El an¨¢lisis del ADN de 81 casos descarta que fueran beb¨¦s robados
Los an¨¢lisis gen¨¦ticos ordenados por la justicia certifican que los restos mortales eran de los hijos de padres que pensaban que los hab¨ªan sustra¨ªdo
El 6 de junio de 1969, el doctor Eduardo Vela entreg¨® una ni?a de pocos d¨ªas, ¡°fuera de los cauces legales¡±, a una mujer que no hab¨ªa dado a luz. La se?ora, de 46 a?os, qued¨® registrada como madre biol¨®gica, ¡°sin que conste que hubiera mediado consentimiento y ni tan siquiera conocimiento por parte de los progenitores del reci¨¦n nacido cuya identidad no consta en parte alguna¡±, seg¨²n la sentencia del primer juicio por el presunto robo de un beb¨¦, dictada hace unos d¨ªas por la Audiencia Provincial de Madrid. La madre adoptiva, In¨¦s P¨¦rez, asegur¨® durante la instrucci¨®n que no pag¨® nada y que le dijeron que la criatura era hija de una mujer casada que hab¨ªa entregado al beb¨¦ porque no era de su marido. Es imposible comprobar qu¨¦ pas¨® realmente, porque la Cl¨ªnica San Ram¨®n de Madrid, donde naci¨® la ni?a, cerr¨® en 1982 y no se han encontrado los libros de registro de partos. Vela, de 86 a?os, afirm¨® en el juicio oral que no recordaba nada.
Es una sentencia hist¨®rica. Desde que se divulg¨® la posible existencia de una trama de sustracci¨®n de reci¨¦n nacidos que habr¨ªa operado entre 1950 y 1990 en Espa?a, algunas asociaciones de afectados han calculado que existen 300.000 v¨ªctimas. En 2012, tras recibir una denuncia colectiva de m¨¢s de 250 familias, la Fiscal¨ªa General del Estado resumi¨® el supuesto modus operandi: ¡°Consist¨ªa b¨¢sicamente en que se informaba a la madre y familiares de que un menor reci¨¦n nacido hab¨ªa fallecido, ofreci¨¦ndose el centro hospitalario a hacerse cargo de los restos. Ese menor era entregado a otras personas¡±.
Las tumbas de esos ni?os deber¨ªan estar vac¨ªas. Desde 2010, la Fiscal¨ªa ha iniciado 2.100 diligencias de investigaci¨®n de presuntos robos de beb¨¦s. La mayor parte se ha archivado, por falta de pruebas o porque, tras 40 a?os, ni siquiera exist¨ªan los registros hospitalarios ni viv¨ªan los posibles testigos. Pero 522 casos s¨ª han llegado a la v¨ªa judicial, seg¨²n fuentes de la Fiscal¨ªa. En 120 de ellos, ante indicios de una sustracci¨®n, fiscales y jueces han ordenado abrir las sepulturas de los beb¨¦s para ver si estaban vac¨ªas. Y, en las que se han hallado restos ¨®seos, han solicitado la identificaci¨®n de su ADN. Ninguno de estos an¨¢lisis ha servido para confirmar un robo, seg¨²n un informe t¨¦cnico realizado por el Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa y Ciencias Forenses (INTCF) con motivo de la visita a Espa?a en 2017 de una delegaci¨®n del Parlamento Europeo para investigar la presunta mafia.
¡°No conocemos ning¨²n caso en el que se haya podido confirmar el robo de beb¨¦s. Lo que s¨ª hemos visto es que era cierto lo que les dijeron a los padres: que el beb¨¦ hab¨ªa fallecido¡±, se?ala el bi¨®logo Antonio Alonso. Su equipo ha podido recuperar restos ¨®seos en 117 de los 120 enterramientos exhumados, el 97%. En otros dos casos, ya no quedaban huesos, pero s¨ª pelos fetales, pa?os quir¨²rgicos, pinzas umbilicales y rastros de insectos devoradores de cad¨¢veres. El n¨²mero total de procedimientos abiertos asciende a 128 porque en 14 de los reci¨¦n nacidos se recurri¨®, como ¨²nico an¨¢lisis o como prueba complementaria, a la investigaci¨®n gen¨¦tica de biopsias que se conservaban en los hospitales.
