13 veces en las que Justin Bieber ha sacado de quicio al mundo

?Qui¨¦n no ha metido la pata a los 18 a?os? La diferencia entre Justin Bieber (Londres, Canad¨¢, 23 a?os) y el resto de seres humanos es que sus errores son retransmitidos, analizados y juzgados a tiempo real por el mundo entero. Solo esta semana Bieber ha generado dos pol¨¦micas distintas: China le ha prohibido la entrada por considerarle un mal ejemplo de comportamiento y para "preservar el orden y la pureza de la atm¨®sfera art¨ªstica" en el pa¨ªs, y el cantante ha cancelado los 14 conciertos que le quedaban de su gira Purpose "debido a circunstancias imprevistas". Bieber aclar¨® a la prensa que necesitaba descansar y montar en bici. Por su parte, el representante del m¨²sico escribi¨® en su Instagram: "El alma y el bienestar de un hombre al que aprecio es lo m¨¢s importante, todos debemos respetar y honrar eso. Un cap¨ªtulo termina y otro empieza".

Desde que fue descubierto por un cazatalentos que le vi¨® en Youtube, Bieber no ha dejado de cabrear a todos los pa¨ªses, razas y colectivos, convirtiendo su sue?o americano (o canadiense) en una pesadilla

Sin embargo, el cap¨ªtulo que no se acaba nunca es el de "Justin Bieber saca de quicio al mundo entero" y "Justin Bieber se disculpa". Da igual cuando leas esto, siempre va a ser verdad. Desde que fue descubierto por un cazatalentos en un v¨ªdeo de Youtube en 2008, Bieber no ha dejado de cabrear a todos los pa¨ªses, razas y colectivos posibles, convirtiendo su sue?o americano (o canadiense) en una pesadilla. Sus desplantes, sus impertinencias y sus salidas de tono llevan una d¨¦cada siendo consentidas por una industria donde el cantante sigue siendo intocable: sus ¨²ltimos singles, Love Yourself y Company, est¨¢n entre los m¨¢s exitosos de su carrera. "Nadie me prepar¨® para esta vida. Fui empujado a esto a los 12 a?os y no sab¨ªa d¨®nde me estaba metiendo", explic¨® Bieber. Una excusa que valdr¨ªa para las primeras diez gamberradas, pero no para las 20 siguientes.

A continuaci¨®n recordamos las m¨¢s controvertidas, ordenadas cronol¨®gicamente.

Tradici¨®n anual: ignorar a sus fans

Sus admiradoras se hacen llamar beliebers (un juego de palabras entre "creyente" y Bieber), y cada vez les hace falta m¨¢s fe para seguir apoyando a su ¨ªdolo. En 2010, ignor¨® a un grupo de fans brit¨¢nicas, tras lo cual se disculp¨® en Twitter: "A veces tengo que escuchar a los de seguridad para que nadie resulte herido, pero me gusta vuestra actitud, el Reino Unido va a por todas". En 2011, huy¨® de unas admiradoras brasile?as y de nuevo public¨® una justificaci¨®n en Twitter: "No estaba irritado, estaba cansado. Es algo normal, no soy una m¨¢quina". En 2012, le hizo el vaci¨® a sus fans en Francia, pero aclar¨® su agobio en Twitter: "Me rodearon 20 fot¨®grafos en el aeropuerto, no me gustan los espacios peque?os y solo quer¨ªa montarme en el avi¨®n, por eso corr¨ª".

Abril de 2013: "Anna Frank habr¨ªa sido una 'belieber"

?Qui¨¦n podr¨ªa visitar la casa-museo de Anna Frank, quiz¨¢ la v¨ªctima del Holocausto m¨¢s famosa del mundo, y conseguir despertar pol¨¦mica? Pues Justin Bieber. El cantante escribi¨® en el libro de visitas de la instituci¨®n que hab¨ªa sido "toda una inspiraci¨®n venir, Anna era una gran chica, tengo la esperanza de que habr¨ªa sido una belieber".

