Turqu¨ªa retr¨®grada
La defensa del matrimonio infantil por la Direcci¨®n de Asuntos Religiosos enciende las alarmas
La deriva autoritaria que vive Turqu¨ªa desde que accedi¨® al poder el partido islamista del presidente Recep Tayyip Erdogan ha tenido en los ¨²ltimos d¨ªas un nuevo e inquietante episodio: la Direcci¨®n de Asuntos Religiosos (Diyanet), la autoridad que gestiona la vida religiosa del pa¨ªs, ha defendido que las ni?as puedan casarse a los nueve a?os y los ni?os a los doce.
Esta involuci¨®n teocr¨¢tica amenaza ahora con alcanzar a uno de los principios de la rep¨²blica laica, la prohibici¨®n del matrimonio infantil. La ley establece en 18 a?os la edad m¨ªnima para casarse y permite uniones a partir de los 16 con autorizaci¨®n de un juez.
Aunque la declaraci¨®n de Diyanet fue retirada a la vista de las reacciones y el Gobierno ha desmentido que proyecte cambios legales, muchos observadores lo han considerado un globo sonda destinado a evaluar la resistencia que encontrar¨ªa permitir el matrimonio infantil, algo que una parte de la doctrina isl¨¢mica no solo tolera sino que alienta. Ser¨ªa un nuevo e intolerable paso atr¨¢s por parte de un Estado cada vez m¨¢s dominado por la estructura religiosa.
En 2008 Diyanet declar¨® inmoral el feminismo y hace dos a?os sostuvo que ¡°no es necesariamente pecado que un padre tenga deseos lujuriosos por su hija¡±. Recientemente se cambi¨® la ley para rebajar las penas a los adultos que tuvieran relaciones sexuales con menores de 15 a?os y se lleg¨® a presentar un proyecto de ley, que la oposici¨®n logr¨® frenar, por el que el violador de una menor pod¨ªa eludir la c¨¢rcel si se casaba con ella.
El matrimonio infantil es una lacra que aboca a muchas ni?as al abuso sexual, les impide el acceso a la educaci¨®n y las condena a una vida de dependencia y sumisi¨®n. Es de esperar que la sociedad laica turca tenga la vitalidad suficiente para detener la erosi¨®n democr¨¢tica y la involuci¨®n que alienta el proyecto pol¨ªtico de Erdogan.
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