Emily Ratajkowski: la revoluci¨®n sexual de la supermodelo de izquierdas
Fue arrestada por entrar al Senado de EE UU por la fuerza. Se manifestaba por cambiar un sistema que considera injusto. Cuando la mayor¨ªa de los famosos evita implicarse, ella apuesta por un cambio radical y no ve incoherente exhibirse un d¨ªa sin ropa y al siguiente con una pancarta feminista. Tiene m¨¢s de 20 millones de seguidores en Instagram, es la embajadora de Pure XS for Her, de Paco Rabanne, y su pr¨®ximo objetivo es el cine
Para ciertas cosas, 2013 parece parte del siglo pasado. En marzo de aquel a?o, el cantante estadounidense Robin Thicke publicaba Blurred lines, un sencillo que alcanz¨® el n¨²mero uno en una veintena de pa¨ªses, incluido Estados Unidos, donde mantuvo el puesto durante tres meses, rompiendo r¨¦cords de ventas, descargas y streaming. El tema, bailable y pegadizo, era ineludible. Algo que seis a?os despu¨¦s resulta alucinante si se revisa la letra, que algunos interpretan casi como una invitaci¨®n a la violaci¨®n, y el v¨ªdeo, en el que el cantante, su mentor, Pharrell Williams, y el rapero T.I. aparecen rodeados, en su versi¨®n sin censurar, por tres mujeres que solo visten un tanga.
Thicke fue acusado de mis¨®gino y de perpetuar los arcaicos estereotipos machistas del hip hop, pero nada impidi¨® que su canci¨®n fuera un bombazo. La directora del clip, Diane Martel, trat¨® de convencer al mundo de que su trabajo era en realidad un intento de subvertir los t¨®picos del g¨¦nero. ¡°Mira la actuaci¨®n de Emily Ratajkowski: es muy, muy divertida. Y sutilmente rid¨ªcula. Eso es lo fresco para m¨ª. Obliga a los hombres a actuar de una forma juguetona. No parecen depredadores¡±, explic¨®, refiri¨¦ndose a una de las tres chicas semidesnudas, entonces pr¨¢cticamente desconocida. Nadie pod¨ªa imaginar que un lustro despu¨¦s aquella figurante ser¨ªa una de las mujeres m¨¢s seguidas en las redes sociales, entre otras cosas por esgrimir la bandera del feminismo sin vestir mucha m¨¢s ropa que la que luc¨ªa en aquel videoclip.
Para una sociedad que a¨²n est¨¢ tratando de asimilar la revoluci¨®n feminista, Emily resulta una propuesta dif¨ªcil de digerir. Dice que no se va a disculpar por mostrarse c¨®moda y orgullosa de su sexualidad ¡°fuera de la mirada patriarcal¡±
Para una sociedad que a¨²n est¨¢ tratando de asimilar la revoluci¨®n feminista, Emily Ratajkowski (Westminster, Reino Unido, 1991) resulta una propuesta dif¨ªcil de digerir. Ella dice no necesitar licencia ni permiso de nadie para considerarse feminista y a¨²n menos piensa disculparse por mostrarse c¨®moda y orgullosa de su sexualidad ¡°fuera de la mirada patriarcal¡±. Y todo esto ¨Cenriquecido por un h¨¢bil manejo de las redes y los golpes de efecto¨C la ha convertido en uno de los rostros m¨¢s deseados, envidiados, cotilleados y cuestionados de nuestro tiempo. Algo as¨ª como la chica de portada oficial de la era Instagram.
Y enti¨¦ndase por portada aquello que cubre las revistas de papel de toda la vida. Ratajkowski se ha revelado como un fen¨®meno transversal y multiplataforma. El traje de mera influencer le queda dos tallas peque?o, y el de supermodelo, tal vez le quede algo desfasado. El de feminista, bueno, el viejo arquetipo sugiere que alguien como ella no sabr¨ªa ni en qu¨¦ armario buscarlo. Pero a Ratajkowski le sientan bien los tres. Primero conquist¨® las cabeceras masculinas (los lectores de la edici¨®n estadounidense de Esquire la eligieron mujer del a?o en 2013; meses despu¨¦s, su rival, GQ, le dedicaba su cubierta). Despu¨¦s, las portadas de las femeninas (de Vogue a Marie Claire o SModa, todas las grandes revistas han acabado rendidas a su influjo¡ o al menos a la repercusi¨®n que garantiza su suculenta comunidad de seguidores). Las redes ya hace tiempo que son suyas. Solo le queda lograr que cuando porta una pancarta el p¨²blico se fije en el eslogan y no en ella. Complicado, no imposible.
