¡°Al ritmo actual, no habr¨¢ pescado para todos¡±

Daniel Pauly (Par¨ªs, 1946) recorre playas, archipi¨¦lagos y mercados, pero se dedica principalmente a bucear entre miles de cifras para identificar el impacto real de la actividad humana ¨Cfundamentalmente la pesca- en los oc¨¦anos. ¡°Es un saqueo¡±, comenta. Pauly cre¨® la mayor base de datos sobre peces del mundo (FishBase). Tambi¨¦n public¨® con su equipo un estudio en 2016 que demuestra que las capturas de pescado reportadas a la FAO por los pa¨ªses entre 1950 y 2010 no incluyeron las cifras por pesca ilegal, m¨¦todos artesanales y descartes en alta mar. Asimismo, particip¨® en otro trabajo que concluye que las flotas de pesca industrial tienen operaciones en el 90% de los oc¨¦anos.

Pauly conoci¨® el mar por primera vez en Tarragona. ¡°Ten¨ªa ocho a?os. Un padrino espa?ol me llev¨® en un viaje de verano¡±, recuerda. Antes de convertirse en un cient¨ªfico de fama mundial, Pauly tuvo que enfrentar situaciones complicadas (todos los detalles aparecer¨¢n en una biograf¨ªa que se publicar¨¢ en Francia el pr¨®ximo a?o). Hijo de una francesa y un soldado afroestadounidense, creci¨® bajo la tutela de una familia suiza que le impuso funciones de servidumbre. Lleg¨® a Alemania a los 16 a?os, donde debi¨® laborar en hospitales y f¨¢bricas mientras asist¨ªa por las noches a cursos de regularizaci¨®n. Obtuvo un doctorado en biolog¨ªa marina en la Universidad de Kiel. Trabaj¨® en Ghana, Indonesia y Filipinas, indagando sobre la pesca, y desde 1994 es profesor del Centro de Pesquer¨ªas de la Universidad de la Columbia Brit¨¢nica (Canad¨¢), donde es fundador e investigador principal de Sea Around Us, iniciativa que estudia el impacto pesquero en los ecosistemas marinos. Daniel Pauly habl¨® con El Pa¨ªs v¨ªa telef¨®nica desde Vancouver.

Pregunta. Usted ha expresado que la pesca de arrastre puede compararse a cazar conejos con un?buld¨®cer. ?Deber¨ªa prohibirse esta t¨¦cnica a cualquier profundidad?

Respuesta. Deber¨ªamos hacerlo a largo plazo por dos razones. La primera es que el arrastre transforma el medio ambiente. Por eso van cada vez a aguas m¨¢s profundas porque modifican el h¨¢bitat por donde pasan. La naturaleza produce los peces; nosotros no. La segunda raz¨®n es que es una forma de pesca que requiere de mucha energ¨ªa. Si un barco pesquero necesita grandes cantidades de combustible, la econom¨ªa de esta operaci¨®n se vuelve problem¨¢tica. En este caso, vemos que son actividades de pesca con altos subsidios porque no pueden luchar contra otras formas de pesca por s¨ª mismas. El pescado que proviene del arrastre est¨¢ subsidiado. Y se supone que todas las industrias est¨¢n buscando reducir la huella energ¨¦tica.

La actividad pesquera deja rastros

P. En el estudio que Sea Around Us public¨® en 2016, donde aparecen las cantidades de pescado no registradas en las cifras de la FAO, se estableci¨® que en 2010 ¨Cel ¨²ltimo a?o tomado en cuenta- se pesc¨® en el mundo un 30% adicional de lo declarado: 32 millones de toneladas. ?C¨®mo calcularon ustedes esta cifra?

R. Es evidente que no se reportan todas las capturas. Lo hicimos pa¨ªs por pa¨ªs a trav¨¦s de varios m¨¦todos, con el apoyo de equipos de colegas. Los pa¨ªses cuentan con m¨¢s informaci¨®n de la que env¨ªan a la FAO. Si usted consulta p¨¢ginas web y documentos de ministerios de pesca y Gobiernos regionales, ver¨¢ que hay m¨¢s datos de los que se env¨ªan. Est¨¢n ah¨ª, pero no se emplean. No es muy complicado recopilar esta informaci¨®n. Otra forma es hacer reconstrucciones de especies que en el papel supuestamente no se pescaron, pero que son consumidas en zonas espec¨ªficas. La actividad pesquera deja rastros.

