Los pacientes de c¨¢ncer que tambi¨¦n usan pseudoterapias duplican su riesgo de morir
Un estudio muestra que las llamadas terapias complementarias reducen la supervivencia incluso cuando se sigue el tratamiento m¨¦dico
Sustituir con pseudoterapias el tratamiento m¨¦dico, aquel que ha probado su eficacia cl¨ªnicamente, es una temeridad. M¨¢s all¨¢ de lo que dicta el sentido com¨²n, conocemos casos terribles de j¨®venes muertos tras abandonar la quimio y contamos con estudios que as¨ª lo muestran. Un estudio reciente se?alaba que cambiar el tratamiento de c¨¢ncer por pseudoterapias multiplicaba por tres, cuatro y hasta casi cinco el riesgo de morir, dependiendo del tipo de tumor. Sin embargo, un argumento habitual entre los defensores de las pseudoterapias es que pueden ayudar a los pacientes cuando se complementan con el tratamiento m¨¦dico, es decir, cuando se usan junto a la medicina y no en su lugar. Ahora un nuevo estudio del mismo equipo desmiente esta ocurrencia y lanza una seria advertencia: complementar el tratamiento de c¨¢ncer con t¨¦cnicas y productos no avalados por la medicina duplica el riesgo de morir de los pacientes.
"Muchos pacientes creen que la medicina complementaria los ayudar¨¢ a vivir m¨¢s tiempo o curar su enfermedad. No es cierto", zanja el investigador de Yale
Preocupados por lo extendido que est¨¢ el uso de estas pseudoterapias entre los enfermos de c¨¢ncer, un equipo de investigadores de la Universidad de Yale (EE UU) quiso analizar el verdadero efecto de estos tratamientos complementados. Acudieron a la base de datos estadounidense de casos de c¨¢ncer y se fijaron en aquellos pacientes que se hab¨ªan sometido al menos a un tratamiento convencional de tumores (quimioterapia, radioterapia, cirug¨ªa y/o terapia hormonal). Y de ese grupo, seleccionaron a quienes tambi¨¦n usaban "otros tratamientos no validados administrados por personal no m¨¦dico". Es decir, que hab¨ªan cumplido con lo prescrito por los onc¨®logos, al menos en parte, y con pseudoterapias ajenas a las recomendaciones m¨¦dicas.
Al comparar c¨®mo le hab¨ªa ido a esos 258 pacientes con un grupo de control de m¨¢s de mil enfermos en similares circunstancias descubrieron la verdad sobre las llamadas "terapias complementarias". "Muchos pacientes creen que la medicina complementaria los ayudar¨¢ a vivir m¨¢s tiempo o curar su enfermedad. Quer¨ªamos investigarlo y ver si era cierto: no lo es", resume James Yu, uno de los autores del trabajo.?Aproximadamente dos tercios de los pacientes con c¨¢ncer creen que estas pseudoterapias complementarias prolongar¨¢n su vida y un tercio espera que cure su enfermedad. Lo cierto es que duplica su riesgo de morir, como publican en la prestigiosa revista m¨¦dica JAMA.
?C¨®mo se explica, si muchas son t¨¦cnicas inocuas o productos placebo como la homeopat¨ªa que no interfieren en el tratamiento? Porque s¨ª interfieren, en algunos casos. Aunque los pacientes seleccionados s¨ª se hab¨ªan sometido a tratamientos m¨¦dicos como la quimioterapia, algunos terminaban renunciando a otras terapias prescritas por el equipo m¨¦dico, evitando operaciones, o retrasando su comienzo, quiz¨¢ convencidos de que lo complementario e inocuo les salvar¨ªa la vida.?
Aunque los pacientes seleccionados s¨ª se hab¨ªan sometido al tratamiento m¨¦dico, algunos terminaban renunciando a otras terapias prescritas por el equipo m¨¦dico
"Los pacientes que usan medicamentos complementarios tienen m¨¢s probabilidades de morir como resultado de rechazar alg¨²n otro aspecto de su cuidado (probablemente una terapia adyuvante). Pero incluso cuando evaluamos a los pacientes que recibieron todas las terapias recomendadas, los que usan complementarios tampoco tienen mejor supervivencia que aquellos que no los usan", resume Skyler Johnson, autor principal del estudio. Y zanja: "Incluso en las circunstancias m¨¢s ¨®ptimas, los medicamentos complementarios utilizados para el tratamiento del c¨¢ncer no proporcionan un beneficio de supervivencia".
