Un nuevo modo de trabajar por los ODS

Hoy, 25 de septiembre, se cumplen dos a?os desde la aprobaci¨®n de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la gran hoja de ruta de la comunidad internacional para alcanzar un mundo m¨¢s pr¨®spero y pac¨ªfico para todos. Adem¨¢s de establecer un ambicioso conjunto de 17 objetivos integrales, la agenda ha supuesto un cambio de paradigma a la hora de abordar los complejos desaf¨ªos del desarrollo. Esto requiere a su vez mayores esfuerzos y nuevas metodolog¨ªas para garantizar su principal fin, que es erradicar la pobreza y mejorar la vida de todas las personas.

En primer lugar, la Agenda integra la m¨¢xima de ¡°no dejar a nadie detr¨¢s¡±. Esto significa, por ejemplo, erradicar la pobreza extrema por completo en todo el mundo, que seg¨²n los ¨²ltimos datos del informe de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2017 a¨²n afecta a 767 millones de personas, o acabar con el hambre, que padecen 815 millones. Metas de tal magnitud no pueden lograrse tan solo con el esfuerzo gubernamental, por ello la Agenda exige un trabajo conjunto y coordinado entre actores tradicionales y no tradicionales, incluyendo gobiernos, organismos internacionales, sociedad civil, mundo acad¨¦mico y sector empresarial.

En segundo lugar, la Agenda propone la multidimensionalidad, es decir, asumir que los desaf¨ªos del desarrollo como pueden ser la falta de salud, de educaci¨®n, de agua y saneamiento, la seguridad alimentaria, la igualdad de g¨¦nero o la participaci¨®n pol¨ªtica son complejos y est¨¢n relacionados entre s¨ª. Un programa de desarrollo en un ¨¢rea espec¨ªfica, por tanto, deber¨¢ tener en cuenta y abordar todos estos factores para garantizar mejores resultados y m¨¢s sostenibles en el tiempo.

A tercer lugar, la de la Agenda 2030 consagra la universalidad. A diferencia de los anteriores Objetivos de Desarrollo del Milenio, los ODS rompen con la dial¨¦ctica tradicional de pa¨ªses ricos y pobres, desarrollados y en desarrollo. Esto implica convocar a todos los pa¨ªses para implementar la Agenda, evaluando cu¨¢les son sus desaf¨ªos sociales, econ¨®micos y medioambientales, teniendo en cuenta sus circunstancias nacionales y estableciendo estrategias para abordarlos de forma efectiva.

Como primer mecanismo de Naciones Unidas creado espec¨ªficamente para el logro de los ODS, el Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible ha centrado sus esfuerzos en dise?ar iniciativas y programas piloto de desarrollo a la altura de las nuevas exigencias de la Agenda 2030. El ¨¦xito obtenido en estos dos primeros a?os, con m¨¢s de una veintena de programas conjuntos puestos en marcha en ?frica, Asia, Am¨¦rica Latina y Oriente Medio, nos dan algunas pistas de c¨®mo pueden ser los programas de desarrollo sostenible.

Los programas conjuntos son as¨ª denominados porque en ellos participan, desde las fases iniciales de dise?o y planificaci¨®n, todos los actores del desarrollo. Est¨¢n presentes un m¨ªnimo de tres agencias especializadas de Naciones Unidas, el gobierno, instituciones regionales y locales, la sociedad civil y tambi¨¦n empresas privadas. M¨¢s de 2.000 personas han sido consultadas para la formulaci¨®n de los programas del Fondo ODS. Trabajar conjuntamente es un desaf¨ªo para coordinar los esfuerzos y roles de cada actor del desarrollo, pero al mismo tiempo, asegura un mejor an¨¢lisis y comprensi¨®n de los retos y soluciones m¨¢s robustas e integradas para hacerles frente.

La cooperaci¨®n al desarrollo tiene que estar centrada en las personas y responder a las prioridades nacionales

La apropiaci¨®n nacional es tambi¨¦n otro elemento clave en los programas del Fondo. La cooperaci¨®n al desarrollo tiene que estar centrada en las personas y responder a las prioridades nacionales. Los mecanismos de gobernanza del Fondo ODS aseguran la plena participaci¨®n del gobierno nacional y sus socios. Adem¨¢s, los gobiernos asumen m¨¢s f¨¢cilmente las iniciativas cuando estas se basan en sus visiones, estrategias y marcos de actuaci¨®n, garantizando a su vez que los proyectos puedan expandirse e incluso replicarse a largo plazo.

Precisamente, para reforzar el sentido de apropiaci¨®n nacional, otra condici¨®n que incluyen todos nuestros programas son los fondos de contrapartida. Se trata de fondos adicionales que aportan los socios nacionales, ya sean las propias instituciones de gobierno, sector privado o inversores extranjeros y que deben como m¨ªnimo igualar las cantidades aportadas por el Fondo ODS. De hecho, en estos momentos el 56% del presupuesto total de los programas provienen de los fondos de contrapartida. Con esto se consigue, en primer lugar, reforzar el sentido de apropiaci¨®n nacional por parte de los socios nacionales as¨ª como el ¨¦xito y la sostenibilidad de los programas, y en segundo, duplicar el presupuesto del programa.

Los programas conjuntos lanzados hasta la fecha han dado resultados muy positivos. Desde la creaci¨®n de sistemas de producci¨®n agr¨ªcola sostenible en Bolivia para mejorar aumentar los ingresos de las familias m¨¢s pobres y mejorar la nutrici¨®n de menores y madres; hasta los programas de empleo para empoderar econ¨®micamente a las mujeres en Palestina; pasando por talleres para mejorar de la gobernanza y el acceso al agua potable, el saneamiento y la higiene en Filipinas; o el impulso de acuerdos locales para fomentar de empleos dignos y oportunidades econ¨®micas en Mozambique, en colaboraci¨®n con industrias de extracci¨®n y cooperativas locales. La metodolog¨ªa ODS aplicada en estos programas ha permitido mejorar las vidas de m¨¢s de 3,5 millones de personas.

Estos programas est¨¢n generando nuevas pol¨ªticas m¨¢s justas y m¨¢s sostenibles, que tienen en cuenta los principios de la Agenda 2030. Pero probablemente la principal conclusi¨®n es que en el tiempo que tenemos por delante para lograr los ODS, necesitamos encontrar nuevos modos de trabajo, nuevas formas de colaboraci¨®n y una nueva forma de entender los desaf¨ªos del desarrollo. Lograr un mundo sostenible en 2030 en posible aunando los esfuerzos de gobiernos, empresas, sociedad civil y universidades. El objetivo final, que es atender cada persona en su situaci¨®n de necesidad, merece la pena.

Paloma Dur¨¢n es la directora del Fondo de Naciones Unidas para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (Fondo ODS).

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