10 acciones para una cultura organizacional sostenible
Compromiso de la direcci¨®n, metas ambiciosas y prop¨®sitos bien definidos son claves propuestas
Los retos que plantea la agenda mundial de los Objetivos de Desarrollo Sostenible hacen necesario mirar hacia las organizaciones y revisar qu¨¦ tan sensibles son frente a los asuntos sociales, ambientales y econ¨®micos. A continuaci¨®n, 10 acciones puntuales, desde mi experiencia, que le pueden ayudar en esta reflexi¨®n:
1. Compromiso de la direcci¨®n
Nada m¨¢s poderoso que un l¨ªder que valora y le da importancia a la gesti¨®n de aspectos sociales y ambientales en un entorno empresarial competitivo. Este debe ser el punto de inicio para construir una cultura con bases s¨®lidas para que perdure en el largo plazo. Para un equipo de trabajo siempre ser¨¢ importante ver en sus directores coherencia entre sus discursos y las acciones que emprenden d¨ªa a d¨ªa. En el caso de las Empresas B se valora tanto este aspecto que desde los estatutos se genera un compromiso para tomar decisiones analizando siempre los asuntos econ¨®micos, sociales y ambientales.
2. Alineaci¨®n con la estrategia de sostenibilidad
Conservar el talento se ha convertido en uno de los principales retos de los directivos en un cada vez m¨¢s cambiante entorno de negocios. Una vez definida la estrategia por la alta direcci¨®n esta debe llegar de manera precisa a cada uno de los integrantes de la organizaci¨®n y entregarles herramientas que les permitan responder f¨¢cilmente la siguiente pregunta ?C¨®mo aporto a la estrategia de sostenibilidad desde mi responsabilidad en la organizaci¨®n? Cuando cada una de las personas conocen como impactar positivamente los resultados y la estrategia, la cultura tendr¨¢ bases s¨®lidas y se generar¨¢n condiciones atractivas para el talento en el largo plazo.
3. Coherencia con los valores corporativos
Una marca no puede proyectar unos valores al mercado y otros diferentes de sus p¨²blicos internos. Este es quiz¨¢s uno de los retos m¨¢s grandes de las organizaciones, pues el mercado reconoce los logros y cree en una propuesta de valor, pero no siempre eso se ve reflejado cuando se visita una oficina o una f¨¢brica y se dialoga con las personas sobre los temas ambientales y sociales. Por ejemplo, una compa?¨ªa puede ingresar a una clasificaci¨®n o est¨¢ndar de referencia en el largo plazo, pero cuando tenemos la posibilidad de visitarla no se evidencia la sensibilidad de su equipo por los asuntos sociales y ambientales. El story telling puede ser de mucho impacto, pero esto debe coincidir con el story doing de un equipo de colaboradores. Cada persona debe dar testimonio claro del compromiso que promueve la organizaci¨®n en los medios de comunicaci¨®n y foros especializados.
4. Prop¨®sito bien definido
Definir un prop¨®sito es preguntarnos una y otra vez ?Para qu¨¦ hacemos lo que hacemos? Para un profesional es cada vez m¨¢s relevante c¨®mo puede aportar a las grandes problem¨¢ticas del planeta desde su lugar de trabajo: cambio clim¨¢tico, pobreza, equidad de g¨¦nero, ecosistemas terrestres y marinos, desertificaci¨®n o deforestaci¨®n, entre otros. Esa es una caracter¨ªstica de las Empresas B, que no buscan solo ser las mejores del mundo sino tambi¨¦n las mejores para el mundo: son empresas que resuelven problemas sociales y/o ambientales a la vez que generan valor para los accionistas. Cuando el talento tiene prop¨®sitos similares al de la organizaci¨®n, la cultura se fortalece y todos salen ganando en el proceso.
5. Metas ambiciosas
Las grandes transformaciones implican apuestas ambiciosas y esto debe ser monitoreado a trav¨¦s de metas retadoras. Los l¨ªderes mundiales en sostenibilidad han logrado incluir en sus complejas estructuras organizacionales metas e indicadores para hacer un seguimiento detallado a la estrategia corporativa. Por ejemplo, si para una compa?¨ªa proteger el recurso h¨ªdrico es de vital importancia y lo comunica ampliamente a todas sus partes de inter¨¦s, solo esto ser¨¢ verificable por el mercado permiti¨¦ndole generar y proteger su reputaci¨®n, cuando existen cifras claras sobre las acciones anunciadas. Si en una cultura de trabajo cada uno entiende como sus indicadores le apuntan a un prop¨®sito superior, vale la pena el ejercicio y se fortalece la sensibilidad por los aspectos sociales y ambientales; de lo contrario, se genera un rechazo cuando una vez al a?o se les solicitan unas cifras fr¨ªas para incluir en un reporte para la asamblea anual de accionistas.