Julio de 2013: insultar a Bill Clinton mientras mea en el cubo de una fregona

Tiene que ser alg¨²n tipo de r¨¦cord que Bieber consiguiese generar dos pol¨¦micas distintas en s¨®lo 45 segundos. En el v¨ªdeo aparec¨ªa orinando en el material de limpieza de una discoteca y posteriormente virtiendo limpiacristales sobre una foto del expresidente americano al grito de "que te jodan, Bill Clinton", mientras de fondo se oye a su s¨¦quito jalearle. Como manda la tradici¨®n, Bieber tuvo que publicar dos disculpas distintas: una hacia Clinton, a quien defini¨® con el hashtag #grantipo y otra por utilizar una fregona como retrete. "En la vida cometes errores y la gente intenta derribarte, pero tienes que ser positivo. Ser fuerte y aprender a mejorar", fue su explicaci¨®n, en vez de recurrir al socorrido: "No encontraba el ba?o y estaba que me lo hac¨ªa encima", como habr¨ªa hecho cualquiera.

Noviembre de 2013: barrer el suelo con la bandera de Argentina

Cuando una fan le lanz¨® una bandera de Argentina durante un concierto en Buenos Aires, el cantante la arrastr¨® fuera del escenario (a la bandera, no a la fan, y que haga falta aclarar esto dice muy poco en favor de Bieber) d¨¢ndole patadas con el pie de micro. Su inevitable disculpa en Twitter: "La gente tira cosas a mi escenario y las retiro para que nadie salga herido. En ese v¨ªdeo yo vi un sujetador y cre¨ª que era una camiseta. Mi equipo me dice que era una camiseta, pero incluso si fuese una bandera nunca har¨ªa nada para faltarle al respeto a Argentina o al pueblo de Argentina o los fans. Lo siento por aquellos que malentendieron mis acciones y espero que pod¨¢is perdonar este error". Mucha gente defendi¨® a Bieber tras este gesto, pero paciencia, esto no ha acabado a¨²n.

Enero de 2014: agresi¨®n al conductor de su limusina

En diciembre de 2013, Bieber fue arrestado a las cuatro de la madrugada por conducir bajo los efectos del alcohol, la marihuana y los tranquilizantes (Xanax, recetado por su m¨¦dico). La foto de su detenci¨®n, en la que aparec¨ªa sonriente y con mejor aspecto que t¨² en todas tus fotos de carnet, dio la vuelta al mundo irritando a todo el que la ve¨ªa. Unas semanas despu¨¦s, Bieber asisti¨® al juzgado aplaudido por cientos de fans y, tras pagar una fianza, sali¨® libre sin cargos. Esa misma noche sali¨® a celebrarlo y acab¨® golpeando a su ch¨®fer en la nuca repetidamente, pero se larg¨® antes de que llegara la polic¨ªa.

"Nadie me prepar¨® para esta vida. Fui empujado a esto a los 12 a?os y no sab¨ªa d¨®nde me estaba metiendo", se excus¨® Bieber despu¨¦s de una de sus sonadas meteduras de pata

Abril de 2014: rezar en el monumento equivocado en Jap¨®n

Vamos a la disculpa directamente: "Mientras estaba en Jap¨®n, le ped¨ª a mi conductor que parase porque vi un altar hermoso. Yo cre¨ªa que los altares eran s¨®lo un lugar para rezar. A todo el que le haya ofendido, lo siento mucho. Te amo, China y te amo, Jap¨®n". Bieber public¨® una foto meditando junto al templo Yasukuni, acompa?ada del texto: "Gracias por vuestras bendiciones". Para cuando el cantante borr¨® la publicaci¨®n tras enterarse por sus fans que ese monumento honra la memoria de los ca¨ªdos de guerra, incluyendo militares japoneses que perpetraron atrocidades en toda Asia y el pac¨ªfico durante la Segunda Guerra Mundial, esa foto contemplativa ya ten¨ªa 666.000 "me gusta" en Instagram.