Los an¨¢lisis de ADN fueron extremadamente complejos, debido al estado de degradaci¨®n de los restos. Solo se pudo obtener el perfil gen¨¦tico de 90 de los reci¨¦n nacidos. En 81 de estos casos (el 90%), los cient¨ªficos pudieron identificar a los beb¨¦s como hijos de los padres que los buscaban. En los dem¨¢s expedientes, exist¨ªan dudas sobre si los restos exhumados ¡ªa menudo en vetustas fosas comunes¡ª eran los correctos. Alonso recuerda que, hace d¨¦cadas, los reci¨¦n nacidos fallecidos sin bautizar se enterraban en cementerios de p¨¢rvulos, sin l¨¢pida, en diferentes filas y niveles. ¡°Las circunstancias del enterramiento hacen muy dif¨ªcil el an¨¢lisis¡±, lamenta.
El informe t¨¦cnico no respalda la existencia de una trama de robo de beb¨¦s, sino que constata ¡°la comprensible incertidumbre¡± de muchos padres sobre si su hijo muri¨® realmente, tras un trato hospitalario que, hace d¨¦cadas, pudo ser fr¨ªo y opaco, seg¨²n Alonso. En 1976, la tasa de mortalidad neonatal precoz superaba los nueve beb¨¦s por cada 1.000 nacidos. Pensar que un ni?o no falleci¨®, sino que fue robado, es la ¨²ltima esperanza para muchos padres de volver a ver a su hijo con vida. Un padre lo sintetiz¨® durante una exhumaci¨®n en M¨¢laga en 2012: ¡°Me gustar¨ªa que los restos no fueran de mi hijo. Eso significar¨ªa que todav¨ªa est¨¢ vivo¡±.
¡°Hay padres que no se creen nuestros an¨¢lisis de ADN. Creen que se trata de una conspiraci¨®n del Estado. Ponen en duda nuestro trabajo y nuestra honestidad¡±, lamenta Alonso, uno de los mayores expertos de Espa?a en gen¨¦tica forense. Ha trabajado en la identificaci¨®n de las v¨ªctimas de los atentados del 11-M, en la de los asesinados en la Guerra Civil Espa?ola e incluso en los intentos de encontrar los restos mortales del escritor Miguel de Cervantes.
El director del Instituto de Medicina Legal de Murcia, Rafael Ba?¨®n, ha participado en cuatro exhumaciones, en Cartagena, Beniel, Alcantarilla y Fortuna. ¡°Nos hemos encontrado lo que esper¨¢bamos: a los hijos de los denunciantes¡±, afirma el forense. Los beb¨¦s supuestamente sustra¨ªdos estaban en sus tumbas. ¡°Creo que no ha habido un robo sistem¨¢tico de reci¨¦n nacidos en Espa?a, sino un problema de adopciones irregulares¡±, opina el forense. La sentencia del caso del doctor Vela cita una investigaci¨®n policial que concluy¨® que exist¨ªa ¡°una trama¡± en la que ¡°aparec¨ªa un centro de acogida para madres solteras, Villa Teresita, donde manten¨ªan a las j¨®venes durante el embarazo a cambio de que dieran luego sus beb¨¦s en adopci¨®n¡±.
¡°A veces lo que pasaba es que una madre que no pod¨ªa atender a un ni?o lo daba en adopci¨®n y se registraba como hijo biol¨®gico de otra madre que no hab¨ªa dado a luz¡±, coincide la letrada Carmen de Troya, coordinadora del Servicio de informaci¨®n a afectados por la posible sustracci¨®n de reci¨¦n nacidos, dependiente del Ministerio de Justicia. A su oficina, abierta en 2013, han acudido unas 770 personas. El equipo de De Troya ha creado un Fichero de Perfiles de ADN para intentar juntar piezas del mismo puzle. La base de datos la gestiona el INTCF y hoy cuenta con 563 perfiles, con un n¨²mero desproporcionado de madres y padres que buscan a sus hijos (el 74%), frente al de hijos adoptados que quieren encontrar a sus padres biol¨®gicos (el 13%). El resto son hermanos. ¡°No ha habido ninguna coincidencia entre todos estos perfiles¡±, apunta De Troya.