6. Dise?o de productos y servicios
Los productos y servicios de una empresa con una cultura sensible a la sostenibilidad deben reflejar responsabilidad y coherencia. Desde el dise?o y la concepci¨®n de los productos y servicios una organizaci¨®n puede influenciar positivamente su cultura, seleccionando materiales amigables con los entornos laborales, facilit¨¢ndole al talento la fabricaci¨®n de los productos, revisando en el ciclo de vida de los mismos las condiciones de los empleados e imprimi¨¦ndoles innovaciones para el ambiente y la gente de las que los colaboradores se sientan orgullosos. Un producto o servicio responsable puede convertirse en un atractivo para atraer el mejor talento, pero uno incoherente puede llegar a ser la puerta de salida de personas que preferir¨¢n migrar a un entorno donde su prop¨®sito encuentre terreno f¨¦rtil.
7. Selecci¨®n del talento
Un gran aliado de la direcci¨®n para mantener una cultura sensible a los asuntos sociales y ambientales y para acompa?ar a las personas a pensar siempre en entregar las soluciones m¨¢s responsables para las necesidades de los clientes es el ¨¢rea de gesti¨®n de la gente. En un entorno en el cual las compa?¨ªas compiten para atraer al talento que m¨¢s se adecue a los retos sectoriales, identificar personas sensibles a las problem¨¢ticas del mundo actual adem¨¢s de todos los dem¨¢s requisitos de rutina, se ha convertido en un diferenciador al momento de la toma de decisiones por parte de un empleador. Se est¨¢ evidenciando como la poblaci¨®n joven no solo busca ingresos para progresar y resolver sus necesidades b¨¢sicas; la nueva realidad muestra que adem¨¢s de esto quieren, y necesitan, hacer un aporte a los grandes retos que implica el Desarrollo Sostenible. Existen diversas maneras de identificar esa sensibilidad en las personas desde el mismo proceso de selecci¨®n: los problemas son urgentes y como en muchas otras materias y competencias, los recursos son escasos: alcanza el tiempo para fortalecer algunas brechas, pero no para formar a todos en todo.
8. Voluntariado corporativo
Invitar al talento en las organizaciones a apoyar causas en las cuales se ha decidido enfocar esfuerzos para fortalecer lazos con algunas partes interesadas es una manera de identificar qui¨¦nes tienen una sensibilidad especial por los asuntos sociales y ambientales. Estas personas se convierten en multiplicadores dentro de una cultura organizacional y van permeando con su mensaje a otras personas con igual o mayor sensibilidad. El trabajo con la comunidad, la protecci¨®n de especies animales y los proyectos de vivienda en una poblaci¨®n sin acceso a las oportunidades entre otros temas, se convierten en experiencias no solo para afianzar la responsabilidad sino tambi¨¦n para fortalecer los lazos entre los compa?eros, mejorar el trabajo en equipo, el liderazgo y la integridad. Los organizadores del voluntariado no pueden caer en los "obligariados", exigiendo a las personas a participar en contra de su voluntad; lo anterior desdibuja el verdadero papel de este importante mecanismo para fortalecer una cultura soportada en el respeto por el ambiente y las personas.
9. Estilos de vida saludable
No es posible construir organizaciones y ciudades sostenibles si las personas no conocen y practican los estilos de vida saludable. Todo lo que los empleados realicen en su vida privada, en su hogar, camino a la oficina, en el supermercado, en sus actividades sociales y en general en su diario vivir, tendr¨¢ un impacto directo en una cultura corporativa. Cuando las compa?¨ªas se toman el tiempo para promover mejores estilos de vida, el impacto sobre la cultura es directo y los resultados se evidencian en los indicadores. Algo tan simple como la alimentaci¨®n saludable y el ejercicio frecuente mantiene a los equipos m¨¢s activos y con toda la energ¨ªa para responder de forma efectiva a los retos de los mercados globales.
10. Econom¨ªa colaborativa
Gracias a la creciente econom¨ªa colaborativa hoy podemos encontrar en nuestros aliados estrat¨¦gicos los recursos que nos hacen falta, las soluciones que complementan las nuestras, los espacios con los que no contamos y hasta el transporte y el alojamiento para el talento. Una cultura sensible a la sostenibilidad se facilita cuando hacemos parte de comunidades y lugares de encuentro, como por ejemplo #CicloSiete, una comunidad de 22 pa¨ªses que durante una semana al a?o en el mes de abril se alinea para 1) generar conciencia, 2) llamar a la acci¨®n, 3) compartir las mejores pr¨¢cticas e 4) inspirar a m¨¢s personas a vivir la sostenibilidad. #CicloSiete, expresado por los participantes, se ha convertido en un aliado de las organizaciones y ciudades para construir culturas sensibles a los problemas que afronta al mundo de hoy y en una ruta hacia la agenda mundial de los Objetivos de Desarrollo Sostenible cuyos resultados evaluaremos en 2030.
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