¡°Sin tierras, los pastores ser¨¢n incapaces de alimentarse¡±

Gunia tupu halisimami wima, reza un dicho swahili (un saco vac¨ªo no se puede mantener erguido). Los pastores n¨®madas saben que la uni¨®n hace la fuerza. Por ello, organizaciones sociales de siete pa¨ªses han creado este mayo la Red Pastoril del Este y Sur de ?frica (ESAPN), bajo los auspicios del Organizaci¨®n de la ONU para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO). La red, con representantes de Namibia, Etiopia, Kenia, Tanzania, Uganda, Somalia y Sud¨¢n del Sur, tiene por objetivo promover pol¨ªticas en favor de unos pueblos que dependen de la movilidad para sobrevivir, y que lo hacen en tierras enjutas en las que otros modos de vida no son sostenibles (o ni tan siquiera posibles).

De c¨®mo viven y luchan los pastores, y de lo que ahora se han unido para reclamar ¡ªdesde los secarrales del noreste de Uganda hasta los centros de safaris m¨¢s concurridos de Tanzania¡ª habla Benjamin Mutambukah, presidente de la ESAPN y coordinador la Coalici¨®n de Organizaciones Pastoriles de la Sociedad Civil (COPACSO) de Uganda.

Pregunta: ?Qu¨¦ creencias err¨®neas perviven en torno al pastoreo n¨®mada?

Respuesta: B¨¢sicamente, no se valora la contribuci¨®n del pastoreo a la econom¨ªa de los pa¨ªses y a la subsistencia de las personas. Por ejemplo, ?cu¨¢nta carne y leche se consume cada d¨ªa en una ciudad? En contextos como el africano, estos alimentos son producidos, en buena parte, por las comunidades pastoriles. Para los gobiernos es f¨¢cil escuchar a los agricultores porque son sedentarios y, por lo tanto, un buen objetivo para la captaci¨®n de votos. Por ello no se les frena cuando se introducen en tierras de pastoreo. No obstante, si se permite a las comunidades negociar los derechos de uso de la tierra, hay soluciones. El ganado, por ejemplo, se puede conducir a campos ya segados para que los abonen al tiempo que pastan. Otra cuesti¨®n es la p¨¦rdida de tierras cultivables por el aumento de las sequ¨ªas. En estos casos, el pastoreo tiene visos de convertirse en el ¨²nico modo de convertir la escasa biomasa de estas tierras en alimento.

P: El pastoreo mantiene un historial de tensiones con los proyectos de conservaci¨®n de la vida salvaje, aunque ahora se demuestra que son compatibles. ?En qu¨¦ punto se encuentra la cuesti¨®n?

Muchas de las ¨¢reas de conservaci¨®n eran antes pastizales, y diversos gobiernos han seguido recalific¨¢ndolas sin consultar a sus usuarios ni aportar alternativas

R: Los pastores pueden convivir con la vida salvaje, tal y como demuestran numerosos ejemplos en Kenia y Tanzania. Sin embargo, en regiones como Karamoja ¡ªuna zona pastoril del noreste de Uganda¡ª el 53,8% de la tierra est¨¢ reservada para la conservaci¨®n. Ello supone un problema para el pastoreo, que necesita mucha tierra porque depende de un suministro de agua y pastos altamente variables. Muchas de las ¨¢reas de conservaci¨®n eran antes pastizales, y diversos gobiernos han seguido recalific¨¢ndolas sin consultar a sus usuarios ni aportar alternativas.

P: ?C¨®mo se sienten las comunidades pastoriles con respecto a sus gobiernos?

R: Los pastores n¨®madas se sienten abandonados. Sobre todo, echan en falta ser consultados sobre la planificaci¨®n, implementaci¨®n y evaluaci¨®n de pol¨ªticas y leyes. Sigue habiendo mucho desarrollo vertical, con gobiernos que piensan que los pastores son ignorantes ¡ªdados sus bajos niveles de educaci¨®n formal¡ª o que es demasiado costoso ir a su encuentro. Fruto de ello, no se les implica en decisiones como la expansi¨®n de la agricultura, la sedentarizaci¨®n y la cesi¨®n de sus tierras con fines de conservaci¨®n o de explotaci¨®n comercial. Otro problema son los bajos niveles de inversi¨®n p¨²blica, incluyendo en carreteras, escuelas, centros sanitarios y mercados. El resultado son unos indicadores de pobreza persistentemente superiores a la media nacional; bajo rendimiento escolar, y escaso acceso a empleos p¨²blicos. En lugares donde las tierras pastoriles han sido usurpadas una y otra vez, como en las regiones tanzanas de Morogoro y Arusha, punto de salida safaris y de excursiones al Kilimanjaro, hierve la desconfianza y la inseguridad. Todo ello hace que las comunidades se sientan ninguneadas.

P: El desarrollo de las comunidades pastoriles se plantea ahora como alternativa a dos aspectos: los intentos de cultivar zonas semi¨¢ridas y las intervenciones humanitarias peri¨®dicas. ?Qu¨¦ pol¨ªticas reivindican para el sector pastoril?

