Hodeida, la ciudad que no ubicamos en un mapa
Casi ocho millones y medio de personas en Yemen est¨¢n en una situaci¨®n de inseguridad alimentaria extrema
Piensen en el lugar del mundo donde ?frica y Asia casi se tocan, donde a ambos continentes apenas les separan los 30 kil¨®metros del estrecho de Bab el-Mandeb, que conecta el oc¨¦ano ?ndico con el mar Rojo. Unos 250 kil¨®metros al hacia el norte por la costa de Yemen se encuentra la ciudad portuaria de Al Hudaydah, cuya traducci¨®n al ingl¨¦s es Hodeida. Quiz¨¢ les suene haberlo visto en alg¨²n hashtag los ¨²ltimos d¨ªas.
En el contexto de la que ya se ha calificado como la peor crisis humanitaria mundial despu¨¦s de tres a?os de conflicto armado en Yemen, el pasado 11 de junio se lanz¨® un ataque sobre la ciudad que la convirti¨® en el lugar m¨¢s mortal del mundo. La operaci¨®n ¡®Victoria Dorada¡¯, lanzada por el Gobierno yemen¨ª en el exilio y sus aliados Arabia Saud¨ª y Emiratos ?rabes, tiene por objetivo la ciudad debido a su car¨¢cter estrat¨¦gico. Es el punto de entrada para los suministros y la ayuda humanitaria esencial para la supervivencia de la poblaci¨®n civil.
Tres cuartas partes de los habitantes de Yemen, 22 millones de personas, necesitan protecci¨®n y ayuda. De ellas casi ocho millones y medio est¨¢n en una situaci¨®n de inseguridad alimentaria extrema, adem¨¢s de haber sufrido el peor brote de c¨®lera de la historia como corolario a la crisis sanitaria que sufre la poblaci¨®n como resultado de la falta de infraestructuras, condiciones higi¨¦nicas y suministros m¨¦dicos. La dependencia de la ayuda exterior es absoluta, e impedir que llegue constituye una m¨¢s del cat¨¢logo de vulneraciones del derecho internacional humanitario que llevan perpetr¨¢ndose por todas las partes en conflicto desde su inicio. Entre ellos los ataques indiscriminados contra poblaci¨®n civil y personal humanitario que hizo que el Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja tuviera que evacuar a sus trabajadoras y trabajadores hace algunas semanas por motivos de seguridad.
Cuando se anunci¨® la operaci¨®n militar sobre la ciudad el pasado mayo, la Oficina de Coordinaci¨®n de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas advirti¨® que 250.000 personas de las 600.000 que viven en los alrededores de la ciudad podr¨ªan verse afectadas y perderlo todo. Pese a todas las advertencias el ataque se produjo. Una desatenci¨®n a esta situaci¨®n que es la constante de los ¨²ltimos a?os. No es que no haya periodistas u organizaciones humanitarias y de derechos humanos que no lleven tiempo llamando la atenci¨®n sobre ella. El problema es que la crisis humanitaria que concita toda la atenci¨®n y los debates tiene lugar en las fronteras de acceso a Europa y Estados Unidos.
El foco en esta situaci¨®n distorsiona mucho el concepto de lo humanitario. Denominar crisis, como es natural desde hace tres a?os, al aumento de la presi¨®n migratoria en las fronteras exteriores de la Uni¨®n Europea no es neutral, sino una forma de eludir responsabilidades humanitarias poniendo el foco en las consecuencias para los pa¨ªses desarrollados de los conflictos que pocas personas ubican en un mapa. Hay, como m¨ªnimo, dos reflexiones que cabe plantear como conclusi¨®n.
La primera es la responsabilidad directa de las pol¨ªticas migratorias y de asilo de la Uni¨®n Europea en la denominada crisis de los refugiados que concentra todas las miradas. Les invito a detenerse en lo que, con motivo del d¨ªa de los refugiados el 20 de junio, han denunciado organizaciones, organismos internacionales y medios de comunicaci¨®n. Lean la lista de las 34.361 personas muertas desde 1993 tratando de llegar a Europa publicada por The Guardian.
La segunda nos lleva de vuelta a Yemen, donde a la situaci¨®n descrita al inicio, a?adan las m¨¢s de 6.000 personas muertas y 9.000 heridas durante el conflicto. Las armas que lo siguen alimentando proceden de los pa¨ªses pendientes de la otra crisis mientras llevan a cabo negocios con Arabia Saud¨ª, parte del conflicto. En el caso de Espa?a, ha triplicado en los ¨²ltimos tres a?os el suministro de municiones, siendo su principal comprador fuera de la UE y la OTAN.
Virginia Rodr¨ªguez es abogada especializada en Derechos Humanos, polit¨®loga y coordinadora de Investigaci¨®n de la Fundaci¨®n porCausa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.