El imposible mapa de los suicidios en Espa?a
Un estudio sobre los puntos negros de las muertes autoinfligidas recuerda la complejidad del fen¨®meno
Las mujeres se suicidan un 37,5% m¨¢s en marzo que en noviembre. Los hombres, sin embargo, toman la decisi¨®n en verano. Se suicidan un 29% m¨¢s en julio que en noviembre. En Vizcaya se suicidan 2,5 hombres por cada mujer, pero en Ciudad Real son seis hombres los que ponen fin a su vida por cada mujer. Y en M¨¢laga se suicidan 150 personas por cada mill¨®n de habitantes, el triple que en Madrid.
Los datos salen de un nuevo estudio, firmado por las investigadoras Maite Santurt¨²n, Ana Santurt¨²n y Mar¨ªa Teresa Zarrabeitia, de la Universidad de Cantabria. Han analizado las 42.905 muertes por suicidio registradas en las 50 provincias espa?olas entre 2000 y 2012, llegando a unas conclusiones muy llamativas. Pero, ?son ciertas?
"Las mujeres en Espa?a se suicidan un 37,5% m¨¢s en marzo que en noviembre", seg¨²n un nuevo estudio
El trabajo, reci¨¦n publicado en la Revista de Psiquiatr¨ªa y Salud Mental, refleja la dificultad de estudiar el suicidio en Espa?a. ?Los malague?os se suicidan el triple que los madrile?os? No. Hist¨®ricamente, los mapas de suicidios han mostrado puntos negros en Asturias, Galicia y M¨¢laga, mientras que la Comunidad de Madrid aparec¨ªa como un oasis con una baja tasa de suicidios. La realidad es que el Instituto Nacional de Estad¨ªstica no tuvo acceso a los datos del Instituto Anat¨®mico Forense de Madrid hasta 2013, como reconocen las propias autoras del nuevo estudio.
¡°Ignoramos la envergadura del problema en Espa?a¡±, sostiene el psic¨®logo cl¨ªnico Javier Jim¨¦nez, presidente de la Asociaci¨®n de Investigaci¨®n, Prevenci¨®n e Intervenci¨®n del Suicidio (AIPIS). Oficialmente, en Espa?a se registraron 3.602 muertes por suicidio en 2015, ¨²ltimo a?o con datos del INE. Se quitaron la vida 2.680 hombres y 922 mujeres. Es, con mucha diferencia, la principal causa de muerte no natural.
El experto subraya el ejemplo madrile?o. Entre 2012 y 2013, el n¨²mero de suicidios aument¨® un 250% en la Comunidad de Madrid, por el cambio en la metodolog¨ªa del registro. ¡°Cogiendo bien los datos de los Institutos de Medicina Legal en toda Espa?a, quiz¨¢ se registrar¨ªan 1.000 suicidios m¨¢s cada a?o¡±, hipotetiza.
En Espa?a, en caso de defunciones en circunstancias violentas o accidentales, el m¨¦dico debe comunicar el fallecimiento al juzgado de guardia. Una autopsia realizada en los Institutos de Medicina Legal determinar¨¢ la causa de la muerte. Pero, frecuentemente, el personal del juzgado comunica al Registro Civil el presunto motivo de la defunci¨®n sin esperar a los resultados definitivos de la autopsia, que se demoran si hay que analizar muestras. Ese dato prematuro es el que puede llegar al Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).
Entre 2012 y 2013, el n¨²mero de suicidios aument¨® un 250% en la Comunidad de Madrid, por un cambio en la metodolog¨ªa del registro
El n¨²mero de muertes por suicidio que figura en el INE no coincide con el de los Institutos de Medicina Legal. La diferencia es clamorosa. Un estudio en 16 provincias de Espa?a realizado por el Instituto de Medicina Legal de Sevilla encontr¨® 563 suicidios sin registrar, solamente en 2007.
El equipo de la epidemi¨®loga Merc¨¨ Gotsens ha contrastado con fuentes forenses el n¨²mero de suicidios entre 2004 y 2006 en Barcelona que consta en el Registro de Mortalidad del INE. Los archivos del Instituto de Medicina Legal de Catalu?a revelan la falta de validez de los datos del INE. ¡°Solo el 40% de las defunciones que realmente eran suicidios se codificaron como tales en el Registro de Mortalidad¡±, detalla Gotsens, de la Agencia de Salud P¨²blica de Barcelona.