Los investigadores se?alan en su estudio que el ramillete de terapias no m¨¦dicas es muy amplio, ya que abarca desde el yoga o algunos masajes, que no curan pero proporcionan bienestar, a pseudomedicinas que prometen resultados. Y sus datos no permiten conocer cu¨¢les son las m¨¢s perjudiciales, pero s¨ª aventurar algo: si el riesgo surge al abandonar el tratamiento, las que prometen curar ser¨¢n las que presumiblemente puedan animar impl¨ªcitamente al paciente a dejar la quimio o retrasar la operaci¨®n.
Esa es la secuencia exacta del famoso caso de Mario Rodr¨ªguez, joven valenciano que muri¨® tras abandonar la quimio con que trataba su leucemia. Inicialmente s¨ª complet¨® la primera fase de quimioterapia, pero no quiso completar la segunda fase tras ponerse en manos de un curandero que asegura que puede curar el c¨¢ncer con vitaminas. Demasiadas semanas despu¨¦s, este estudiante de F¨ªsicas estaba tan deteriorado que no pudo salvarse su vida.
Un estudio previo mostr¨® que un mayor uso de pseudoterapias se asocia con un menor inicio del tratamiento con quimioterapia
"La medicina complementaria se asoci¨® con el rechazo del tratamiento m¨¦dico convencional contra el c¨¢ncer", explica Yu. "Pero los pacientes que se sometieron a terapia complementaria y no rechazaron el tratamiento m¨¦dico convencional contra el c¨¢ncer no tuvieron un mayor riesgo de muerte", resume este investigador del departamento de terapia radiol¨®gica de la Facultad de Medicina de Yale. Sus datos demuestran claramente que los enfermos que probaron alguna terapia complementaria ten¨ªan m¨¢s probabilidades de rechazar alguna forma de terapia convencional recomendada por los sanitarios.
No es una novedad que los consumidores de estas pseudoterapias tienen una peligrosa tendencia a no cumplir con el tratamiento m¨¦dico para acabar con los tumores. Un estudio sobre casos de c¨¢ncer de mama publicado en 2016 mostr¨® algo que muchos onc¨®logos vienen observando: un mayor uso de terapias complementarias se asocia con un menor inicio del tratamiento con quimioterapia. Y, como se ha visto, el rechazo del tratamiento multiplica el riesgo de morir.
Yu y Johnson publicaron el a?o pasado otro estudio que analizaba la mortalidad en pacientes de c¨¢ncer que escog¨ªan inicialmente pseudoterapias en lugar del tratamiento m¨¦dico: hasta un 470% mayor, y la proporci¨®n no era m¨¢s alta porque terminaban aceptando tratarse con medicina. En el caso actual, se centraron en aquellos pacientes que trataban de curarse tomando el camino de la ciencia y el de la pseudociencia a la vez. Y, como se ha visto, muchos ca¨ªan en una zona intermedia: "Encontramos un ¨¢rea gris, donde los pacientes que estaban recibiendo medicina complementaria y algunos tratamientos m¨¦dicos convencionales todav¨ªa rechazaban otras formas de terapia convencional recomendada. Por ejemplo, los pacientes pueden haber aceptado la cirug¨ªa pero no la quimioterapia posterior", afirma Yu.
Como muestran otros estudios, los pacientes de c¨¢ncer que usaron pseudoterapias tienen un perfil bastante definido: por lo general eran m¨¢s j¨®venes, mujeres, con residencia en ¨¢reas de mayor nivel socioecon¨®mico y educaci¨®n y con seguro privado. Aunque se trata de un estudio sobre enfermos estadounidenses, el perfil del consumidor de pseudoterapias en Espa?a es muy similar.
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