En 2019 ya nadie se acuerda de Robin Thicke, pero todos saben que no van a olvidar a Ratajkowski. Aunque el tiempo ha jugado a su favor, Emily renuncia a responder preguntas sobre ese momento. Aquel v¨ªdeo fue su despegue, nada m¨¢s, y cinco a?os son muchos a?os en la vida de una joven modelo y actriz con 21,3 millones de seguidores en Instagram. M¨¢s habitantes que Noruega, Suecia y Dinamarca juntas.
Ratajkowsky est¨¢ en Madrid en su papel de embajadora de Pure XS for Her, el nuevo perfume de Paco Rabanne. Apenas pasar¨¢ en la ciudad 24 horas. ¡°He estado en cuatro continentes en una semana. Es bastante excesivo. ?C¨®mo sobrevivo? Buena pregunta. No lo s¨¦. Bueno, s¨ª, bebo mucha agua¡±. Agua como combustible para alguien que aterrizaba a primera hora de la ma?ana proveniente de Nueva York, pasaba por el hotel para darse una ducha r¨¢pida y se dirig¨ªa directamente a la cita con ICON.
No hay m¨¢s que echar un vistazo para ver que no es una sesi¨®n de fotos m¨¢s. Hay tanta gente en el estudio que parece un entrenamiento del Real Madrid: media docena de empleados de la marca y casi una veintena encarg¨¢ndose de fotograf¨ªa, v¨ªdeo, estilismo, maquillaje, peluquer¨ªa, producci¨®n, catering y decorados. Incluso le han puesto un enorme guardaespaldas, algo rar¨ªsimo en las producciones de esta revista. Resumiendo: es una estrella.
"Izquierda caviar"
Y el nombre de ese astro es @emrata, su usuario en Instagram, un perfil dif¨ªcil de definir, algo que normalmente penaliza en esta red social cuyas mayores estrellas basan su ¨¦xito en cuentas monotem¨¢ticas y monocrom¨¢ticas. En Instagram, la modelo promociona sus propios productos o aquellos que pueden permitirse pagar su tarifa (unos 23.500 euros por cada foto, se rumorea), am¨¦n de las causas en las que cree, como los movimiento Black Lives Matter y Me Too o campa?as sobre planificaci¨®n familiar. Emrata podr¨ªa ser la actualizaci¨®n a la era Instagram del concepto izquierda caviar.
"La mayor¨ªa de las adolescentes son introducidas a la sexualidad a trav¨¦s de la pornograf¨ªa o de im¨¢genes retocadas de celebridades. ?Es ese el ¨²nico ejemplo de mujeres sexuales que vamos a mostrarles?"
Mientras este cronista escribe estas l¨ªneas ha subido una foto en la que aparece vestida con uno de los bikinis que dise?a para su marca, Inamorataswim. En dos horas acumula m¨¢s de 640.000 "me gusta". Para que se haga una idea, una foto de la primera dama de EE UU, Melania Trump, publicada un d¨ªa antes, no llega a los 200.000. ¡°La importancia de Instagram en mi carrera ha sido enorme. Las modelos de hoy tenemos la capacidad de controlar nuestra imagen. Soy amiga de algunas que desarrollaron sus carreras en la d¨¦cada de 2000 y no ten¨ªan forma de hacerlo, depend¨ªan de otros. As¨ª que me parece una herramienta muy poderosa¡±.
Su boda por sorpresa en febrero de 2018, en el Ayuntamiento de Nueva York, vestida de Zara, con solo cuatro amigos de testigos, y con un novio, el actor y productor de perfil independiente Sebastian Bear-McClard, que nadie sab¨ªa que exist¨ªa, demuestra que dice la verdad cuando afirma: ¡°Yo mantengo en privado muchas cosas. Quiero decir que en mi Instagram no se ve nada de m¨ª que sea realmente privado¡±. Ella juega en una liga particular: la de los modelos-influencer. Profesionales que tienen que ver tanto con la moda como con todo lo dem¨¢s. Aunque pisa poco las pasarelas, cuando lo hace, es a lo grande. Estuvo tres a?os sin desfilar, pero su vuelta ha sido en esos allstars de supermodelos a los que Donatella Versace nos tiene acostumbrados ¨²ltimamente.
