Afortunadamente, el jazz no es un ¡®gin tonic¡¯

Cuando, para regocijo del fot¨®grafo, Stephen Bruner alias Thundercat, se ofrece a cambiarse de ropa por tercera vez, este periodista entra en los asuntos est¨¦ticos. ?A qui¨¦n debe su imagen este extravagante cantante y bajista, estrella del postjazz? ?A George Clinton? ?A Dr. John? ?A Sun Ra? ?A Prince? ?A la NBA? ¡°S¨ª, t¨ªo¡±, contesta, lleno de admiraci¨®n, ¡°y a Elton John, Miles Davis o los Isley Brothers, t¨ªo¡±. ?Y esos anillos? ¡°Muchos son signos del zodiaco chinos. No es el m¨ªo, pero me inspiran esos animales. Sobre todo, tigres y gatos. Ya sabes: soy Thundercat¡±.

Su signo es la rata, ya que estamos. Esto le convertir¨ªa en un tipo simp¨¢tico, de f¨¢cil conversaci¨®n, r¨¢pido e inteligente, que apunta bien el tiro en los negocios y suele tener la soluci¨®n para ese problema que nadie sabe resolver. A este perfil m¨¢s que posible hay que sumar su virtuosismo ¨Cla velocidad de sus dedos sobre el m¨¢stil de un bajo Ibanez de seis cuerdas recuerda al gran Jaco Pastorius¨C y esa cosa que tienen los grandes artistas, que se preguntan ?c¨®mo que no se puede mezclar esto con esto otro?

A nuestro hombre (Los ?ngeles, 1984) se le conoce y admira por sus colaboraciones con estrellas como Kendrick Lamar, Kamasi Washington, Flying Lotus o Erykah Badu, pero el valor fundamental de su trabajo es su capacidad de fusionar discursos con sensibilidad contempor¨¢nea y exquisito gusto urbano. Su nuevo disco, el tercero como solista, fluye como una renovaci¨®n del jazz con voz r&b, mentalidad hip hop y duraciones punk (temas de dos minutos y medio). Drunk [Borracho] habla de un estado de las cosas: ¡°Describe esa sensaci¨®n de embriaguez o, mejor, de la resaca que me produce el mundo. Ese mareante conjunto de horrores: la cultura de la violaci¨®n, el tarado de Trump flirteando con la guerra nuclear, la vuelta de la esclavitud en Libia¡­ Para m¨ª eso es Drunk¡±.

La gente desea decir que el jazz, el hip hop o el punk han muerto. Pero no, t¨ªo, lo que te pasa es que est¨¢s viejo. La m¨²sica es como una gota que cae, hace ondas, y no sabes hasta d¨®nde. Vivimos una nueva era¡±

Como no todo es terrible y Thundercat (nombre tomado en su infancia de una serie de animaci¨®n) es un tipo divertido, no tarda en recordar las maravillas del mundo. ¡°Me encanta todo lo que pasa. Esa sensaci¨®n de descubrir algo y ponerte a indagar, ese hambre que te hace comprar vinilos. ?Qu¨¦? Ski Mask the Slump God, ese t¨ªo rapea incre¨ªble. Me encanta el nuevo disco de NERD. El nuevo de Charlotte Gainsbourg, con esa cosa slow synth¡­¡±.

En su nuevo trabajo colaboran Kendrick Lamar, Pharrell Williams, su amigo Flying Lotus (¡°un visionario; un hombre que ve a todo color¡±) o el renovador del jazz Kamasi Washington (¡°siempre en la frontera de la m¨²sica¡±). E invitados inesperados: Kenny Loggins, el de Footlose, Michael McDonald (Steely Dan) y estrellas del soft rock (?qui¨¦n esperar¨ªa escucharlo hoy desde esta perspectiva?). ¡°La m¨²sica es un mundo enorme, siempre hay un lugar en el que encontrarse. La gente desea decir que el jazz, el hip hop o el punk han muerto. Pero no, t¨ªo, lo que te pasa es que est¨¢s viejo. La m¨²sica es como una gota que cae, hace ondas, y no sabes hasta d¨®nde. Vivimos una nueva era¡±.

Su generaci¨®n es el futuro de los grandes festivales de jazz que llevan a?os parcheando la falta de talentos con remedos de world music o restos rockeros. ¡°Stanley Clarke me contaba que tuvo que girar con Led Zeppelin. Creo que es genial. A veces siento que la gente espera suavidad del jazz. Pero el jazz debe estar integrado, ser parte de la cultura, ocupar el mismo lugar que U2. Volver a unirlo todo es devolver la m¨²sica a su origen. Kendrick Lamar entiende bien eso¡±, dice.

Y recuerda uno de los discos de este, el enorme To pimp a butterfly, cuyo tema These walls brind¨® a Thundercat un Grammy en 2016 a la mejor colaboraci¨®n en rap. ¡°Ah¨ª tienes un proyecto masivo, repleto de colaboraciones dispares. ?C¨®mo fue posible? Pues porque todo el mundo est¨¢ abierto a la conversaci¨®n. ?Por qu¨¦ crees que a la gente del metal le gusta tanto el jazz?¡±, pregunta ¨¦l, que pas¨® a?os aporreando el bajo en Suicidal Tendencies. ¡°Porque es lo mismo. Incluso si escuchas a Black Sabbath, puedes descubrir el jazz. Al final del d¨ªa siempre es la yuxtaposici¨®n, t¨ªo¡±.