te dio este nuevo serabotonado hasta arriba como un secreto?
Algo roto y abandonadopara morir
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