Los caminos hacia un puesto p¨²blico
Como autodidacta, desde una academia o a trav¨¦s de asesores individuales se puede aspirar a un trabajo en la Administraci¨®n
Convertirse en funcionario no es cosa f¨¢cil. Para conseguirlo se requieren largas horas de estudio, mucha concentraci¨®n y altas dosis de disciplina. No es para menos. Constantemente, miles de personas buscan unirse a la Administraci¨®n general, que este a?o ha ofertado casi 34.000 plazas, la convocatoria m¨¢s amplia de la ¨²ltima d¨¦cada. La oportunidad es inmejorable. Pero, ?cu¨¢l es el secreto para lograr un resultado positivo y destacar entre todos los participantes? "La clave est¨¢ en una buena preparaci¨®n", dice Gloria Oliveros, asesora de la Confederaci¨®n Espa?ola de Empresas de Formaci¨®n (Cecap). Las opciones son m¨²ltiples y van desde estudiar de forma individual hasta acudir a una academia o contratar los servicios de un preparador particular.
"En principio, todo depende de la plaza que se elija", explica Eduardo Dragan, responsable del centro de formaci¨®n Magister. Partiendo de este punto, cada uno de los aspirantes, sin distinci¨®n alguna, tiene las mismas oportunidades. "Las oposiciones se rigen por principios de igualdad, m¨¦rito, capacidad y publicidad. Es decir, que los programas est¨¢n disponibles en Internet tanto para aquellas personas que deciden ir por libre como para las academias que buscan acercar toda la informaci¨®n necesaria a sus alumnos", explica Ana Iglesias, directora pedag¨®gica de Adams Formaci¨®n.
"?Una persona puede prepararse por su cuenta? Claro", arguye Oliveros. Eso siempre, si cuenta con un alto nivel de autodisciplina y un conocimiento previo de las materias del programa, destacan los expertos consultados. El punto es que no existen temarios ni gu¨ªas oficiales que sirvan de br¨²jula para el aspirante. "No siempre hace falta ir a un centro especializado, pero es recomendable porque all¨ª se consigue la informaci¨®n actualizada", abunda la representante de Cecap, que aglutina m¨¢s de 350 academias para prepararse para las oposiciones. Beatriz Chac¨®n ¡ªgranadina de 25 a?os asentada en Madrid¡ª supo desde el principio que ir de "llanero solitario" no era la opci¨®n m¨¢s factible para lograr un puesto en la Administraci¨®n p¨²blica.
Incertidumbres
"Yo eleg¨ª una academia porque es verdad que hay mucha incertidumbre sobre todo el proceso: fechas, tipos de pruebas a realizar, etc¨¦tera", argumenta. Pero no solo eso. "Un centro de preparaci¨®n especializado puede hacer que se reduzca hasta en un 50% el tiempo que se tiene que dedicar a estudiar", a?ade Dragan. ?La raz¨®n? El alumno se olvida de las posibles actualizaciones del temario y de algunos tr¨¢mites, destaca el experto de Magister. "Ojo, porque nos movemos con materiales o con programas que trabajan con mucha legislaci¨®n y va variando constantemente. Imagina cu¨¢nto tiempo se puede perder si te has dedicado a estudiar algo desactualizado", subraya Iglesias.
"La academia te orienta mucho", arguye Sof¨ªa Barrios, madrile?a de 34 a?os que acude regularmente a uno de estos centros desde 2016, cuando inici¨® la preparaci¨®n para obtener una plaza como t¨¦cnico de empleo, una especie de orientador laboral. "Te preparan lo suficiente para todo tipo de pruebas: desde los ex¨¢menes tipo test hasta aquellos en los que tienes que desarrollar un tema; te dan pautas y mucho material de apoyo", agrega. Sin embargo, no todas las academias valen. "Hay que desconfiar de los centros que aseguran el aprobado. Eso nadie lo puede hacer. Una escuela te puede ayudar a estar mejor preparado, pero es incapaz de garantizar que ser¨¢s elegido entre todos los candidatos", recalca Oliveros.
