Cs y la cadena tr¨®fica
La fortuna es clave en pol¨ªtica y los descomponedores tienen un papel, pero nunca el de reina o rey de la selva
En el ejercicio de la pol¨ªtica, como en cualquier otra actividad profesional, pueden identificarse distintos perfiles. Algunos pol¨ªticos son m¨¢s h¨¢biles en el manejo de la pala mientras la fortaleza de otros reside en el pico; hay quien trabaja los expedientes primero y se preocupa por su imagen, un asunto en alguna medida a tener en cuenta en sociedades, empleando la expresi¨®n popularizada por el maestro Giovanni Sartori en su monograf¨ªa publicada en 1997 Homo Videns: Televisione e Post-Pensiero, despu¨¦s.
Para analizar el momento de Ciudadanos (Cs) recurro al s¨ªmil de la cadena tr¨®fica, no para ofender a sus votantes ni a su direcci¨®n, no es mi estilo, sino para llamar a la reflexi¨®n con car¨¢cter preventivo. En la cadena alimentaria, a trav¨¦s de la cual nos relacionamos para sobrevivir todos los seres vivos, existen tres categor¨ªas de individuos: productores, consumidores y descomponedores. Los primeros son los ¨²nicos capaces de crear, gracias a los rayos de sol, materia org¨¢nica; los ¨²ltimos se alimentan de residuos. Los eslabones de la cadena tr¨®fica est¨¢n jerarquizados; hay niveles. En la pol¨ªtica europea existen partidos emergentes que ofrecen soluciones de pol¨ªticas a grupos de ciudadanos que de hecho no pod¨ªan canalizar sus preferencias a la arena institucional por un d¨¦ficit de oferta. Aunque a muchos no nos guste, Vox es uno de ellos.
Cs naci¨® en 2006 en Catalu?a como respuesta a la mutaci¨®n del nacionalismo en independentismo y creci¨® a partir de 2010 con la debatida sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Autonom¨ªa hasta convertirse en primera fuerza de la oposici¨®n en el Parlamento catal¨¢n en las elecciones auton¨®micas de 2015. Como hemos constado al observar el resultado del 28-A en su regi¨®n de origen, esta estrategia tiene una caducidad y por supuesto un techo.
Su primera incursi¨®n en la pol¨ªtica central fue notable, con 40 esca?os en el Congreso en 2015 y 32 asientos suficientes para la firma del acuerdo de investidura de Rajoy en 2016. La diferencia de poco m¨¢s de 200.000 votos respecto al PP de Casado en 2019 puede ser entendida por Cs como una oportunidad para convertir a Rivera en l¨ªder de la oposici¨®n y eventualmente presidente del gobierno.
Despu¨¦s de todo, en Italia, la Liga hizo similar recorrido. No obstante, si desde las elecciones de 2018 este partido est¨¢ presente en el Gobierno lo hace como sost¨¦n del Movimiento 5 Estrellas, el socio principal. Sin embargo, en 2017 Francia renov¨® su clase pol¨ªtica con una organizaci¨®n creada de la nada y un l¨ªder con un discurso nuevo atractivo para votantes de centro-izquierda y centro-derecha. Aunque su incursi¨®n debilit¨® m¨¢s al Partido Socialista, Macron y su Rep¨²blica en Marcha actuaron como productores no como descomponedores. La fortuna es clave en pol¨ªtica y los descomponedores tienen un papel, pero nunca el de reina o rey de la selva.
Cristina Ares es profesora de Ciencia Pol¨ªtica en la Universidad de Santiago. Este art¨ªculo ha sido elaborado por Agenda P¨²blica para EL PA?S.
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