En el huerto con una blusa de 1.100 euros: esta vieja foto de Melania Trump arrasa hoy en redes sociales

Era septiembre de 2017 y Melania Trump, como informaba EL PA?S en un fotorrelato, cumpl¨ªa con una tradici¨®n de la Casa Blanca inaugurada en 2009 por la primera dama Michelle Obama ¨Cen un jard¨ªn creado por Eleanor Roosevelt¨C de recibir a algunos ni?os para hacer una labor de siembra y recolecci¨®n en el huerto de la Casa Blanca.

Era habitual ver a Michelle Obama hacer esta labor con zapatillas de deporte, sudaderas, camisetas b¨¢sicas, de rodillas en el suelo y con sus pantalones llenos de tierra y restos de hojas, como en la siguiente imagen.

Melania lo hizo por primera vez el pasado a?o. Y la estampa fue¡­ diferente. Curiosamente, es ahora, casi un a?o despu¨¦s, cuando algunos usuarios de Twitter han empezado a observar aquellas im¨¢genes con detenimiento y han logrado que se hagan virales. Hasta celebridades como la modelo Chrissy Teigen o el c¨®mico Dave Weasel se han apuntado a la moda de publicar la imagen seguida de un pie de foto c¨®mico.

Era habitual ver a Michelle Obama hacer esta labor con zapatillas de deporte, sudaderas, camisetas b¨¢sicas, de rodillas en el suelo y con sus pantalones llenos de tierra y restos de hojas

?Qu¨¦ tiene esta imagen para suscitar tanta hilaridad? En primer lugar, la primera dama estadounidense est¨¢ practicando jardiner¨ªa con una blusa de Balmain valorada en m¨¢s de 1.100 euros (hoy se puede encontrar por unos 600). En segundo lugar, sus zapatillas (un modelo parecido a unas Converse) est¨¢n incre¨ªblemente limpias, su suela de un color blanco nuclear impensable para alguien trabajando en una huerta. Los guantes rojos, tambi¨¦n inmaculados, hacen juego con la blusa, y hay que considerar si alguien con unas gafas tan oscuras puede cortar tallos y manejar semillas en un d¨ªa en el que, a juzgar por la luz de las fotograf¨ªas, no hab¨ªa demasiado sol.

La imagen no var¨ªa mucho en la l¨ªnea que el matrimonio Trump nos tiene acostumbrados. Unas apariciones p¨²blicas siempre dominadas por el artificio y la incomodidad, cuando no por la abierta provocaci¨®n (la gabardina que Melania visti¨® tras la crisis de los ni?os separados de sus padres en la que se pod¨ªa leer ¡°A m¨ª realmente no me importa, ?y a ti?¡± a¨²n sigue siendo un misterio).

Melania es tal vez un enigma a¨²n m¨¢s grande que Trump e im¨¢genes como esta, que la retratan como un holograma m¨¢s que un ser humano, no conseguir¨¢n convertirla nunca en una figura cercana. Su car¨¢cter y su aspecto han llevado a teor¨ªas conspiradoras tan curiosas como aquella que aseguraba, el pasado octubre, que la mujer que acompa?aba a Trump no era Melania, sino una doble.?Pero tal vez ni Donald Trump ni ella pretendieron nunca dar la imagen de ser cercanos y agradables. Es posible que ah¨ª, en esa frialdad y distancia tan transparentes, se encuentre su ¨²nico gesto de honestidad.?