Spike Lee: un hombre dispuesto a sacar toda la basura de Trump

Spike lee lleva todo el d¨ªa ofreciendo entrevistas en un hotel londinense. Est¨¢ promocionando Infiltrado en el KKKlan, su nueva pel¨ªcula (que se estrena en Espa?a el 31 de octubre), una cinta que parece la adecuada para estos tiempos tan inadecuados. La expectaci¨®n es enorme. M¨¢s de lo normal, incluso para alguien como Spike Lee (Atlanta, EE UU, 1957). Con un legado cinematogr¨¢fico de alto voltaje cr¨ªtico como el suyo, es f¨¢cil olvidar que este cineasta de discurso implacable y curtido en Brooklyn tiene ya 61 a?os. De constituci¨®n peque?a, luce sus caracter¨ªsticas gafas moradas de montura gruesa, zapatillas a juego y una chaqueta militar cubierta de esl¨®ganes. Est¨¢ erguido en una silla en el centro de la habitaci¨®n, mensajeando febrilmente. Son casi las cuatro de la tarde en Reino Unido, pero en la Costa Este de EE UU est¨¢n amaneciendo.

El pasado verano, Infiltrado en el KKKlan cop¨® los titulares despu¨¦s de estrenarse en Cannes y de llevarse el Gran Premio del Jurado. Una pel¨ªcula suya no alcanzaba tales cotas de ¨¦xito desde Haz lo que debas (1989), que a punto estuvo de no estrenarse por miedo a que su duro mensaje pol¨ªtico provocara disturbios por todo el pa¨ªs. El estudio responsable de Infiltrado en el KKKlan recibi¨® la misma advertencia, pero la estrenaron igualmente.

"Va a haber un choque con quienes quieren luchar contra los grupos de odio, contra la gente que no alberga amor en sus corazones. Tenemos que luchar contra los que tienen dinero en lugar de coraz¨®n¡±

Durante los ¨²ltimos tiempos las aguas no han estado tranquilas para Lee. Sus ocasionales arrebatos de sinceridad y sus conocidas broncas con otros directores han amenazado con eclipsar su obra creativa. Su relaci¨®n con la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematogr¨¢ficas ha sido tensa desde Haz lo que debas, que, al contrario de lo que su autor cre¨ªa y esperaba, no lleg¨® a ser nominada al Oscar a Mejor Pel¨ªcula (pese a haber dirigido una treintena, nunca se ha llevado el galard¨®n). Hace un par de a?os, cuando el hashtag #OscarSoWhite se hizo tendencia en las redes sociales debido a la ausencia de nominados afroamericanos, Spike fue de los primeros en apuntarse al boicot a la ceremonia.

¡°Ahora soy m¨¢s sabio, as¨ª que no estoy en posici¨®n de decirle a otros artistas lo que tienen que hacer¡±, responde cuando se le pregunta por sus enfrentamientos p¨²blicos, m¨¢s dignos de un rapero que de un director de cine. ?Qu¨¦ le dir¨ªa a quien piense que se est¨¢ ablandando? Piensa unos segundos. ¡°Que todav¨ªa no han visto Infiltrado en el KKKlan¡±, responde con una sonrisa que enseguida se convierte en una estrepitosa carcajada.

Lee describe su nueva cinta con una sencilla frase que no necesita ni comas: un afroamericano se infiltra en el Ku Klux Klan. ¡°?Es absurdo!¡±, grita. ¡°Quiero decir que al principio no me lo cre¨ªa, pero es cierto¡±. Y as¨ª es. La pel¨ªcula est¨¢ basada en la historia real de Ron Stallworth (interpretado por John David Washington), primer agente afroamericano del Departamento de Polic¨ªa de Colorado Springs, que se infiltr¨® en el Klan junto a otro agente jud¨ªo (Adam Driver). Abundan los momentos dignos de carcajadas, por lo que podr¨ªa decirse que estamos ante la pel¨ªcula m¨¢s c¨®mica del director. ¡°No dir¨ªa que es c¨®mica¡±, razona. ¡°Hay mucho humor tontorr¨®n, eso s¨ª, pero es natural que de lo absurdo surjan situaciones c¨®micas. Y resulta que esa situaci¨®n absurda es un hecho, sucedi¨® de verdad¡±, asegura.

Jordan Peele, el director revelaci¨®n que se estren¨® tras la c¨¢mara con D¨¦jame salir, una pel¨ªcula que mezcla terror y temas raciales y por la que el a?o pasado fue nominado a cuatro Oscar, fue quien le habl¨® por primera vez de este proyecto y quien insisti¨® en que la dirigiera. Peele la ha coproducido. ¡°Soy muy fan de D¨¦jame salir¡±, confiesa. ¡°Llam¨¦ a Jordan nada m¨¢s verla y le dije lo importante que era su pel¨ªcula. Tambi¨¦n le dije que ten¨ªa algo de mafiosa, en el sentido de que la gente va a ver una pel¨ªcula de terror y se encuentra con que el director les ha colado otras cosas, y eso es algo muy propio de mafiosos¡±, dice, y suelta una risotada perversa. ¡°?G¨¢nster! Eso es el caballo de Troya. ?As¨ª es como te lo montas!¡±. Pero tambi¨¦n es propio de Spike Lee. Ambos conforman la que probablemente sea la mejor pareja posible para un proyecto como Infiltrado en el KKKlan, una pel¨ªcula en la que dan un severo toque de atenci¨®n a la sociedad sin renunciar a que se vea todo el rato que ese filme lo ha dirigido y producido gente que es m¨¢s guai que t¨².

