Historia de la perforadora de papel, ingenier¨ªa alemana al servicio dom¨¦stico

De f¨¢cil manejo y de incalculable valor para el orden y el almacenamiento de?papeles. As¨ª de simple y rudimentaria es la definici¨®n de la perforadora de papel, todo lo contrario que su funcionamiento, ya que tras siglo y medio de imparables avances t¨¦cnicos y tecnol¨®gicos, permanece inalterable.

Puede cambiar su fisonom¨ªa, el colorido y el material con el que se presenta al?p¨²blico, pero su esencia y eficacia siguen siendo las mismas que cuando se?inventaron. De hecho, se siguen viendo como una herramienta?familiar en las casas y un instrumento imprescindible en las oficinas.

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Aunque no se sabe con exactitud qui¨¦n fue el inventor de la perforadora de papel,?todo apunta a la ingenier¨ªa alemana y al a?o 1886. Ese a?o Friedrich Soennecken?la patent¨® en Alemania y la mayor¨ªa de fuentes lo se?alan como el creador de la?taladradora de papel. Sin embargo, coet¨¢neo de ¨¦l y un a?o antes, parece que?Benjamin Smith, en Massachusetts, hizo otra patente aunque para un uso distinto del que conocemos. Era un coleccionista de entradas de espect¨¢culos y la invent¨®?para marcarlos. M¨¢s tarde, en 1893 fue patentada otra perforadora bastante?eficiente y de un funcionamiento distinto por Charles Brooks, tambi¨¦n en Estados?Unidos, aunque este la llam¨® perforadora de t¨ªquets.

Con el inicio de la era inform¨¢tica la manera de almacenar informaci¨®n tambi¨¦n?cambi¨®, pero las perforadoras manuales continuaron siendo un utensilio?imprescindible tanto en las oficinas como en los domicilios. En 1958 el gigante de la?inform¨¢tica IBM cre¨® una perforadora port¨¢til de tarjetas de bolsillo que se llamaba?Port-A- Punch para manejar menor la informaci¨®n.

Ya en la d¨¦cada de los a?os 70 del pasado siglo se explor¨® la sustituci¨®n de las?tarjetas perforadas por formas de almacenamiento magn¨¦tico. Para los a?os 90 el?trasvase de informaci¨®n del papel a los archivos de ordenadores era una realidad?en la mayor¨ªa de empresas. Sin embargo, las perforadoras de oficina siguieron sin?desaparecer y, por supuesto, funcionando.

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La historia de la perforadora de papel es incre¨ªble.?Es m¨¢s, la sofisticaci¨®n y la moda tambi¨¦n llegaron a los dise?os de estos utensilios, que empezaron a ser m¨¢s ligeros, m¨¢s port¨¢tiles, con colores m¨¢s?llamativos, e incluso estaban pensados para conseguir formas originales a la hora de hacer agujeros.

En 1989 incluso se invent¨® la perforadora de papel el¨¦ctrica. Fueron Masayoshi?Ikarashi y Kunihati Okazaki quienes la inventaron, aunque no tuvo la suficiente?aceptaci¨®n como para perpetuarse en el tiempo.

El mecanismo de funcionamiento es sencillo ya sea de un agujero o de m¨²ltiples, ya?que las hay hasta de ocho agujeros, tiene una larga palanca que se usa para?ejercer presi¨®n sobre un cilindro afilado que traspasa una o varias hojas de papel.?Como la distancia que recorre el cilindro es unos pocos mil¨ªmetros puede situarse a un cent¨ªmetro del fulcro de la palanca. Para un n¨²mero de hojas reducido, la palanca no hace falta que sea mayor a 8 cent¨ªmetros para poder ejercer la fuerza suficiente. Sin embargo, las perforadoras industriales -para cientos de hojas- tienen brazos mucho m¨¢s largos, aunque siguen el mismo funcionamiento.

La inc¨®gnita siempre estar¨¢ en si ser¨¢n muchos los papeles que queremos agujerear o tendremos suficiente fuerza para hacerlo, pero la respuesta muchas veces nos viene dada por la propia perforadora, que en sus versiones m¨¢s sofisticadas permite solo un determinado n¨²mero de papeles para agujerear de forma precisa y siempre centrada.

La segunda parte de la operaci¨®n es comprobar esos c¨ªrculos perfectos que forman?los desechos de los taladros y que cuando los papeles son de colores forman un?simp¨¢tico confeti.