Clases a medida
Acudir a un profesor particular puede ser una opci¨®n viable. Estos, a diferencia de las academias, suelen formar grupos reducidos o trabajar de manera individual con el aspirante a ocupar un cargo en la Administraci¨®n p¨²blica. El plan de estudios puede ser mucho m¨¢s personalizado y suelen poner m¨¢s ¨¦nfasis en las debilidades que tiene el alumno. "Cuando uno se decide por un preparador el precio que va a pagar es mucho mayor", dice Oliveros. "Tambi¨¦n depende de la oposici¨®n que se ha elegido. Si quiero ser abogado del Estado, quiz¨¢s s¨ª que tengo que tener este tipo de asesor¨ªa porque me van a comprobar el tiempo, lo que digo, c¨®mo lo digo, el desarrollo del tema, el examen oral y se me va a corregir sobre la marcha", argumenta.
En el caso de oposiciones masivas, que son de un nivel intermedio, no es necesario llegar a este nivel de asesoramiento, se?ala la experta de Cecap. Pero independientemente de la opci¨®n a elegir, los expertos afirman que hay que hacerlo con tiempo. "Como m¨ªnimo se requieren entre 9 y 12 meses de preparaci¨®n", dice Iglesias. "Hay que plantearse esto con mucha antelaci¨®n para que se pueda competir. Pegarse de un atrac¨®n no es factible. Nadie con cuatro meses de estudio puede esperar obtener un resultado positivo", agrega.
?Y cu¨¢ntas horas hay que dedicarle? "Var¨ªa en cada caso. Pero entre seis y ocho ser¨ªa lo factible", recalca la especialista de Adams. Se podr¨ªa iniciar con un programa que vaya de menos a m¨¢s. "Por ejemplo, hay que co??men??zar a estudiar entre una o dos horas al d¨ªa e ir ampliando (de 15 a 30 minutos) cada semana", comenta Dragan. "Es importante dejar un d¨ªa a la semana que se dedique a revisar, reajustar el calendario de trabajo. Tambi¨¦n hay que dedicar algo de tiempo a los ejercicios de la oposici¨®n, alternando la preparaci¨®n de los distintos tipos de prue??bas", a?ade. Y todos los expertos recomiendan tomarse un respiro despu¨¦s de una temporada larga de estudio.
"La preparaci¨®n de una oposici¨®n es una carrera de fondo", dice Oliveros. Para ello es fundamental mantener la motivaci¨®n, mejorar la concentraci¨®n y reducir la tentaci¨®n de procrastinar. "Siempre hay una raz¨®n, una meta que nos impulsa, y es importante que la tengamos siempre presente. Y si no la tenemos, debemos buscarla. Este motivo ser¨¢ el motor y la br¨²jula que marcar¨¢ nuestro esfuerzo", destaca Iglesias. Para Beatriz, la granadina que sue?a con ser profesora, invertir tiempo en este proceso significa darlo todo en el campo. "Es como el f¨²tbol, si sales a jugar sabiendo que el empate te vale, pues, al final, acabas perdiendo. Entonces, siempre hay que ir a ganar y a conseguir la plaza, aunque si no se consigue, no se acaba el mundo", afirma.
Cambio generacional
La Administraci¨®n general envejece. De acuerdo con un an¨¢lisis del propio Ejecutivo, m¨¢s de la mitad de la actual plantilla se jubilar¨¢ en los pr¨®ximos 10 a?os. "Ello implicar¨¢ una oleada de oposiciones", indica Eduardo Dragan, responsable del centro de formaci¨®n Magister. Actualmente, solo el 10% de los empleados tienen menos de 40 a?os, la edad media llega a los 51,9 a?os. En 2004 se situaba en 46 a?os. Este paulatino envejecimiento se debe a los efectos de la crisis econ¨®mica y a una reducci¨®n en las plazas convocadas, muy por debajo de los niveles que garantizan la reposici¨®n de efectivos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.