R: Los gobiernos del este y sur de ?frica deben reconocer la movilidad, incluyendo la transfronteriza, como una cuesti¨®n de subsistencia para las comunidades pastoriles. Tambi¨¦n deben recordar sus compromisos bajo el Marco de pol¨ªticas para el pastoreo de la Uni¨®n Africana (2010) y bajo las Directrices voluntarias sobre gobernanza responsable de tierras, pesquer¨ªas y bosques de la FAO (2012). Ambos reconocen como necesidades de los pastores tanto la seguridad en la tenencia de la tierra, como la movilidad en tiempos de estr¨¦s. En Uganda, la propiedad comunal de la tierra est¨¢ estipulada en la Constituci¨®n, pero se han hecho muy pocos esfuerzos para generalizar la extensi¨®n de t¨ªtulos. Otra prioridad es aumentar la inversi¨®n p¨²blica en servicios e infraestructuras: desde puntos de suministro el¨¦ctrico para favorecer la diversificaci¨®n econ¨®mica hasta dep¨®sitos para almacenar agua de lluvia en las tierras ¨¢ridas, pasando por la mejora de los mercados para el comercio de ganado.

Los pastores n¨®madas se sienten abandonados. Sobre todo, echan en falta ser consultados sobre la planificaci¨®n, implementaci¨®n y evaluaci¨®n de pol¨ªticas y leyes

P: ?Cu¨¢les son las consecuencias de la falta de apoyo al sector?

R: De entrada, consideramos que una tierra sin t¨ªtulos es una presa f¨¢cil para el gobierno y los inversores. Sin un t¨ªtulo de propiedad, tambi¨¦n es dif¨ªcil reclamar pagos derivados de la explotaci¨®n de recursos como petr¨®leo, gas, m¨¢rmol y oro. Si se contin¨²a desposeyendo a los pastores de su tierra, ser¨¢n incapaces de alimentarse. Sobre todo, frente al aumento de la poblaci¨®n y la escasez de recursos. La pobreza aumentar¨¢ y la depauperaci¨®n puede desembocar f¨¢cilmente en medidas desesperadas como tr¨¢fico de drogas y armas o prostituci¨®n. Ya estamos constatando un incremento en el n¨²mero de ni?os de la calle en zonas pastoriles y, por ahora, no vemos indicios de que ello vaya a reducirse.

P: A nivel global, hay un apoyo creciente al modo de vida de los pastores n¨®madas. ?Las comunidades empiezan a notar este cambio sobre el terreno?

R: Hasta cierto punto, s¨ª. Por ejemplo, hay iniciativas de la FAO como la vacunaci¨®n de ganado, y del Banco Mundial, que respalda un proyecto en ?frica occidental y otro de la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo (IGAD) en Etiopia, Kenia y Uganda. Otro precedente importante se ha sentado este mayo: el tribunal de la Comisi¨®n Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos ha ordenado al gobierno de Kenia la devoluci¨®n de tierras usurpadas a la etnia Ogiek. La coalici¨®n que coordino en Uganda hab¨ªa llevado la apropiaci¨®n de tierras pastoriles a la Comisi¨®n en 2015, y estamos entusiasmados con este veredicto.

P: Ahora preside la nueva Red Pastoril del Este y Sur de ?frica (ESAPN), creada bajo el auspicio de la FAO. ?Cu¨¢les son los planes inmediatos de la red y qu¨¦ se propone lograr?

Los gobiernos del este y sur de ?frica deben reconocer la movilidad, incluyendo la transfronteriza, como una cuesti¨®n de subsistencia para las comunidades pastoriles

R: La prioridad ahora es crear una red fuerte y visible que d¨¦ voz a los pastores de la regi¨®n, y crear v¨ªnculos s¨®lidos con otras organizaciones nacionales, regionales e internacionales con intereses parecidos. La red tambi¨¦n se propone integrar a todos los pa¨ªses de la regi¨®n, empezando por Angola, Zimbabue y Botsuana. Adem¨¢s de con la FAO y su Centro de Conocimiento Pastoril, ya estamos en contacto con IGAD; la Alianza para la Seguridad Alimentaria en ?frica; la Coalici¨®n de Lobbies Europeos para el Pastoreo en ?frica del Este (CELEP), y el Instituto Internacional de Investigaci¨®n sobre Ganado (ILRI). Adem¨¢s, queremos tener un papel activo en los foros sobre pastoreo de la Uni¨®n Africana y en la Alianza Mundial de Pueblos Ind¨ªgenas M¨®viles (WAMIP).

P: ?C¨®mo ve el futuro del pastoreo en la pr¨®xima d¨¦cada?

R: El pastoreo seguir¨¢ existiendo, pero probablemente depender¨¢ de menos personas con reba?os m¨¢s grandes. Ello se debe a que, si no se frena el cambio clim¨¢tico y los gobiernos no adoptan las medidas adecuadas, habr¨¢ cada vez m¨¢s pastores pobres que pierdan todo su ganado. Los m¨¢s ricos, capaces de transportar a sus animales o de comprar agua y pastos, aguantar¨¢n y, posiblemente, prosperar¨¢n.