Ratajkowsky se define en cuatro palabras: ¡°modelo, actriz, feminista y empresaria¡±. Lo tercero es lo m¨¢s conflictivo. ¡°La idea de que desnudarse podr¨ªa ser un acto feminista ya la tuvimos en los a?os noventa¡±, le afe¨® la columnista de The Guardian Hadley Freeman. ¡°Se critica a las mujeres tanto si se cubren como si muestran su cuerpo. Es desafortunado que nuestra cultura juzgue as¨ª a las mujeres¡±, arguye Ratajkowski, que lleva a?os defendiendo que mostrarse sexi no implica plegarse al deseo masculino. ¡°Para m¨ª, sexi es un tipo de belleza, un tipo de expresi¨®n personal, algo que debe celebrarse, algo maravillosamente femenino. ?Por qu¨¦ el sexo tiene que ser algo que los hombres arrancan a las mujeres y que las mujeres entregan? La mayor¨ªa de las adolescentes son introducidas a la sexualidad a trav¨¦s de la pornograf¨ªa o de im¨¢genes retocadas de celebridades. ?Es ese el ¨²nico ejemplo de mujeres sexuales que vamos a mostrarles? ?D¨®nde pueden las ni?as ver a mujeres que se empoderan decidiendo cu¨¢ndo y c¨®mo ser o sentirse sexuales? La vida no puede estar dictada por las percepciones de otros. Para m¨ª, las personas que reaccionan ante mi sexualidad son las que tienen un problema, no yo¡±.
En 2016, Ratajkowsky desarroll¨® esta idea en un texto para Lenny letter, la newsletter feminista de Lena Dunham, directora de la serie Girls. El art¨ªculo le granje¨® multitud de inesperadas adhesiones entre la prensa y otras celebridades, adem¨¢s del habitual pu?ado de cr¨ªticas. Emily y Lena, dos iconos generacionales aparentemente opuestos, mantienen desde entonces una relaci¨®n estrecha. Recientemente, Emrata retrat¨® a Dunham luciendo uno de los ba?adores dise?ados por ella. ¡°He amado a Emily desde siempre, porque es lista, amable, sabe lo complejo que es el feminismo y la feminidad y sabe mandar a la mierda cuando es necesario. Un honor ponerse frente a su c¨¢mara¡±, escrib¨ªa en su cuenta de Instagram tras la sesi¨®n la cineasta, criticada por exhibir su normal¨ªsimo cuerpo casi tanto como Emily por hacer lo propio con sus convicciones. Con todo, Ratajkowsky parece ya un poco harta de justificarse. ¡°En toda industria, todo el mundo tiene que probar que vale. Pero yo creo que en esta incluso m¨¢s. A la gente no le gusta que una mujer tenga opiniones firmes¡±.
Opiniones no es lo que durante d¨¦cadas se esperaba de las modelos, oficio al que el imaginario popular ha colocado en la cadena evolutiva justo por encima de las participantes de concursos de belleza. Cuando se les preguntaba sobre sus inquietudes pol¨ªticas, pocos confiaban en que fueran m¨¢s all¨¢ del cl¨¢sico ¡°la paz en el mundo¡±. Pero Emily O¡¯Hara Ratajkowski, estadounidense nacida en Reino Unido, hija ¨²nica de profesores universitarios, creci¨® en uno de esos hogares donde la pol¨ªtica es inseparable de la vida. ¡°Comenc¨¦ a tener una conciencia feminista muy temprano gracias a mi madre, que ense?a literatura. Del mismo modo que algunas personas tienen una religi¨®n que marca su infancia, yo escuchaba las conversaciones de mis padres, que son dos personas superpolitizadas. Ser modelo y feminista definitivamente no es una contradicci¨®n para m¨ª. Creo que hay una suposici¨®n, en parte debido a ciertos estereotipos, de c¨®mo deber¨ªa ser y c¨®mo debe mostrarse una feminista. La idea de que una mujer debe tener determinada apariencia para tener ciertas creencias es sexista. Cualquiera puede ser feminista siempre que esa sea su elecci¨®n, independientemente de a qu¨¦ se dedique y de qu¨¦ forma vista¡±.
Apoyo a Bernie Sanders
En un negocio dominado por esa variable del miedo llamada correcci¨®n y gestionado por publicistas pasivo-agresivos, Ratajkowski es famosa por meterse en jardines. Su apoyo a Bernie Sanders en las primarias del Partido Dem¨®crata la llev¨® a abrir uno de sus m¨ªtines, lo que quiz¨¢ sentara igual de mal entre el electorado republicano como entre los que pensaban que como mujer y feminista su apoyo deb¨ªa ser para Hillary Clinton. ¡°No es que sienta la obligaci¨®n de posicionarme. Me sale de forma natural. No es que piense: ¡®Oh, Dios m¨ªo, tengo que hablar sobre esto¡¯. Es algo que siempre ha sido importante para m¨ª¡±.
