Monstruo Espagueti: ¡°Fui a 'First Dates' y me tangaron¡±

La pasada Navidad recib¨ª una llamada: ¡°Hola Soy Irene, redactora de First Dates y te llamo por si te apetece venir al programa¡±. Ten¨ªan mis datos porque un d¨ªa me llamaron para hablar sobre internet (LOL) en un programa al que al final nunca fui. Por esas fechas, creo que First Dates estaba empezando a petarlo y a m¨ª me parec¨ªa el descojono. Mi libro estaba a punto de salir y pens¨¦ que como lo ve¨ªa media Espa?a podr¨ªa ir a promocionarlo all¨ª. Adem¨¢s, hay que decir que soy de las que se apuntar¨ªa a invadir Polonia por ¡°vivir la experiencia¡±. Tuve que mandar un v¨ªdeo, fotos e incluso un cuestionario largu¨ªsimo con todo tipo de informaci¨®n personal, mis gustos, aficiones y anteriores parejas. Recuerdo que en muchas de las preguntas pon¨ªa en may¨²sculas: (MUY IMPORTANTE DETALLAR AL M?XIMO). Eso me hizo much¨ªsima gracia. Como si de verdad se tomasen en serio lo de buscarte pareja.

Fue pasando el tiempo y no recib¨ªa noticias. El programa se hac¨ªa m¨¢s y m¨¢s famoso y la gente hablaba mucho de ¨¦l. Contactaban a algunos amigos m¨ªos para ir y todos dec¨ªan que ni de puta co?a. Qu¨¦ c¨®mo iban a ir all¨ª hacer el rid¨ªculo. Entend¨ªa sus motivos, pero a la vez empezaba a mosquearme que no me llamasen. Como el programa era un bombazo y lo emit¨ªan a diario, cada vez escrib¨ªan a m¨¢s conocidos. Y todos dec¨ªan que NO. Pues yo ya estaba negra con el tema.

Pero¡­ al final resulta que un amigo m¨ªo conoc¨ªa al redactor, as¨ª que le escrib¨ª un whatsapp. Por lo visto la redactora que me toc¨® estaba de baja y pod¨ªa ir cuando quisiera.

Cuando le dije a la gente que iba a ir me tomaron por chiflada. Ese d¨ªa me puse a verlo y solo sal¨ªa gente rebuznando. Gente a la que le encantan los tatuajes tribales y los partidos del Atleti o alguna mierda por el estilo. Tambi¨¦n sal¨ªan frikis de esos que solo hay en la tele. Empec¨¦ a acojonarme. Yo quer¨ªa ir a promocionar mi libro pero ya no sab¨ªa si era el lugar adecuado. Expres¨¦ mis dudas al redactor y me dijo que, por supuesto, que lo llevase y que lo sacar¨ªan, que se lo pod¨ªa regalar a mi cita.

Total que lleg¨® el d¨ªa y me fui a Madrid y me metieron en el coche con una Barbie Malib¨² de Santander y otra muy jovencita que quer¨ªa ir a ¡®Mujeres y Hombres y Viceversa¡¯. La verdad es que ambas me cayeron bien. El sitio donde se rueda es un pol¨ªgono industrial muy deprimente y desde el principio me sent¨ª como ganado. Constantemente se te acercaba gente a darte instrucciones, tan falsa y tan amargada que parec¨ªa que no hab¨ªa ido al ba?o en cuatro meses.

De pronto apareci¨® el redactor con el que yo hab¨ªa hablado, quien parec¨ªa desvivirse porque todo fuera de mi agrado. Desde que empez¨® a hablar conmigo por whatsapp me dec¨ªa que s¨ª a todo y usaba frases como ¡°no te preocupes por nada¡±, ¡± s¨ª claro, Anastasia, por supuesto¡±. Despu¨¦s vino una se?ora y nos dio 90 euros a m¨ª y a las otras dos chicas. Por lo visto, si decides invitar t¨², no recuperas la pasta pero si lo pagas a medias luego te devuelven tu parte. No lo comprend¨ª muy bien, pero imagino que tendr¨¢n sus razones retorcidas de redactor maquiav¨¦lico.