¡°La reacci¨®n del p¨²blico ha sido una locura. He recibido muchos correos electr¨®nicos y mensajes de gente de la que hac¨ªa a?os que no sab¨ªa nada¡±, dice emocionado. ¡°Est¨¢ bien saber que la han visto y que quieran decirme que les ha gustado. Todos comentan lo mismo, que al final de la pel¨ªcula se pod¨ªa o¨ªr el vuelo de una mosca¡±. Cierto. Al t¨¦rmino de la proyecci¨®n a la que esta periodista asisti¨®, el p¨²blico permaneci¨® mudo en sus asientos, hasta que rompi¨® a aplaudir con gran estruendo.

Desde el principio, Infiltrado en el KKKlan parece una comedia setentera tipo blaxploitation, repleta de pana marr¨®n y de peinados afros que desaf¨ªan la gravedad. Pero enseguida se vuelve un retrato franco del racismo en los Estados Unidos de la ¨¦poca. Hay escenas oscuras y dif¨ªciles, como una en la que se ve a miembros del Klan viendo El nacimiento de una naci¨®n, de D.W. Griffith, y aplaudiendo las im¨¢genes de los linchamientos, que se intercalan con la desgarradora descripci¨®n del terrible linchamiento al que fue sometido Jesse Washington en 1916.

Para tratarse de una pel¨ªcula ambientada en los setenta, los asuntos que trata encuentran un inquietante correlato en 2018. No es sorprendente, por tanto, que Lee se haya erigido en una de las voces m¨¢s cr¨ªticas contra Trump. ¡°Le llamo Agente Naranja¡±, insiste. ¡°Nunca por su nombre¡±. Infiltrado en el KKKlan es una pel¨ªcula hist¨®rica que parece estar mordi¨¦ndose la lengua, hasta el final, cuando la acci¨®n salta al presente con im¨¢genes reales de la concentraci¨®n de la extrema derecha y de supremacistas blancos que tuvo lugar el a?o pasado en Charlottesville, y del enfrentamiento contra manifestantes pac¨ªficos que culmin¨® con la muerte de la activista Heather Heyer. ¡°Me acuerdo de verlo en las noticias el 12 de agosto de 2017¡±, dice Lee. ¡°Aquellas im¨¢genes se han convertido en el final de la pel¨ªcula, pero es que esta pel¨ªcula tambi¨¦n es la vida real. Y Susan Bro, la madre de Heather, ya no tiene hija. Es un asunto muy serio¡±.

Lee difumina la l¨ªnea que separa la realidad y la ficci¨®n al reflejar el clima pol¨ªtico actual definido por las noticias falsas de la Administraci¨®n Trump. ¡°Espero que la gente no crea que todo esto es algo que solo concierne a Estados Unidos. La pel¨ªcula es sobre el mundo en general. Lo digo siempre. La derecha est¨¢ ascendiendo en todas partes porque cada vez hay m¨¢s odio. Pol¨ªticamente hablando es la ¨¦poca m¨¢s demente que he vivido. No me sorprendi¨® que Trump saliera elegido, lo que no sab¨ªa es que hab¨ªa recibido ayuda de los rusos. La palabra es conspiraci¨®n. A lo largo de mi vida he visto gobiernos corruptos, pero estos tipos son delincuentes, delincuentes de verdad, a quienes lo ¨²nico que les importa es el todopoderoso d¨®lar, y nada m¨¢s. Rezan en el altar del todopoderoso d¨®lar. Y lo est¨¢n llevando a niveles nunca vistos. Ni siquiera se molestan en ocultarlo. Por ejemplo, escogieron a un tipo pertenciente al lobby del carb¨®n para dirigir la Agencia del Medio Ambiente. ?Medio ambiente y carb¨®n? Eso no tiene ning¨²n sentido. Obviamente tuvo que dimitir¡±.

La ¡°llamada de atenci¨®n¡± personal del director, una expresi¨®n que incluye en todas sus pel¨ªculas, es especialmente pertinente en esta ¨¦poca de ¡°conciencia pol¨ªtica y social¡±. ¡°Creo que nos estamos acercando¡±, concede. ¡°Sobre todo los j¨®venes de hoy en d¨ªa, que me tienen entusiasmado. Est¨¢n intentando arreglar los problemas que han heredado de sus padres y de sus abuelos¡±. ?Y qu¨¦ podemos hacer entonces? ¡°No todo el mundo est¨¢ en la misma situaci¨®n, pero todos tenemos que votar¡±.

?Spike Lee es pesimista sobre la situaci¨®n actual en EE UU, sobre el ascenso de la extrema derecha en Europa, con Trump en la Casa Blanca? ¡°Lo que veo es que al final va a haber un choque con quienes quieren luchar contra los grupos de odio, contra la gente que no alberga amor en sus corazones. Tenemos que luchar contra los que tienen dinero en lugar de coraz¨®n¡±, reflexiona.

Infiltrado en el KKKlan es probablemente la pel¨ªcula m¨¢s importante del a?o. Es una de las obras cumbre de un director que ha abierto el camino a varias generaciones de actores y directores afroamericanos en Hollywood. El d¨ªa despu¨¦s de la entrevista, el abogado de Trump, Michael Cohen, se declaraba culpable de un delito de financiaci¨®n ilegal en la campa?a electoral y Paul Manafort, miembro prominente de la campa?a del Agente Naranja, hac¨ªa lo propio por fraude fiscal y bancario. Parece que est¨¢ saliendo toda la basura, Spike.