Los para¨ªsos fiscales perjudican al medio ambiente

Buena parte del dinero escondido en los para¨ªsos fiscales acaba financiando la pesca ilegal o la deforestaci¨®n amaz¨®nica. Es lo que muestra un estudio que ha analizado los escasos datos p¨²blicos que hay sobre los movimientos de este capital opaco y su impacto en el medio. Sus resultados muestran que la mayor¨ªa de los pesqueros investigados por esquilmar los mares ten¨ªan bandera de conveniencia. Mientras, buena parte de la inversi¨®n extranjera en la ganader¨ªa y el cultivo de soja que est¨¢n deforestando la Amazonia proceden de para¨ªsos como Panam¨¢, islas Caim¨¢n o Bahamas.

Aunque no son ilegales, los para¨ªsos fiscales atraen capitales privados o el trasvase de beneficios entre empresas matrices y subsidiarias que escapan al control de los estados, perjudicando a las sociedades donde ese dinero fue generado v¨ªa la evasi¨®n de impuestos. Esa insolidaridad es la que provoca el reguero de dimisiones o denuncias pol¨ªticas cada vez que estalla un esc¨¢ndalo relacionado con estos para¨ªsos, como el de los Panama Papers. Ahora una investigaci¨®n del Centro de Resiliencia de Estocolmo (SRC, por sus siglas en ingl¨¦s) muestra que estas jurisdicciones tambi¨¦n da?an al medio ambiente.

Combinando datos de Interpol, la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO) y bases de datos de gesti¨®n pesquera, los autores del estudio han identificado unos 200 barcos implicados en pesca ilegal o irregular. No son muchos si se comparan con el cuarto de mill¨®n de pesqueros registrados ante la FAO. Lo llamativo es que el 70% de esos barcos ten¨ªan una bandera de conveniencia de uno de estos para¨ªsos fiscales, encabezados por Panam¨¢ y Belice. El porcentaje es a¨²n m¨¢s significativo al considerar que solo el 4% de la flota registrada en la base de la FAO tiene bandera de uno de estos pa¨ªses.

El 70% de los barcos investigados por pesca ilegal tienen bandera de un para¨ªso fiscal

"Si bien el n¨²mero real de barcos es insignificante en comparaci¨®n con el registro de la FAO, no lo es el porcentaje. Y esto es lo que importa en nuestro an¨¢lisis, el 4% versus el 70%", dice el investigador del SRC y coautor del estudio, Jean-Baptiste Jouffray. Esa concentraci¨®n no dir¨ªa mucho si se repitiera en otros tipos de barcos, como cargueros, petroleros que tambi¨¦n suelen usar pabellones de conveniencia, algo que no sucede. "Por ejemplo, Mongolia tiene uno de los registros de buques m¨¢s grandes del mundo, aunque no tiene un solo kil¨®metro de costa. As¨ª que buscamos en la base de datos de la FAO para poner en perspectiva el 70% y destacamos que era bastante raro que los barcos pesqueros se concentraran en jurisdicciones de para¨ªsos fiscales", a?ade Jouffray.

El estudio, publicado en Nature Ecology & Evolution, cuantifica tambi¨¦n el capital extranjero que llega hasta dos de los sectores que m¨¢s han participado en la deforestaci¨®n amaz¨®nica: La ganader¨ªa y el cultivo de soja, responsables del 80% de la deforestaci¨®n de la selva. Usando datos del Banco de Brasil, el trabajo muestra que unos 23.500 millones de euros de capital for¨¢neo llegaron hasta las principales empresas de ambos sectores entre octubre de 2000 y agosto de 2011, el lapso para el que hab¨ªa datos. De ese dinero, algo m¨¢s de 16.000 millones proced¨ªa de para¨ªsos fiscales, con las islas Caim¨¢n en cabeza.

"En Brasil, en el conjunto de la econom¨ªa y para 2011, el 17% del capital extranjero proced¨ªa de estos para¨ªsos fiscales, para el sector ganadero y el de la soja, fue del 68%", comenta el autor principal del estudio y director adjunto del SRC, V¨ªctor Galaz. Las ventajas de los para¨ªsos fiscales son bien conocidas, su saber hacer legal y fiscal, impuestos m¨ªnimos y opacidad. Pero, el porqu¨¦ sectores tan agresivos con el medio aparecen m¨¢s conectados que otros con los para¨ªsos fiscales es una cuesti¨®n para la que, como dice Galaz, "no tenemos respuestas".

El estudio tampoco responde a la siguiente pregunta: ?Qu¨¦ hay m¨¢s all¨¢ de los para¨ªsos fiscales? ?De d¨®nde viene el dinero rebotado desde ellos? Para Javier G¨®dar, experto de la organizaci¨®n SEI y estudioso de los agentes que hay tras la deforestaci¨®n amaz¨®nica no hay que demonizar a los para¨ªsos fiscales. "El impacto ambiental probablemente no se ver¨ªa muy atenuado si no se usaran. Al final, los para¨ªsos fiscales son un veh¨ªculo para ahorrarse un dinero, pero la gente no puede simplemente poner ah¨ª el foco y olvidarse de qu¨¦ hacen sus gobiernos, bancos, fondos de pensiones, ahorro privado, etc¨¦tera ..." Y al final de la cadena est¨¢n los consumidores de ese pescado, esa carne y esa soja.