El lugar adecuado
ESOS P?RPADOS de pl¨¢stico o de madera a media asta recuerdan a escenas del cine policiaco, y del er¨®tico, pero tambi¨¦n del de esp¨ªas. La alternancia de listones y de franjas de luz nos traen asimismo a la memoria las viejas pel¨ªculas porno codificadas de Canal+ y, c¨®mo no, lo que de adolescentes imagin¨¢bamos al asomarnos desde la ventana de nuestro dormitorio al de la ?vecina, que antes de acostarse bajaba las persianas dejando con tres palmos de narices al mir¨®n. Para que se den todas esas evocaciones, es preciso que afuera sea de noche y que dentro se encuentren encendidas las l¨¢mparas, como sucede en la fotograf¨ªa. Imaginamos al periodista recorriendo un Berl¨ªn oscuro y fr¨ªo en busca de un testimonio que al fin logra obtener, siquiera de manera parcial.
F¨ªjense: la mujer rubia de la chaqueta rosa, que permanece de espaldas a la ventana del centro, es nada m¨¢s y nada menos que Angela Merkel. Y el se?or de barba y gafas que se encuentra frente a ella, Martin Schulz, l¨ªder del Partido Socialdem¨®crata alem¨¢n. ?Qu¨¦ hacen en medio de esa clandestinidad imperfecta tan excitante de observar desde las sombras? Negocian el reparto de carteras en el nuevo Gobierno. He ah¨ª la cocina de la gran coalici¨®n bis llevada a cabo en el centro mismo de Europa y que sin duda afectar¨¢ a los pa¨ªses de la periferia. La escena re¨²ne por tanto, en diferentes grados, porciones de cine policiaco y de cine de esp¨ªas y de cine er¨®tico, incluso de cine pornogr¨¢fico codificado. Significa que el punto de vista elegido por el fot¨®grafo para contar lo que ocurr¨ªa fue el m¨¢s adecuado. Enhorabuena.?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.