C¨®mo afecta a mi desarrollo lo que come pap¨¢

Decidir ser padres es una gran responsabilidad, eso no es nada nuevo, pero la comprensi¨®n profunda de lo que ello significa es un camino que todav¨ªa tiene muchos matices por descubrir. Estudios cient¨ªficos recientes sobre la paternidad han revelado lo que de manera instintiva ya se sabe, que decidir ser padre es un rol mucho m¨¢s vital para los progenitores de lo que a priori pueda parecer.

El cerebro del padre trata de forma distinta a un hijo de una hija

La cuesti¨®n de si se prefiere a un hijo o a otro, o de si se trata de forma diferente a un hijo de una hija tiene su raz¨®n de ser. Existen cuestiones biol¨®gicas, culturales, psicol¨®gicas, etc.¡­, pero sobre todo cient¨ªficas. Los ¨²ltimos estudios demuestran que la figura del padre tiene cada vez m¨¢s efectos positivos en sus hijos, no obstante, la relaci¨®n que mantiene con las hijas difiere de la de los varones, seg¨²n la ¨²ltima investigaci¨®n publicada en la revista Behavioural Neuroscience de la American Psychological Association. El estudio sugiere que los padres con hijas peque?as son m¨¢s atentos y responden m¨¢s sus necesidades en general que la de los padres con hijos peque?os, de acuerdo con escaneos cerebrales y grabaciones de las interacciones diarias de los padres con sus hijos realizadas en la investigaci¨®n.

En el estudio tambi¨¦n se ha concluido que los padres de las ni?as les cantaban m¨¢s a menudo y hablaban de forma m¨¢s abierta sobre las emociones, incluyendo la tristeza, posiblemente porque aceptaban m¨¢s los sentimientos de las muchachas que la de los ni?os, seg¨²n palabras de la pionera del estudio, Jennifer Mascaro, antrop¨®loga del departamento de familia y medicina preventiva de la Universidad de Emory. Los padres de los ni?os, en cambio, participaban en juegos m¨¢s ¨¢speros y usaban un lenguaje m¨¢s relacionado con el logro (palabras como orgullo, triunfo o superior fueron las m¨¢s usadas). En opini¨®n de Mascaro, ¡°debemos ser conscientes de c¨®mo inconscientes nociones de g¨¦nero pueden jugar en la forma en que tratamos a los ni?os muy peque?os", asegura. Sin embargo, m¨¢s all¨¢ de tratar de manera distinta a los hijos seg¨²n su g¨¦nero, el hecho es que existen sutiles diferencias cerebrales.

Mauricio Conejo, neurocient¨ªfico y director del Instituto de Neurociencia Cognitiva INCyT, explica que las experiencias sensoriales cerebrales se procesan de manera diferente, pero que pueden alcanzar los mismos fines. ¡°En el desarrollo del cerebro masculino impera la testosterona que junto con la vasopresina influye en el comportamiento sexual, la agresi¨®n y otras funciones sociales. En el cerebro femenino, en cambio, la hormona que juega el papel estelar es el estr¨®geno que junto con la oxitocina media los comportamientos maternos, el reconocimiento social, el contacto afectivo y la vinculaci¨®n de parejas¡±, expone

Eres lo que come tu padre

La dieta habitual que sigue la figura paterna tanto antes como despu¨¦s de la concepci¨®n es lo que le influir¨¢ a tu hijo, desde su capacidad de tener hijos, la estatura y el peso que tendr¨¢n hasta la edad de cinco a?os como indica otra investigaci¨®n cient¨ªfica. Al parecer, los hombres no solo pasan material gen¨¦tico a su descendencia, sino que la dieta de un padre puede afectar la habilidad de su hijo para competir en el esperma de su rival despu¨¦s del apareamiento.

El estudio, publicado en la revista cient¨ªfica Biology Letters, desmiente las teor¨ªas a favor que argumentan la idea de que los hombres solo pasan material gen¨¦tico y nada m¨¢s a su descendencia.

¡°Descubrimos que los progenitores que segu¨ªan una dieta alta en prote¨ªnas, produc¨ªan hijos con una calidad esperm¨¢tica mejor que los de bajas prote¨ªnas. Esto significa que su esperma ten¨ªa m¨¢s posibilidades de ganar a sus rivales¡±, manifestaba Suzanne Zajitschek, una de las principales autoras del estudio de la Facultad de Ciencias Biol¨®gicas de la Universidad de Monash (Australia) en un comunicado.

Por su parte, Mauricio Conejo tambi¨¦n considera el determinismo gen¨¦tico como un mito. ¡°Lo que existe es una combinaci¨®n de factores gen¨¦ticos, ambientales y nutricionales para el correcto desarrollo del hijo, sea hembra o var¨®n, para su evoluci¨®n tanto f¨ªsica como mental¡±, explica.

Los padres que se implican ayudan a sus beb¨¦s a que aprendan m¨¢s r¨¢pido

Los padres implicados con sus hijos les ayuda a tener un mejor desarrollo cognitivo. Para Mauricio Conejo, la educaci¨®n temprana en hijos e hijas es fundamental. ¡°Aunque existen diferencias en ambos cerebros, la realidad es que ambos pueden aprender lo mismo y adquirir las mismas habilidades. Por lo tanto, la educaci¨®n tiene una influencia marcada en la construcci¨®n de g¨¦nero y las ideas estereotipadas que se asocian a ¨¦ste¡±, comenta el experto. ¡°Como padres podemos recurrir a preguntas que le permitan al hijo identificar y nominar las emociones que est¨¢ sintiendo permiti¨¦ndoles ampliar su vocabulario emocional y propiciar un manejo m¨¢s consciente de las emociones¡±, a?ade.

Sobre esto habla otra reciente investigaci¨®n publicada en Infant Mental Health Journal, la cual asegura que los ni?os cuyos padres se involucran m¨¢s, son m¨¢s sensibles y menos controladores en sus interacciones, obtuvieron una mayor puntuaci¨®n en el MDI (?ndice de Desarrollo Mental), utilizado en la investigaci¨®n para medir el desarrollo cognitivo de los ni?os. En cambio, los ni?os cuyos pap¨¢s presentaron conductas m¨¢s despegadas y depresivas en las interacciones padre-hijo durante los tres primeros meses, obtuvieron una puntuaci¨®n m¨¢s baja de dicho ¨ªndice.

Estos resultados indican que las interacciones padre-hijo a una edad temprana y hasta los 24 meses de edad influyen potencialmente, si la crianza es positiva y el padre pasa mucho tiempo con sus hijos peque?os, en el desarrollo cognitivo de los ni?os form¨¢ndoles m¨¢s velozmente en todas las habilidades cognoscitivas: inteligencia, conductismo, percepci¨®n, atenci¨®n, memoria etc¡­

Una de las mejores herramientas que hoy en d¨ªa se recomienda para el manejo de las emociones que pueden practicar los ni?os desde edades tempranas es el Mindfulness. Conejo, especializado en esta materia, recomienda su pr¨¢ctica para reconocer los prejuicios internos y las generalizaciones, as¨ª como para desarrollar la compasi¨®n, la ecuanimidad y la tolerancia.