Junio de 2014: "?Sab¨¦is por qu¨¦ los negros tienen miedo de las motosierras?

La publicaci¨®n de un v¨ªdeo de 2008 en el que Bieber, con 14 a?os, contaba chistes racistas enfureci¨® a la opini¨®n p¨²blica: "?Sab¨¦is por qu¨¦ los negros tienen miedo a las motosierras?", preguntaba el chaval. "No respondas", dec¨ªa una voz femenina fuera de plano que Bieber ignor¨® por completo. "Porque suenan as¨ª: run nigger nigger nigger [corre, negro]". La palabra "nigger", el mayor tab¨² del vocabulario ingl¨¦s, puso los pelos de punta a todo el que todav¨ªa sent¨ªa simpat¨ªa por Justin, lo cual llev¨® al cantante a escribir una disculpa: "No me daba cuenta en aquel momento de que no era divertido y de que mis acciones perpetuaban la ignoracia (...) Una vez m¨¢s, lo siento". Pero d¨ªas despu¨¦s se filtr¨® otro v¨ªdeo de la misma ¨¦poca en el que el cantante versionaba su canci¨®n One Less Lonely Girl (una chica solitaria menos) cambiando la letra por "si te matase, ser¨ªa miembro del KKK [el Ku Kux Klan], y entonces habr¨ªa un negro solitario menos". Este segundo v¨ªdeo no encontr¨® disculpa, quiz¨¢ porque Bieber asumi¨® que la anterior ya val¨ªa para los dos v¨ªdeos.

Octubre de 2015: desplante a Dani Mateo

Durante su visita al programa Yu, no te pierdas nada Bieber fue tratado como si fuera un guiri borracho en Magaluf: preguntas indiscretas en un ingl¨¦s macarr¨®nico, ostracismo mientras los presentadores se pasaban minutos de risas hablando en castellano y sin hacerle part¨ªcipe y la propuesta final ("vamos a ROMPER INTERNET") de que posase con el youtuber estrella El Rubius. Bieber dijo "genial, vamos a ello" y se larg¨® mientras Dani Mateo gritaba: "?Justin, que por ah¨ª no es!". No, por ah¨ª no era, y precisamente por eso se fue en esa direcci¨®n. No hubo disculpa alguna esta vez, pero s¨ª un single que arras¨® en ventas titulado Sorry, la palabra que m¨¢s veces ha repetido Justin Bieber en toda su vida (al menos en p¨²blico). El v¨ªdeo del programa no rompi¨® internet, pero s¨ª se viraliz¨® en cuesti¨®n de horas, solo que no de la forma en que sus responsables esperaban. O quiz¨¢ s¨ª.

Octubre de 2015: termina un concierto tras cantar una canci¨®n

"Se acab¨®, no voy a hacer el concierto", y se larg¨®. As¨ª acab¨® Justin Bieber su espect¨¢culo en Oslo, irritado porque sus fans no le escuchaban mientras ¨¦l intentaba limpiar el agua que ellas hab¨ªan derramado en el escenario. Pero que no cunda el p¨¢nico, porque Justin ten¨ªa una disulpa a mano: "Ha sido una semana dura para m¨ª, con d¨ªas largos sin dormir, mientras ten¨ªa que posar para las c¨¢maras y los fans; (...) decid¨ª terminar el show porque la gente de la primera fila no me escuchaba (...) soy humano y estoy trabajando para mejorar (...) lo siento por la gente del fondo". Los tres primeros comentarios de fans cuando Bieber public¨® este texto en Instagram son estos: "?Por qu¨¦? ?por qu¨¦ ERES TAN MONO? Quiero abrazarte fuerte", "eres una buena persona y no le debes ninguna explicaci¨®n a nadie" y "he llorado tanto, ?por qu¨¦ tienen que ser tan horribles contigo? Puedes tomar tus propias decisiones, eres humano".

