China deslumbra con sus megaconstrucciones

China tiene ya otro motivo para presumir de superpotencia. Su construcci¨®n ha sido tortuosa, pero al fin se ha inaugurado el puente sobre el mar m¨¢s largo del mundo, una colosal obra de ingenier¨ªa para unir la ciudad de Hong Kong con Zhuhai y Macao que arroja cifras de infarto: mide 55 kil¨®metros, salpicados de t¨²neles submarinos y dos islas artificiales, abraza 400.000 toneladas de acero y ha costado unos 17.400 millones de euros. Esta tit¨¢nica pieza se ha convertido en una de las infraestructuras m¨¢s complejas de todos los tiempos. La descomunal obra no es solo un icono para el gigante asi¨¢tico, es tambi¨¦n una demostraci¨®n de inter¨¦s por las conexiones mundiales dentro de la ambiciosa Nueva Ruta de la Seda. A este megapuente, China unir¨¢ el pr¨®ximo a?o el nuevo aeropuerto de Pek¨ªn, considerado ya el m¨¢s grande del mundo, con una flamante terminal de 700.000 metros cuadrados de superficie. En la construcci¨®n de esta fant¨¢stica y futurista obra trabajan m¨¢s de 40.000 operarios para que el aer¨®dromo entre en funcionamiento el pr¨®ximo 30 de septiembre.

La capacidad de China para abordar megaproyectos hab¨ªa quedado patente con la presa de las Tres Gargantas, una gran muralla levantada en el curso del r¨ªo Yangts¨¦ de 2.309 metros de longitud y 185 de altura. Los 17 tortuosos a?os que tard¨® en levantarse dan idea de la enorme dificultad para cimentar una obra que alberga la central hidroel¨¦ctrica m¨¢s potente del planeta.

Ya dec¨ªa Julio Verne que todo lo que un hombre pueda imaginar, otros podr¨¢n hacerlo realidad. La tecnolog¨ªa del siglo XXI le est¨¢ ganando claramente la partida a las serendipias literarias. El tren supers¨®nico Hyperloop, capaz a viajar a 1.200 kil¨®metros por hora dentro de un tubo sensorizado, es solo un ejemplo. Ideado por el visionario tecnol¨®gico Elon Musk, fundador del PayPal, Tesla y SpaceX, el proyecto se present¨® recientemente en el Puerto de Santa Mar¨ªa (C¨¢diz) y promete recorrer en apenas una hora la distancia que separa la ciudad andaluza de Barcelona. Las l¨ªneas comerciales ultralargas de aviaci¨®n tienen su propio r¨¦cord: Singapur-Nueva York sin escalas en 18 horas y 45 minutos para recorren de un tir¨®n los 16.700 kil¨®metros de la ruta. Un hito para el transporte a¨¦reo y un verdadero suplicio para los pasajeros de clase turista encajonados en sus inc¨®modos asientos.