Pl¨¢stico para hablar de naturaleza
El pabell¨®n catal¨¢n en la Bienal de Venecia recurre a una escenograf¨ªa on¨ªrica de lentes y pl¨¢sticos para hablar del bosque donde el estudio RCR, los Pritzker de Olot, construye su legado m¨¢s vivo
Este a?o, en la Bienal de Arquitectura Venecia ¡ªque puede visitarse hasta el siete de octubre¡ª los arquitectos de RCR ¡ªRafael Aranda, Carme Pigem y Ram¨®n Vilalta¡ª, anunciaron que hab¨ªan creado ¡°un espacio donde investigar y repensar la relaci¨®n del hombre con el mundo¡±. Ese lugar se encuentra, como era de esperar, cerca de su casa, en la Vall de Bianya (Girona), en una finca que han llamado La Vila y que han abierto a la ense?anza, la reflexi¨®n, y el di¨¢logo con la naturaleza. Ese lugar f¨ªsico, desde donde el estudio predica lo que piensa y se abre a otras ideas que relacionen arquitectura y naturaleza, era un sue?o para ellos, que se est¨¢ transformando en realidad. Por eso han querido convertirlo en la escenograf¨ªa on¨ªrica que ocupa el pabell¨®n Catalonia in Venice montado en Venecia por el Institut Ram¨®n Llull.
As¨ª, si la realidad es local, arraigada y s¨®lida, para representar el sue?o de esa realidad Aranda, Pigem y Vilalta han recurrido a la periodista Pati N¨²?ez y a la arquitecta Estel Ortega que han traducido su sue?o de un espacio de di¨¢logo en un pabell¨®n on¨ªrico que, es justo decirlo, podr¨ªan haber firmado los propios RCR en su versi¨®n de interioristas escenogr¨¢ficos. El resultado ¡°se asemeja a una cueva de luces y movimiento l¨ªquido¡±, explican las comisarias. ¡°Quiere ser un espacio inmaterial ¡ªsi es que eso es posible¡ª para que cada uno pueda construir su propia experiencia, tal como sucede en los sue?os¡±, apostillan los arquitectos. Es en esa singularidad, y en la materialidad del pabell¨®n ¡ªconstruido con 6.000 lentes fresnel colgadas de cordones, 65 lupas de cristal, 16 planchas circulares de metacrilato y una burbuja envolvente de pl¨¢stico¡ª donde la idea de naturaleza en el trabajo de RCR despliega toda su complejidad
La Naturaleza, escrita en may¨²sculas, es y ha sido, una fuente inagotable de raz¨®n e inspiraci¨®n ¡°tanto a nivel personal como en la arquitectura¡± explican los arquitectos. Su Vila, un lugar poblado de bosque, de agua y de memoria, ha hecho posible que puedan ¡°explorar la creaci¨®n en un laboratorio abierto¡±. Por eso, este pabell¨®n m¨¢s que explicar una obra, narra un sue?o. Y m¨¢s que ilustrar con trabajos ha buscado exponer la voz de otros creadores que recurren al tacto y a la naturaleza para explicar sus idearios. Es el caso del finland¨¦s Juhani Pallasmaa o del australiano Glenn Murcutt, que dieron conferencias en este recinto.
La Vila, la casa desde la que los RCR quieren explorar su futuro, el de la arquitectura y el del planeta, es un lugar parad¨®jico. Complejo y sencillo a la vez, quiere ser esencial y tambi¨¦n explorar la realidad desde la mayor transversalidad posible, es decir, desde un punto de vista pluridisciplinar.
Se trata, otra paradoja, de un sitio escondido que busca convertirse en un lugar de referencia mundial. ¡°Llegar a lo universal desde lo ¨ªntimo¡±, han declarado. Por eso, por la idea de lograr construir los sue?os y por el convencimiento de que ¡°a Venecia uno va a so?ar¡±, han decidido presentarse envueltos en pl¨¢stico, multiplicados y a la vez desmigados por las lentes y los reflejos que hacen del pabell¨®n un espacio inmaterial.
¡°La investigaci¨®n no es un fen¨®meno aislado sino una relaci¨®n de contacto directo con lo que se explora¡±, se?alan. Describen su proyecto creativo, como ¡°experimental y en continua evoluci¨®n¡±. Y la Villa busca ser una geograf¨ªa en la que se generan nuevas realidades como el humanit¨¢culo, un proyecto de s¨ªntesis del hombre y el habitar en relaci¨®n con el paisaje, la naturaleza y la tecnolog¨ªa.
Las comisarias de Venecia se?alan que quieren mostrar a los arquitectos como pensadores capaces de dar respuesta desde la arquitectura al mundo que les rodea. El paisaje de Olot como laboratorio experimental de arquitectura. Y el viaje-sue?o de presentarlo en Venecia construyendo un mundo artificial ¡°?Qu¨¦ se puede construir que pueda competir o estar a la altura de lo que le rodea?¡±, pregunta Carme.
RCR ha construido en Venecia un sue?o, de los que parecen reales. Tiene forma de nebulosa y argumento rotundo y conocido: el ma?ana de su trabajo.
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