La madera construye el mundo
L A ARQUITECTURA m¨¢s ancestral, que remite a los ¨¢rboles y al azar, la construy¨® el clima, agujereando las monta?as, o la casualidad, uniendo copas de arbustos. La madera es un material primario y, sin embargo, cargado de futuro. Siendo el componente m¨¢s c¨¢lido de tantos edificios, es tambi¨¦n renovable y reciclable. De la madera se dice que vive porque cruje, huele y responde al clima y al paso del tiempo cambiando su densidad y su dureza. William Hall, autor del libro Wood (Phaidon), considera que es, adem¨¢s, un ingrediente inteligente: la tecnolog¨ªa ha a?adido resistencia f¨ªsica a su impagable capacidad aislante ac¨²stica y t¨¦rmica.
Le Corbusier eligi¨® para s¨ª mismo la madera. Construy¨® su caba?a de retiro cerca de Niza en 1952.
Una casa medieval de roble dice tanto de la sociedad del siglo XIV como de las con¨ªferas con las que se construy¨®. La propia naturaleza de los abetos y las hayas defin¨ªa anta?o el tama?o de las vigas, las cerchas y las columnas con las que se levantaban los edificios. Hoy la madera se somete a procesos de transformaci¨®n y resistencia. El mayor inmueble construido con este material est¨¢ en Tillamook, en el Estado de Oreg¨®n (EE UU). El Hangar B, que funciona como un museo del aire, fue levantado en 1943, tras el ataque a Pearl Harbour. Un primer Hangar A fue aeropuerto hasta que ardi¨® en 1992. Eso hoy podr¨ªa evitarse: tratamientos ign¨ªfugos han permitido recuperar la construcci¨®n con bamb¨² en pa¨ªses tropicales.
pulsa en la fotoRefugio alpino. Este pabell¨®n en los Alpes es una rampa con bucle convertida en mirador. Lo construyeron estudiantes del Alice Studio en Suiza.Joel Tettamanti
La madera es cada vez m¨¢s resistente. En Sevilla, J¨¹rgen Mayer construy¨® una gigantesca p¨¦rgola de abedul laminado expuesta al sol y la lluvia sobre la plaza de la Encarnaci¨®n. El gracejo local bautiz¨® el Metropol Parasol, como Las Setas. La an¨¦cdota delata c¨®mo vanguardia y tradici¨®n conviven en los edificios construidos con madera.
A pesar de que algunas macroestructuras, como la cubierta de la abad¨ªa de Westminster o la terminal del puerto de Yokohama de Alejandro Zaera, fueron levantadas con tablones, puede que la arquitectura de le?o m¨¢s famosa sea la m¨¢s peque?a. Le Corbusier construy¨® su Cabanon en Cap-Martin hacia 1952. Para entonces el autor del Parlamento de Chandigarh hab¨ªa redefinido la arquitectura dom¨¦stica y estaba a un paso de repensar la religiosa. Sin embargo, para s¨ª mismo, eligi¨® tres metros cuadrados de madera junto al Mediterr¨¢neo. El arquitecto aparece en las fotos como un primitivo cosmopolita: lav¨¢ndose con una manguera y comiendo en el restaurante L¡¯?toile de Mer.
Que es el ingenio lo que vuelve resistente la madera lo demuestra tambi¨¦n el inexpugnable castillo de Himeji. A pesar de que sus alerones ornados dibujan una silueta delicada, la famosa fortaleza japonesa del siglo XVII nunca fue atacada. La defend¨ªa m¨¢s el ingenio que la fuerza: era el crujido de la madera lo que deb¨ªa alertar sobre la invasi¨®n del enemigo y el laberinto de escaleras lo que deb¨ªa evitarla.
Instinto e ingenio determinan la construcci¨®n con un material que asociamos a la tradici¨®n y a la falta de pretensi¨®n. Pero es su capacidad de transmitir id¨¦ntica calidez en las caba?as m¨¢s tradicionales y en las cubiertas m¨¢s vanguardistas lo que convierte a la madera en el material m¨¢s humano.
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