El pueblo que quiso adelantar el pago de impuestos
Una moneda local permiti¨® aumentar el poder adquisitivo de los habitantes de un municipio austr¨ªaco
Parece mentira: todo el mundo desear¨ªa evitar pagar impuestos si fuera posible, y la prensa est¨¢ llena de noticias sobre evasi¨®n fiscal. Pero es cierto que una moneda local en un pueblo de Austria hizo que los vecinos quisiesen pagar impuestos de antemano, no porque fueran conscientes del bien com¨²n sino porque les sobraba dinero. Quisiera dedicar mi post de este mes a esta experiencia en un pueblo alpino, explorando sus posibilidades.
Se trata de W?rgl en el Tirol (Austria), pueblo del que ya trat¨¦ a?os atr¨¢s. All¨ª el ayuntamiento decidi¨® circular una moneda oxidable en 1932 que caducaba cada mes, requiriendo pegar un sello del 1% de valor (10 c¨¦ntimos para un billete de 10 euros, por ejemplo). Quien recibi¨® este medio local de intercambio pens¨® en gastarlo antes del chel¨ªn (moneda oficial austr¨ªaca en aquella ¨¦poca), porque guardarlo significaba perder el 12% del valor por a?o. Y as¨ª estimulaba las actividades econ¨®micas locales.
La gente us¨® este dinero primero para cubrir las necesidades b¨¢sicas (alimentos / ropa¡), luego pag¨® la deuda morosa que ten¨ªa y lleg¨® a la etapa de que empezaba a sobrar el dinero que de todas formas seguir¨ªa perdiendo su valor paulatinamente: entonces se inici¨® la ¨¦poca de oro cuando la gente quiso pagar impuestos del futuro, porque les era mejor pagarlos con el dinero sobrante y despu¨¦s contar con m¨¢s dinero para otros fines. En este enlace se puede leer el texto ¨ªntegro de esta historia en alem¨¢n.
La moneda oxidable nos permite tener m¨¢s dinero del necesario y poder gastarlo entonces en pro del bien com¨²n
Si hoy en d¨ªa funcionara una moneda oxidable a nivel de un pa¨ªs, se podr¨ªa aprovechar para aumentar la cotizaci¨®n a la seguridad social: si todo el mundo sabe que el dinero se deval¨²a si se queda con ¨¦l pero puede convertirlo en m¨¢s pensi¨®n en el futuro, es muy probable que la gente quiera cotizar m¨¢s para garantizar su mejor vida como pensionistas. Esto podr¨ªa aumentar tambi¨¦n la cantidad de dinero que reciben los que se han jubilado ya, incrementando su gasto, lo que impulsar¨ªa a¨²n m¨¢s la econom¨ªa nacional.
El aumento de la econom¨ªa nacional significar¨ªa tambi¨¦n el aumento del ingreso para la Hacienda, puesto que habr¨¢ m¨¢s base imponible e IVA, lo que permitir¨ªa tener m¨¢s presupuesto para la educaci¨®n y la sanidad, aunque depender¨¢ de la voluntad pol¨ªtica si este aumento del ingreso ser¨¢ destinado para tales fines. Otra posibilidad ser¨ªa pagar esta moneda oxidable como renta b¨¢sica para menores para ayudar a familias con ni?os y aumentar la natalidad.
Hay que distinguir entre la inflaci¨®n y la oxidaci¨®n: la inflaci¨®n significa el aumento de los precios (por ejemplo: un men¨² del d¨ªa sube de 10 a 12 euros) mientras que la oxidaci¨®n es la p¨¦rdida paulatina de tu poder adquisitivo sin que tenga que modificarse cu¨¢nto vale un kilo de patata. La estabilidad de los precios como medida de valor es fundamental para poder realizar cualquier plan econ¨®mico a medio y largo plazo, porque esto garantiza que un kilo de naranjas vale lo mismo en los pr¨®ximos a?os.
Me preguntar¨¦is qu¨¦ pasar¨¢ con las corrupciones, pues ser¨¢n menos importantes. El hecho de que nadie quiere atesorar el dinero significa que seguir¨¢ circulando para llegar a todo el mundo, y quien tenga m¨¢s dinero que necesario a corto plazo har¨¢ sus esfuerzos para gastarlo, hasta don¨¢ndolo a asociaciones y otras causas sociales, sea lo que sea su forma de ganarlo. Al final y al cabo todo el mundo recibir¨¢ m¨¢s liquidez y nos importar¨¢ menos qui¨¦n se enriquece injustamente, ya que todos viviremos mejor.
La moneda oxidable nos presenta la posibilidad de que tengamos m¨¢s poder adquisitivo que necesario para su vida, permiti¨¦ndonos pensar en gastarlo en pro del bien com¨²n. Ojal¨¢ que se realicen m¨¢s estudios para hacer posible este tipo de sociedad realmente pr¨®spera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.