¡°Muchos de los hijos adoptivos que buscan a sus padres biol¨®gicos fueron abandonados en inclusas. Nosotros no decimos que no haya habido ning¨²n ni?o robado, pero la casu¨ªstica que hemos visto hasta ahora es otra¡±, subraya Alonso. ¡°Quiz¨¢s hemos estado investigando el modus operandi equivocado¡±.
Mar¨ªa Bueno s¨ª est¨¢ convencida de que le robaron a su ni?a. Dio a luz en el Hospital Municipal de la L¨ªnea de la Concepci¨®n. Su hija, seg¨²n le dijeron las monjas, naci¨® muerta. ¡°Hay autos judiciales en los que se dice que sufrimos una psicosis generalizada por culpa de los medios de comunicaci¨®n. Yo tengo un certificado de defunci¨®n de mi hija de la Nochebuena de 1981 y otro de que no est¨¢ registrada en el cementerio¡±, afirma Bueno, coordinadora general de la Plataforma Internacional de V¨ªctimas por Desapariciones Forzadas Infantiles Te Estamos Buscando. Su organizaci¨®n agrupa a media docena de asociaciones, pero Bueno reconoce que no sabe de d¨®nde sale la cifra de los 300.000 beb¨¦s robados. ¡°Pueden ser 300.000, 400.000 o 250.000, ese no es el fondo del asunto¡±, opina. Durante el franquismo, sostiene, ¡°se robaban ni?os a mansalva¡±.
¡°Lo que los neonat¨®logos han hecho en este pa¨ªs es salvar vidas, no robar beb¨¦s¡±, defiende Francisco Etxeberria, profesor de Medicina Legal y Forense de la Universidad del Pa¨ªs Vasco. El investigador sostiene que ha habido ¡°una psicosis colectiva¡±, en la que muchos padres han cre¨ªdo ser v¨ªctimas del robo de reci¨¦n nacidos. Las denuncias aumentaron despu¨¦s de que se conocieran casos de tumbas abiertas sin beb¨¦s en Euskadi. ¡°Se dec¨ªa que los f¨¦retros aparec¨ªan vac¨ªos, pero no estaban vac¨ªos¡±, recalca Etxeberria.
La aparente ausencia de los cad¨¢veres tiene una explicaci¨®n cient¨ªfica, como demostr¨® en 2012 un informe t¨¦cnico del Laboratorio de Antropolog¨ªa del Servicio de Criminal¨ªstica del INTCF, realizado a petici¨®n de la Fiscal¨ªa Provincial de Guip¨²zcoa. Los autores, dirigidos por Amparo Jim¨¦nez y Teresa Cabellos, presentaron un estudio de 16 exhumaciones que documentaba que ¡°el grado de representatividad esquel¨¦tica y de degradaci¨®n de los restos han sido muy variables, desde un reci¨¦n nacido inhumado en el a?o 1972 que se conserv¨® pr¨¢cticamente ¨ªntegro por un proceso de momificaci¨®n, hasta un individuo con una data similar y en el que macrosc¨®picamente no se evidenciaba la presencia de restos ¨®seos¡±. Etxeberria, curtido en m¨¢s de 500 fosas de la Guerra Civil, insiste en que ¡°los restos se degradan y pueden convertirse en residuos casi inapreciables¡±.
En Euskadi, en 2012, el entonces lehendakari, Patxi L¨®pez, lleg¨® a asegurar en una entrevista para la televisi¨®n p¨²blica vasca que existi¨® un negocio de beb¨¦s robados. "Tiene que estar bien orquestado entre los m¨¦dicos, los hospitales, los propios cementerios. Para m¨ª, claro que hay una trama y que hay que investigarla a fondo para depurar todas las responsabilidades que se han dado en este caso", asever¨®. Meses despu¨¦s, el entonces fiscal superior del Pa¨ªs Vasco, Juan Calparsoro, anunci¨® que no se hab¨ªan encontrado ¡°ni siquiera indicios razonables¡± de ninguna sustracci¨®n de beb¨¦s, tras las investigaciones de un grupo de la Ertzaintza creado ex profeso.