Marzo de 2016: cancelaci¨®n de los encuentros con las fans

En plena gira, Bieber decidi¨® dejar de participar en meet & greets (encuentros con los fans que las estrellas acostumbran a hacer despu¨¦s de cada concierto). El cantante empez¨® su explicaci¨®n en Instagram con una de cal ("os quiero chicos...") y otra de arena ("voy a cancelar mis meet and greets". Continuaba: "Disfruto conociendo a personas tan incre¨ªbles, pero acabo sinti¨¦ndome tan absorbido y tan lleno de la energ¨ªa espiritual de otra gente que me siento seco e infeliz. Quiero hacer que la gente sonr¨ªa y est¨¦ alegre, pero no a mi costa y siempre me marcho mental y emocionalmente exhausto y al borde de la depresi¨®n". En aquel momento, la experiencia de conocer a su ¨ªdolo (que costaba unos 2.000 euros) ya hab¨ªa decepcionado a cientos de fans en todo el mundo: los padres se quejaban de que Bieber llegaba tarde (lo cual no tiene excusa, porque el chaval suele llevar dos Rolex de oro, uno en cada mu?eca), se quedaba menos de un minuto e incluso se largaba sin haber saludado a todas las admiradoras presentes.

"Tom¨¢os este momento para escucharme e intentad no darme lo que sea que est¨¦is intentando tirar al escenario, porque probablemente no quiero esta mierda", solt¨® Bieber en mitad de un concierto

Julio de 2016: "No quiero esa mierda"

Tras ofender al 80% de los pa¨ªses del mundo, Bieber regres¨® con su gira a Estados Unidos y sigui¨® tratando regular a sus fans: cuando una de ellas le lanz¨® un sombrero, el cantante dijo "tom¨¢os este momento para escucharme e intentad no darme un sombrero o lo que sea que est¨¦is intentando tirar al escenario, porque probablemente no quiero esta mierda". Y no creer¨¢s lo que sucedi¨® despu¨¦s: "Lo siento, eso ha sido cruel. Siento haber tirado tu sombrero, pero has arruinado el momento".

Enero de 2017: amenazas contra su vecino

Cuando Jeffrey Schwartz le pidi¨® que no condujese tan r¨¢pido por la urbanizaci¨®n, Bieber le escupi¨®. Tras la demanda interpuesta por Schwartz, Bieber "continu¨® acosando, intimidando y amenazando a la familia Schwartz a la menor oportunidad", seg¨²n describ¨ªa la denuncia, "lo cual incluy¨® gritar obscenidades y amenazas al demandante y a su hija menor de edad, adem¨¢s de observaciones antisemitas contra ¨¦l".

Marzo de 2017: "Me pones enfermo"

Asediado por sus fans australianas (quiz¨¢ el ¨²nico continente que le quedaba por vejar) en Melbourne, Bieber le reproch¨® a una de ellas que tomase una selfie sin pedirle permiso: "Est¨¢s invadiendo mi privacidad, no tienes respeto, me pones enfermo". Este episodio alimenta la narrativa de que a Justin Bieber le molestan profundamente sus fans, perpetuado por aquella noticia falsa de que escupi¨® a un grupo de admiradoras desde el balc¨®n de su casa en Toronto. Aquel incidente nunca sucedi¨®, y el representante de Bieber aclar¨® que las fotos captaban un momento en el que Bieber estaba escupiendo a la calle cuando no hab¨ªa nadie debajo. "Entiendo que ser juzgado es parte de mi trabajo, pero juzgadme en base a los hechos, juzgadme por la m¨²sica, y tened cuidado con el juicio que hac¨¦is", escribi¨® en Twitter. Da la sensaci¨®n de que nada le molesta tanto a Bieber como que la gente no le escuche. El problema es que, cuando le prestamos atenci¨®n, lo que dice casi nunca suena bonito.