¡°Es conveniente abordar la pol¨ªtica en las aulas, pero siempre desde el respeto¡±

M¨¢s informaci¨®n

?Es una irresponsabilidad llevar al ni?o con fiebre a clase?

¡°Estar¨¢s contento con lo que ha hecho tu padre¡±

Multas por llegar tarde a clase

La RAE define adoctrinar como ¡°inculcar a alguien determinadas ideas o creencias¡±. Pueden estar relacionadas con la pol¨ªtica, la religi¨®n, las clases sociales... Y aunque algunos ponen en duda su existencia, hay estudios que lo certifican. Como este, publicado por la American Sociological Review en 1963. El caso es que de un tiempo a esta parte es un verbo que se conjuga con mucha frecuencia. Lo que no es tan habitual es referirse a c¨®mo ese adoctrinamiento puede repercutir en quien lo recibe, es decir, los alumnos. No olvidemos que estamos hablando de menores de edad, es decir, material sensible. Lo es tanto, que recibir determinados mensajes de los profesores puede infundirles inseguridad a los cr¨ªos. M¨¢s a¨²n si las opiniones de padres y docentes difieren.

M¨®nica Gonzalo, experta en Psicolog¨ªa Infantil Psic¨®logos Pozuelo: ¡°Para poder crecer de manera sana, los ni?os y ni?as requieren de un entorno de seguridad y protecci¨®n desde etapas muy tempranas. Sin defender a unos u otros, entre todos, estamos cuestionando los pilares b¨¢sicos sobre los que todo menor se sustenta para poder nutrirse y madurar de manera saludable; estos son, el sistema familiar, el sistema educativo, y el sistema social¡±. La psic¨®loga se refiere en concreto a los comentarios en contra de la polic¨ªa, los padres o los profesores a ra¨ªz del 1-O. ¡° Es importante que los ni?os puedan confiar en la bondad de los profesores para educar, en la seguridad de la polic¨ªa para proteger, y en el afecto de los padres para cuidar y educar¡±, comenta Gonzalo.

Mercedes Bermejo, coordinadora del curso Experto en Terapia Familiar Sist¨¦mica de la Universidad Complutense de Madrid insiste en la importancia de los mensajes que reciben los ni?os de los adultos, pero a¨²n m¨¢s en el estado emocional de su entorno. ¡°Con la situaci¨®n en Catalu?a muchas familias se han visto afectadas a nivel laboral, social, econ¨®mico, e incluso familiar. Y los ni?os, para crecer, necesitan calma, rutinas, estabilidad, mensajes de seguridad¡­¡±. Gonzalo a?ade: ¡°Es obvio que la existencia de un conflicto familiar no beneficia a ning¨²n ni?o o ni?a, y lo mismo ocurre con el conflicto social en el que se ha visto sumergido nuestro pa¨ªs en los ¨²ltimos meses que ha enfrentado a la poblaci¨®n¡±. Este estudio de la Universidad de La Sabana (Colombia) sobre la agresividad de los ni?os en funci¨®n del medio familiar y el entorno escolar lo pone de manifiesto. As¨ª como este otro en el que se detalla la teor¨ªa del apego (¡°permite al sujeto conseguir o mantener proximidad con otra persona diferenciada y generalmente considerada m¨¢s fuerte y/o sab¨ªa¡±) publicado en la Revista Latinoamericana de Psicolog¨ªa en 2006.

Pero esto no quiere decir que no se puedan tratar temas de actualidad o conflictos en la escuela. Al contrario. ¡°Es importante que la escuela aborde asuntos como el terrorismo, la violencia de g¨¦nero, y, porque no, ya, tambi¨¦n la situaci¨®n de Catalu?a. No podemos permitir que en las escuelas se censuren estos temas. Los alumnos tienen derecho a saber qu¨¦ es lo que est¨¢ pasando. Pero con neutralidad, adaptando la informaci¨®n, a su etapa evolutiva y caracter¨ªsticas individuales¡±, afirma Bermejo. Y Gonzalo contin¨²a: ¡°Los ni?os tienen derecho a disponer de espacios protegidos donde expresar su opini¨®n, sentimientos, pensamientos¡­ Es conveniente abordar la pol¨ªtica en las aulas, pero siempre desde el respeto¡±.

Hasta tal punto es as¨ª, que Mercedes Bermejo lo entiende como una oportunidad: ¡°Es posible aprovechar circunstancias como estas para reflexionar y, de paso, ense?arles a pensar, transmitirles la importancia de valores positivos y de respeto por el otro¡±, incluso si se opina distinto de nosotros, por supuesto. Y concluye: ¡°La escuela debe permitir que existan opiniones distintas sin que inciten al odio. Resolver inquietudes pol¨ªticas est¨¢ bien, promoviendo el pensamiento cr¨ªtico, desde una postura neutral de los maestros¡±, concluye la psic¨®loga.

De todas las situaciones se puede aprender. Y de esta, en concreto, a resolver conflictos. M¨®nica Gonzalo se queja de que se ha hecho lo contrario: ¡°La falta de habilidades para resolver una situaci¨®n de hostilidad y enfrentamiento entre la poblaci¨®n es un mal ejemplo m¨¢s para nuestros hijos. Hemos pensado en ellos menos de los que deber¨ªamos haber hecho¡±. Por eso, Mercedes Bermejo pide a los padres, familiares, maestros y gobernantes ¡°que llevemos a cabo las medidas necesarias para dar un ejemplo a los m¨¢s peque?os de democracia, tolerancia y libertad de expresi¨®n en todos los ¨¢mbitos. Lo merecen, lo merecemos¡±.