As¨ª vest¨ªan los apaches cuando te iban a rebanar el cuello

Mi primer apache, como el de muchos de mi generaci¨®n, fue Winnetou, el personaje del novelista alem¨¢n Karl May que viv¨ªa grandes aventuras junto a su blood brother Old Shatterhand ¨Cen el cine Lex Barker, viejo conocido, en diferentes papeles, de Chita y de Tita (Cervera)¨C. Winnetou, descrito como el noble jefe de los mescaleros, era un apache de feria, muy dulcificado, rom¨¢ntico y pacifista, aunque, eso s¨ª, el t¨ªo vest¨ªa como un se?or. Pas¨¦ muchos a?os envidiando la indumentaria que luc¨ªa en las pel¨ªculas, una fabulosa camisa de ante decorada con p¨²as de puercoesp¨ªn y mucho fleco, pantalones a juego, una fina cinta en el pelo que era casi una diadema, collar de garras de oso, y su arma, Silberb¨¹chse, el rifle plateado, con tachuelas de plata incrustadas.

Como he apuntado, Winnetou era un apache un poco delicuescente, lo que tiene que ver con que Karl May no visit¨® EE UU hasta los 66 a?os y lo m¨¢s al oeste que lleg¨® fue a B¨²falo (Nueva York). As¨ª que no conoci¨® a los verdaderos apaches, pues de hacerlo, y de haber sobrevivido, le habr¨ªan salido en las novelas pel¨ªn m¨¢s broncos. Ve Ger¨®nimo a Winnetou y le da un ataque de risa y hasta lo saca a bailar. No dir¨¦ que yo sea un fino experto en apaches, pero no confundir¨ªa nunca a un chiricahua con un cu¨¢quero y pondr¨ªa pies en polvorosa solo de ver a uno de los primeros. Tambi¨¦n es cierto que eran dif¨ªciles de ver. ¡°Viniendo hacia aqu¨ª hemos visto unos apaches¡±, comenta el nuevo mando de Fort Apache, el estirado teniente coronel Thursday (Henry Fonda), en el gran filme de John Ford. A lo que el veterano capit¨¢n Yorke (John Wayne) responde: ¡°Si usted los vio, se?or, no eran apaches¡±.

"Vest¨ªan camisa y pantalones de algod¨®n, taparrabos (que no falte), mocasines en forma de bota hasta la rodilla, y llevaban una cinta muy ancha alrededor de la frente para sujetarse el largo cabello"

La indumentaria verdadera de los apaches era mucho m¨¢s funcional y casual, por as¨ª decirlo, que la de Winnetou. Si el vestuario de los sioux, cheyennes, kiowas y dem¨¢s indios de las praderas resultaba un fest¨ªn para los ojos, con sus exuberantes penachos y bonetes de plumas, sus camisas de guerra de piel de b¨²falo adornadas con cabelleras, sus polainas y su porte de jinetes de club de polo (hablaremos un d¨ªa de ellos, palabra de Caballo Loco), el de los apaches era de una sobriedad que espantaba, acorde con una tierra infernal, la reseca y bald¨ªa Apacher¨ªa, y unas gentes de car¨¢cter hosco y hasta cruel, a juego con el paisaje y la abundancia de serpientes de cascabel.

Vest¨ªan camisa y pantalones de algod¨®n, taparrabos (que no falte), mocasines en forma de bota hasta la rodilla, y llevaban una cinta muy ancha alrededor de la frente para sujetarse el largo cabello. Como complemento, un pa?uelo al cuello cerrado con una concha. El toque adicional de una franja de pintura blanca en la cara, junto a la maza, rifle, rev¨®lver o arco con flechas embadurnadas en un h¨ªgado de caballo podrido, significaba (qu¨¦ importante es saber de moda) que estaban de guerra y que, consecuentemente, te iban a masacrar. Destacaron en el vestir adusto (y la guerra) Ger¨®nimo, claro, que acompa?aba su vestimenta con un notable rictus de mala hostia, y el alto y musculoso jefe mimbre?o Mangas Coloradas (que suena a modelito de temporada pero seguramente ten¨ªa m¨¢s que ver con que iba empapado hasta los codos de sangre), sus hijos Mangas y Naiche, su yerno Cochise, Juh o Nana.

A la hora de quedarme con un icono de moda apache, sin embargo, yo me quedo, en dura pugna con el de Burt Lancaster (Apache, 1954), con el Raphael de Johnny Depp (¨¦l mismo de ascendencia cherokee) de la oscur¨ªsima The brave. Tr¨¢gico y hermoso, con su omnipresente bandana, nada que ver con su doblemente Tonto comanche de El llanero solitario¡­