P. Usted particip¨® en otro estudio, publicado recientemente, donde se establece que las flotas de pesca industrial realizan operaciones en el 90% de los oc¨¦anos. ?Qu¨¦ puede comentar al respecto?

Los grandes pa¨ªses pesqueros seguir¨¢n operando m¨¢s y m¨¢s. Se comer¨¢n el pescado de los dem¨¢s

R. Lo que pasa en el mar es m¨¢s grave de lo que pensamos. No hay control en las operaciones de muchos barcos. La idea es que si no tenemos peces en nuestras aguas, nos vamos a zonas lejanas. Varios pa¨ªses lo hacen de forma importante: China, Taiw¨¢n, Corea del Sur, Espa?a. Hemos tomado la ruta equivocada. Los grandes pa¨ªses pesqueros seguir¨¢n operando m¨¢s y m¨¢s. Se comer¨¢n el pescado de los dem¨¢s.

P. Adem¨¢s est¨¢ el calentamiento global, tema que usted tambi¨¦n estudia¡­

R. Ahora en Gran Breta?a se encuentran peces que antes nadaban en aguas espa?olas y en Espa?a vemos peces que viv¨ªan en Marruecos. Los peces se desplazan hacia los polos; unos 5 kil¨®metros por a?o. Lo detectamos en muchos pa¨ªses: hay peces que no se conoc¨ªan y que provienen de regiones tropicales.

Hay que restablecer la diversidad que ten¨ªamos en varios puntos. Europa es uno de ellos. Vemos que donde se declaran ¨¢reas de protecci¨®n, la biodiversidad vuelve

P. Seg¨²n el Convenio sobre la diversidad biol¨®gica de 1992, en 2020 deber¨ªa haber en el mundo al menos un 10% de ¨¢reas marinas protegidas. ?C¨®mo ve el panorama?

R. Muchos pa¨ªses no llegar¨¢n a la meta, aunque otros s¨ª. Depende de varios factores. Por ejemplo, los brit¨¢nicos tienen islas poco habitadas donde han declarado estas zonas. Habr¨ªa que obligar a cumplir los objetivos. Hay que restablecer la diversidad que ten¨ªamos en varios puntos. Europa es uno de ellos. Vemos que donde se declaran estas ¨¢reas, la biodiversidad vuelve.

P. ?Puede ser la acuicultura una ayuda significativa?

R. Depende de qu¨¦ tipo. Pensemos en el norte de Espa?a, donde hay una gran producci¨®n de mejillones. Es algo muy bueno. Pero en la acuicultura para salm¨®n se necesitan grandes cantidades de harina de pescado. ?De d¨®nde sale esta harina? De sardinas, anchoas; especies que el ser humano puede consumir.

P. Y el consumo de pescado en el mundo aumenta¡­

R. A todos nos gusta el pescado. Millones de personas que antes no lo consum¨ªan ahora lo hacen. Por ejemplo, en el medio oeste norteamericano. Desde hace varios a?os se come mucho pescado ah¨ª. No es como en Espa?a, donde siempre ha sido as¨ª. En China, con el aumento de la clase media, hay una demanda importante. Antes consum¨ªan principalmente pescado de agua dulce. La demanda aumenta y los recursos en los oc¨¦anos no. Es leg¨ªtimo querer pescado. Es nutritivo, el sabor es agradable, se digiere bien. Pero no como se est¨¢n haciendo las cosas. Al ritmo actual, no habr¨¢ pescado para todos.

P. ?Algunas personas consideran sus cifras exageradas y catastr¨®ficas?

R. La gente que me critica debe ¨²nicamente hacer una cosa: publicar sus propias cifras. Es f¨¢cil escribir un comunicado o se?alar algo en entrevista sin probarlo. Lo que es dif¨ªcil es pasar filtros en revistas de prestigio. No son opiniones. Trabajo con un equipo de investigadores serios. Hay que demostrar las cosas y ser transparentes. Reconocer por ejemplo cuando uno tiene intereses en la industria.