Masako ser¨¢ una emperatriz de Jap¨®n a medio gas

La princesa Masako se convertir¨¢ en emperatriz de Jap¨®n en menos de dos meses, pero en su pa¨ªs hay preocupaci¨®n por su salud. La conocida como la "princesa triste" sufre un "trastorno de adaptaci¨®n" y necesitar¨¢ tiempo para poder asumir todas sus tareas.

"Pensando en los d¨ªas por venir, a veces me preocupa lo que pueda ayudar a la gente, pero har¨¦ todo lo posible para contribuir a su felicidad", dijo la princesa Masako de Jap¨®n en una declaraci¨®n emitida por la Agencia de la Casa Imperial en diciembre pasado con motivo de su 55? cumplea?os.

Esos "pr¨®ximos d¨ªas" est¨¢n ya a la vuelta de la esquina. Su nueva vida comienza a partir del 1 de mayo de 2019. En ese momento, su esposo el pr¨ªncipe Naruhito ascender¨¢ al trono del Crisantemo tras la abdicaci¨®n de su padre, el emperador Akihito. Y ella se convertir¨¢ en la emperatriz de Jap¨®n, en lugar de Michiko.

Masako tiene motivos para preocuparse por la tarea que se avecina, ya que a¨²n su salud es muy fr¨¢gil. Desde 2004 ella sufre oficialmente de depresi¨®n. En ese momento, el pr¨ªncipe Naruhito explic¨®, como ha recordado The Japan Times, que su esposa ¡ªgraduada en Econ¨®micas por la Universidad de Harvard y que habla de forma fluida cinco idiomas (japon¨¦s, ruso, ingl¨¦s, franc¨¦s y alem¨¢n)¡ª abandon¨® su prometedora carrera diplom¨¢tica en 1992 para casarse. Tras sufrir un aborto en 1999, la princesa Aiko, su ¨²nica hija, naci¨® en 2001. Algunos expertos atribuyen su grave depresi¨®n al no haber podido concebir el hijo var¨®n que se exige para heredar el trono y a la presi¨®n a la que ha estado sometida por la rigidez del protocolo de la Casa Imperial.

"Creo que est¨¢ completamente agotada intent¨¢ndolo", dijo el pr¨ªncipe. Entonces se supo que hab¨ªa estado profundamente triste al no permitirsele hacer visitas al extranjero, ya que durante mucho tiempo fue instada a centrarse en su misi¨®n de dar un heredero a la corona y que su personalidad fue anulada. Su situaci¨®n mejor¨® a ra¨ªz del nacimiento, en 2006, del pr¨ªncipe Hisahito (hijo de Fumihito, el hermano menor del pr¨ªncipe heredero), que garantizaba la sucesi¨®n al trono para al menos otra generaci¨®n. Pero durante a?os Masako estuvo desaparecida de la esfera p¨²blica, con apariciones contadas, hasta tal punto que su estado mental lleg¨® a desatar todo tipo de especulaciones.

Ahora, sus problemas se han diagnosticado como un "trastorno de adaptaci¨®n", provocado por el estr¨¦s, que ha sufrido durante 15 a?os. Cuando se celebraron sus 55 a?os, un equipo de m¨¦dicos seg¨²n el diario Asahi Shimbun, aseguraron que "estaba todav¨ªa en el camino de la recuperaci¨®n y que ha habido altibajos en su salud", y agregaron que "era importante que continuara con su terapia". Ella lo dijo: "Seguir¨¦ trabajando para mi sanaci¨®n y me esforzar¨¦ por cumplir con la mayor cantidad posible de los deberes oficiales".

El pasado 21 de febrero el pr¨ªncipe Naruhito dio una conferencia de prensa para conmemorar su 59? cumplea?os. Refiri¨¦ndose a su "querida esposa", dijo, seg¨²n Asahi Shimbun, que todav¨ªa necesitaba tiempo para recuperar la salud. Anunci¨® que era poco probable que Masako pudiera completar todas sus tareas poco despu¨¦s de convertirse en la nueva emperatriz. Sin embargo, expres¨® la esperanza de que "pudiera aprovechar sus experiencias en el extranjero antes del matrimonio para involucrarse m¨¢s en las actividades internacionales". Las puertas de su "prisi¨®n imperial" pueden finalmente abrirse para la princesa Masako.

Masako se convertir¨¢ en la segunda emperatriz del Trono del Crisantemo con un origen plebeyo, despu¨¦s de Michiko. La actual consorte imperial ha contribuido de forma decisiva a acercar la instituci¨®n al pueblo japon¨¦s, que hasta la derrota del pa¨ªs en la Segunda Guerra Mundial consideraba al emperador un descendiente directo de los dioses. Ahora todas las esperanzas est¨¢n puestas en Masako.