Y por fin me toc¨® salir. El reloj daba las 11:36 minutos de la ma?ana y se supone que entrabas all¨ª a cenar. Me recibi¨® Carlos Sobera, que es muy buen actor porque cuando yo le soltaba alg¨²n comentario hac¨ªa como que no lo hab¨ªa o¨ªdo. Solo reaccionaba si respond¨ªas a lo suyo y pude ver en el fondo de su mirada que ese trabajo le da ganas de cortarse las venas.

Saqu¨¦ mi libro para que lo viera Carlos y lo cogi¨® la camarera, que me hizo varios comentarios sobre lo guay que parec¨ªa. Misi¨®n cumplida, pensaba yo.

Y aqu¨ª viene lo m¨¢s jevi del tema (lo cuento aunque s¨¦ que nadie me va a creer). El Sobera me dijo tres cualidades del chico y yo ten¨ªa que dibujarlo, sin haberle visto antes. Creo que me dijo ¡°caballeroso, atento¡± y otro adjetivo que no recuerdo.

No me dieron ninguna pista sobre su f¨ªsico. Hice un garabato r¨¢pido en plan caricatura y cuando el chico apareci¨® resulta que era EXACTAMENTE IGUAL AL DIBUJO QUE HABIA HECHO. Este escalofriante acontecimiento se puede comprobar en la foto que acompa?a a este art¨ªculo. Juro que es completamente ver¨ªdico. El pr¨®ximo programa al que me apunte ser¨¢ uno de videncia en directo.

De la cita no hubo mucho destacable. El chaval y yo no peg¨¢bamos ni con cola, sin embargo me cay¨® bien. ?l iba all¨ª en serio y yo en realidad TENGO NOVIO. Le pregunt¨¦ que si le¨ªa y me dijo que ¡°prefer¨ªa ver las fotos¡±. Y no era broma ni nada. Eso s¨ª, yo me re¨ª de lo lindo durante toda la cita por lo extra?o e ins¨®lito de la situaci¨®n. A nuestro alrededor hab¨ªa extras comiendo en las mesas como si nada. Todo era tan deprimente y tan falso¡­ Todas las emociones de todo el mundo eran tan artificiales que a m¨ª me parec¨ªa divertid¨ªsimo.

De pronto apareci¨® un camarero con una sonrisa pintada en la cara y nos dijo que ya era hora de que habl¨¢semos de lo que buscamos en una pareja, de que entr¨¢semos en materia. Que si no, no nos tra¨ªa el postre. Yo, desde luego, en una primera cita no me pongo a enumerar lo que busco en una pareja como si fuese a comprar una lavadora, pero aquel hombre insisti¨® varias veces. Me parec¨ªa tan extra?o que, cuando me toc¨® explicarlo, dije cosas muy raras como que busco a alguien ¡°potente¡±(WTF).

La cita acab¨® y nos metieron a hablar por separado en un cuarto y luego juntos para dar el veredicto sobre la segunda cita. El dijo que s¨ª y yo que ¡°me hab¨ªa faltado esa chispa¡±. Me mor¨ªa de ganas de soltarlo porque es lo que dicen siempre.

Me dijeron que me avisar¨ªan cuando saliera el programa y yo insist¨ª de nuevo en lo del libro. Bueno, pues os pod¨¦is imaginar lo que ocurri¨® ?a que s¨ª? El programa se emiti¨® ayer y yo me enter¨¦ porque me escribi¨® una amiga con un ataque de histeria porque me estaba viendo en la tele. Y por supuesto, ni rastro del libro, NI UN FOTOGRAMA, NI UNA FOTO. NADA.

Gracias First Dates por tangarme profesionalmente.