Natalie Imbruglia, 20 a?os a la sombra de ¡®Torn¡¯
La canci¨®n que catapult¨® a la cantante en 1997 sigue siendo, cuatro discos despu¨¦s, su principal ¨¦xito
Natalie Imbruglia pas¨® 2017 de concierto en concierto por Europa. La prensa brit¨¢nica se hizo eco, sobre todo, de lo bien que se conservaba a los 43 a?os. ¡°Eternamente joven¡±, ¡°Imbruglia entusiasma con su aspecto juvenil¡± rezaban varios titulares de medios sensacionalistas. Es cierto que la cantante ha sido embajadora de marcas de cosm¨¦tica como L¡¯Oreal y que ha sido noticia por ello, pero la australiana se ha hecho famosa con sus canciones. Una en particular: Torn, de 1997, un himno a los corazones rotos que alcanz¨® el n¨²mero uno en Reino Unido, B¨¦lgica, Suecia, Dinamarca, Espa?a y Canad¨¢, y que le proporcion¨® una nominaci¨®n a los Grammy en 1999. Dos d¨¦cadas despu¨¦s parece que nada ha cambiado: ella mantiene su aspecto juvenil, como dicen los tabloides, y el p¨²blico la recuerda, ¨²nicamente, por aquella canci¨®n.
Ninguno de los sencillos que ha publicado despu¨¦s ha superado el ¨¦xito de su debut, que se inclu¨ªa en Left of the Middle. Este ¨¢lbum, su m¨¢s exitoso tambi¨¦n, conect¨® con los amantes del rock femenino que a mediados de los noventa lideraban Alannis Morisette, Joan Osborne o Mederith Brooks. Imbruglia, con un aspecto delicado y trazas de grunge, encajaba perfectamente en la f¨®rmula, aunque su discogr¨¢fica buscara otra imagen. ¡°Estaba muy insegura de m¨ª misma. Quer¨ªan colocarme un vestido pero ped¨ª que me dejaran ponerme mi propia ropa y aparec¨ª con lo que llevaba todos los d¨ªas: pantalones militares y zapatillas buffalo¡±, recordaba en una entrevista para Vice en 2014.
Gracias a Torn, que era una versi¨®n de un tema de la banda californiana Ednaswap, y Big Mistake, el siguiente sencillo, Imbruglia se convirti¨® en la ni?a mimada del pop. Acaparaba premios, entrevistas y ofrec¨ªa conciertos por todo el mundo. Ese fue el pin¨¢culo de su carrera pues el inter¨¦s de los medios no fue el mismo con sus siguientes ¨¢lbumes. White Lilies Island, lanzado cuatro a?os despu¨¦s, abandonaba el desgarro y la rebeld¨ªa del primero en favor de un tono m¨¢s dulce, rom¨¢ntico y convencional. Tanto que el p¨²blico respondi¨® con tibieza. Lo mismo pas¨® con sus dos siguientes trabajos, grabados con diferentes discogr¨¢ficas. Lo que dejaba patente la inestabilidad que sufr¨ªa su carrera. Su ¨²ltimo intento por convencer al p¨²blico, m¨¢s all¨¢ de sus fieles seguidores, fue Male, publicado en 2014, un ¨¢lbum en el que versionaba canciones grabadas originalmente por artistas y grupos masculinos como Daft Punk, Cat Stevens, Damien Rice o The Cure: Una oportunidad de recuperar el sabor rebelde y oscuro de su primer ¨¢lbum que finalmente declin¨® por una producci¨®n m¨¢s luminosa.
Un pie en la actuaci¨®n
Entre disco y gira, Imbruglia ha tenido tiempo para la actuaci¨®n, la disciplina con la que se dio a conocer antes de grabar el primer disco y su gran pasi¨®n. Un papel en la serie australiana Neighbours (Vecinos) fue su primera incursi¨®n en el arte dram¨¢tico, entre 1992 y 1994. El programa se emiti¨® en varios pa¨ªses europeos, entre ellos Reino Unido. Por eso decidi¨® instalarse en Londres, donde llegaba con una buena carta de presentaci¨®n para dar el salto internacional como actriz.
Sus primeros pasos en el cine, sin embargo, fueron discretos. En 2003 interpret¨® un peque?o papel en Johnny English, una parodia brit¨¢nica de las pel¨ªculas de acci¨®n y espionaje protagonizada por Rowan Atkinson. Una d¨¦cada despu¨¦s obtuvo su, hasta ahora, ¨²nico papel protagonista en el drama Closed for Winter, que narra el intento de una mujer por resolver la misteriosa desaparici¨®n de su hermana 20 a?os atr¨¢s en la playa, cuando eran ni?as. La cinta solo se estren¨® en Australia. La oferta le lleg¨® cuando ya se sent¨ªa preparada para abordar un papel grande.?
En 2009, algo m¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s de su debut discogr¨¢fico, hab¨ªa paralizado su carrera musical para estudiar arte dram¨¢tico en Los ?ngeles. Se acababa de divorciar de Daniel Johns, l¨ªder de la banda Silverchair, por la distancia (¨¦l resid¨ªa en Australia), y necesitaba un cambio en su vida. ¡°Nunca hab¨ªa tenido ninguna formaci¨®n oficial pese a haber empezado a los 16 a?os en Neighbours, cuando debut¨¦ estaba tan ocupada con mi primer ¨¢lbum que no pude plante¨¢rmelo¡±, recordaba en una entrevista con motivo del lanzamiento de Male.
En la escuela de teatro de Los Angeles Imbruglia era una m¨¢s. ¡°Alquil¨¦ un apartamento, iba a clase, com¨ªa en la cafeter¨ªa con los compa?eros¡ Tuve una verdadera vida de estudiante despu¨¦s de haber pasado toda mi vida trabajando¡±, comentaba en 2015 a la revista londinense Event Magazine.
Tras su incursi¨®n en el arte dram¨¢tico (con debut teatral en Bath en 2013), y ya nacionalizada brit¨¢nica tras dos d¨¦cadas viviendo en Londres, Imbruglia retom¨® la m¨²sica y las salas de conciertos con una gira de m¨¢s de dos a?os, que pas¨® por Barcelona. Las cr¨®nicas de aquella gira, la m¨¢s reciente, destacaban c¨®mo el p¨²blico esperaba aquel hit de 1997, una canci¨®n , agridulce que, como recordaba el cr¨ªtico de El Peri¨®dico de Catalunya, Jordi Bianciotto, ¡°sigue valiendo por una carrera¡±.
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