El presidente de la AIPIS recuerda que muchos fallecimientos por las llamadas ¡°causas externas¡± podr¨ªan esconder un suicidio. En 2015 hubo 2.783 defunciones por ca¨ªdas, 2.672 ahogamientos letales, 1.880 fallecimientos en accidentes de tr¨¢fico y 679 envenenamientos con psicof¨¢rmacos y drogas de abuso. Todos ellos fueron casos ¡°accidentales¡±, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica. Jim¨¦nez lo duda.
¡°Se calcula que menos del 20% de las personas que se suicidan deja notas de despedida. Y ni siquiera aparecen todas las notas¡±, explica Jim¨¦nez. Su asociaci¨®n trabaja con un grupo de 25 familias de personas que se quitaron la vida. ¡°La hija de una de las familias se suicid¨® y dej¨® nota, pero incluso as¨ª qued¨® registrada como muerte por precipitaci¨®n accidental. En otra familia, una madre se suicid¨® con una sobreingesta de medicamentos, pero tambi¨¦n consta oficialmente como accidental. Y no son excepciones¡±, recalca.
Los expertos consultados coinciden en la falta de investigaci¨®n de fallecimientos dudosos, como los causados por una ca¨ªda aparentemente accidental. ¡°A menudo, los certificados de defunci¨®n no registran los suicidios, por el estigma social o por la creencia de que no se va a cobrar un seguro de vida¡±, apunta Juan Antonio C¨®rdoba, t¨¦cnico de epidemiolog¨ªa de la Junta de Andaluc¨ªa.
Los mapas del suicidio en Espa?a muestran m¨¢ximos en M¨¢laga, Asturias y Galicia. Juan Antonio C¨®rdoba y otros investigadores estudian desde 2002 un conjunto de siete millones de ciudadanos de Andaluc¨ªa, para intentar detectar las causas de estas desigualdades geogr¨¢ficas. ¡°Nuestros datos preliminares sugieren que se suicidan m¨¢s los pobres, con un nivel educativo m¨¢s bajo. La tasa de suicidios entre los analfabetos es aproximadamente el doble que la de los universitarios¡±, apunta con cautela. Sin embargo, enfatiza, ¡°es muy complicado asociar crisis econ¨®mica y suicidios¡±.
Datos preliminares en Andaluc¨ªa sugieren que la tasa de suicidios entre los analfabetos es el doble que la de los universitarios
El psiquiatra Jos¨¦ Alameda es responsable de un estudio que analiz¨® la mortalidad por suicidio en Andaluc¨ªa entre 1975 y 2012. Sus resultados muestran la complejidad del fen¨®meno. Al inicio de la crisis econ¨®mica, en 2008, se detect¨® un aumento de los suicidios en hombres en edad laboral, pero ese incremento se difumin¨® en los a?os siguientes pese al crecimiento del desempleo.
¡°El suicidio tiene unas diferencias geogr¨¢ficas y culturales brutales¡±, sentencia Alameda, del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla. En Andaluc¨ªa, en las zonas de mayor altitud se detectan desde hace d¨¦cadas tasas de suicidio muy superiores a la media espa?ola. Las explicaciones que se barajan son variopintas, desde la falta de ox¨ªgeno a la pobreza de los pueblos de monta?a. La hip¨®tesis m¨¢s sorprendente es la concentraci¨®n de litio en el agua potable, que disminuye con la altura. Varios estudios en Jap¨®n y Austria sugieren que el litio en el agua estabiliza el ¨¢nimo de los enfermos mentales y reduce el n¨²mero de suicidios.
El nuevo estudio de las investigadoras de la Universidad de Cantabria muestra una tasa media anual de 95 suicidios por cada mill¨®n de habitantes en Espa?a. Es una cifra baja, comparada con la tasa media mundial de 114 suicidios por cada mill¨®n de personas. Para el presidente de AIPIS, no hay motivo para sacar pecho. ¡°A la Comunidad de Madrid se le llenaba la boca diciendo que su tasa de suicidios era de las m¨¢s bajas del pa¨ªs. Ahora le ocurre a Espa?a, pero no sabemos los datos reales¡±, opina.
Jim¨¦nez hace un llamamiento a las autoridades para que asuman la gravedad del problema. La OMS insiste en que los suicidios se pueden prevenir, actuando sobre factores de riesgo como el maltrato, el abuso del alcohol y los problemas de salud mental. Las personas en situaci¨®n de riesgo suicida se pueden detectar a tiempo de recibir una atenci¨®n especializada, como se est¨¢ intentado hacer en Catalu?a. ¡°En Espa?a no hay programas de prevenci¨®n en el ¨¢mbito nacional. Los que hay son pilotos y muy limitados en personal y recursos¡±, lamenta Jim¨¦nez.
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