La ¡®app¡¯ para madres que buscan amigas

DE NI?A, Michelle Kennedy pensaba que no hab¨ªa nada mejor en el mundo que llegar a ser m¨¦dico o abogada, pero al final esta brit¨¢nica de 34 a?os ha acabado dedic¨¢ndose al negocio de las citas por Internet. El t¨ªtulo de letrada s¨ª que lo tiene, pero se hart¨® de la rutina del despacho, del ¨¢rea de fusiones y adquisiciones de una firma internacional, de las jornadas maratonianas. Hace siete a?os un colega le ofreci¨® dirigir el departamento legal de Badoo, una web de contactos que revolucion¨® el dating online (o lo que es lo mismo: tener encuentros en el ciberespacio). ¡°Y aunque al principio no lo tuve claro, aceptarlo fue lo mejor que pude hacer en mi vida¡±, admite. Convertida en toda una experta del mercado de contactos, Kennedy vuela ahora sola con su primera criatura digital: Peanut, una especie de Tinder de madres que buscan amigas con las que compartir experiencias y aficiones. Reacia a aportar datos sobre el presupuesto de la compa?¨ªa, Kennedy solo dice que en un a?o ha conseguido m¨¢s inversi¨®n y que ya est¨¢n presentes en Reino Unido, Estados Unidos y Canad¨¢.

La idea se le ocurri¨® cuando dio a luz a su primer hijo. ¡°Hubo momentos en los que me sent¨ª muy sola. Pensaba en las mujeres que no sabr¨¢n a qui¨¦n acudir cuando el beb¨¦ empieza a llorar por las noches¡±, cuenta desde el hall de un lujoso hotel de Lisboa, horas antes de que tenga lugar su charla en el Web Summit, la mayor conferencia tecnol¨®gica del mundo. Ella hablar¨¢ sobre el incipiente papel de la mujer en el universo tech. Un tema que conoce muy bien tras su paso por Badoo y por Bumble, la aplicaci¨®n donde solo las chicas pueden iniciar conversaciones para ligar. ¡°Tenemos un largo camino por recorrer, este sector todav¨ªa es muy masculino, pero vamos progresando¡±, reconoce. ¡°Lo importante es que cada vez hay m¨¢s emprendedoras que se lanzan al mercado digital. Nosotras conocemos mejor que nadie nuestras necesidades y podemos dar las mejores soluciones¡±, explica con el m¨®vil pegado todo el rato a su mano.

Kennedy tiene casi 30 apps?instaladas en su iPhone. Admite que no puede vivir sin ellas. ¡°La mayor¨ªa son redes sociales, varias son para viajar, otras de comida a domicilio, juegos para mi ni?o, tengo una app que me ayuda a dormir, y Peanut, claro¡±. Cuenta que cuando visita una nueva ciudad aprovecha para pedir recomendaciones a las madres del lugar que est¨¦n conectadas. Las usuarias tienen entre 25 y 34 a?os, son mujeres trabajadoras que han perdido su vida social por la maternidad y quieren recuperarla, volver a quedar con amigas. ¡°Recuerdo que cuando me reun¨ªa con los primeros inversores (todos hombres) para conseguir financiaci¨®n me preguntaban: ¡®?De verdad las madres necesitan esto?¡¯. Les llevaba datos del n¨²mero de chicas que hab¨ªan sufrido depresi¨®n despu¨¦s de tener hijos. No fue nada f¨¢cil, pero al final vieron el negocio. No hay que rendirse nunca¡±. Y a?ade: ¡°Hay que ser realistas: no se puede ser una supermami y una superjefa a la vez. El equilibrio es imposible. Hay mucha presi¨®n con esto y depende de la persona y de cada d¨ªa. No se nos puede exigir m¨¢s¡±.