Hoy, m¨¢s prudente, reh¨²sa hablar de Trump y, cuando se le pregunta sobre c¨®mo desea que sea el pr¨®ximo presidente, concede algo aparentemente tibio, pero cargado de contenido: ¡°Me gustar¨ªa que fuera alguien que no tenga lazos con las corporaciones y estuviera muy a la izquierda, alguien que cambiara el sistema por completo¡±. Aun as¨ª, se revuelve nerviosa cuando se le pregunta desde cu¨¢ndo se considera activista. Y contesta con humildad. ¡°Todav¨ªa tengo un conflicto con el concepto. Algunas personas piensan que se puede ser activista publicando stories en Instagram y otras opinan que eso es una tonter¨ªa. Por eso no s¨¦ si me siento c¨®moda usando ese t¨¦rmino. Soy pol¨ªticamente activa y defiendo las ideas en las que creo. Y en eso empec¨¦ muy joven: las de Obama [noviembre de 2008] fueron las primeras elecciones en las que pod¨ªa votar. Y trabaj¨¦ en esa campa?a¡±.
Resulta curioso que no quiera aplicarse el concepto. Hace pocos meses, el 4 de octubre, exactamente, fue una de las detenidas por entrar a la fuerza en el edificio del Senado de Estados Unidos. Ocurri¨® durante una protesta que pretend¨ªa evitar que el candidato de Donald Trump para el Tribunal Supremo fuera ratificado. Tras quedar en libertad colg¨® un post en Instagram. ¡°Hoy he sido arrestada por protestar contra el nombramiento de Brett Kavanaugh en el Tribunal Supremo. Un hombre que ha sido acusado por m¨²ltiples mujeres de agresi¨®n sexual. Los hombres que hacen da?o a las mujeres ya no pueden ser colocados en puestos de poder¡±, escribi¨®. En la foto aparec¨ªa sosteniendo una pancarta en la que se le¨ªa: ¡°Respeta la existencia femenina o espera nuestra resistencia¡±. En unas horas superaba el mill¨®n y medio de likes. Yo a eso lo llamo activismo, le comento. ¡°Bueno, lo es para ti, pero no para todo el mundo¡±, zanja ella.
Cine 'machoc¨¦ntrico'
Se r¨ªe, pero no quiere decir una palabra m¨¢s al respecto. Emily Ratajkowski ha pedido evitar en esta ocasi¨®n las preguntas expl¨ªcitamente pol¨ªticas. Se dir¨ªa que ha escarmentado. Es comprensible, viendo las reacciones a sus opiniones. Por ejemplo, el d¨ªa del arresto, cuando su amiga, la actriz Amy Schumer, tambi¨¦n detenida, regres¨® a su casa, denunci¨® en sus redes que con 302 detenidos los internautas estuvieran troleando a Ratajkowski por no llevar sujetador durante la protesta. ¡°?Y? Yo tampoco llevaba¡±, escribi¨®. Bueno, si alguien dijo algo sobre el sost¨¦n de Schumer, nadie lo escuch¨®. Ella es humorista, guionista y directora. Y ya se sabe que las intelectuales pueden ir sin sujetador. Sin embargo, si una modelo se mete en pol¨ªtica, se la trolea hablando de sus tetas. Qui¨¦n sabe si por eso Ratajkowski parece hoy m¨¢s interesada en las posibilidades de expresi¨®n que le ofrece el cine.
Ese 2013, y gracias al famoso v¨ªdeo de Blurred lines, la modelo consigui¨® su primer papel importante. Un secundario en Perdida, la aclamada pel¨ªcula de David Fincher. En 2018 lleg¨® a estrenar cuatro t¨ªtulos. ¡°?ltimamente estoy siendo m¨¢s exigente. No se trata solo del personaje o del proyecto, sino de qui¨¦n es el director y qui¨¦n es el otro actor o actriz involucrado¡±, barrunta. Por eso, afirma, su pr¨®ximo objetivo es producir. ¡°Estoy desarrollando mis propios proyectos. El ¨²ltimo par de a?os he hecho de eso una prioridad. Ahora puedo empezar a hacer mis propias pel¨ªculas. Quiero participar en m¨¢s proyectos con perspectiva femenina. Son sorprendentemente dif¨ªciles de encontrar. Se habla mucho de c¨®mo est¨¢ cambiando la industria, s¨ª, pero el cine sigue siendo en su mayor¨ªa machoc¨¦ntrico. Es importante que ese debate siga en marcha porque a¨²n queda mucho por hacer¡±.
Prep¨¢rese para el asalto de Emrata a la pr¨®xima plataforma. Siguiente parada, la dominaci¨®n mundial.
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