Los ¡®zapaticos¡¯ llegan en masa a las costas de Granada y M¨¢laga

Los lugare?os las conocen como zapaticos y los cient¨ªficos como salpas, y se trata de un organismo perteneciente al plancton que este fin de semana ha llegado masivamente a las costas de Granada y a las m¨¢s orientales de M¨¢laga. Lo que cientos de ba?istas han descubierto ya sobre la arena de la playa es una masa alargada de miles de peque?os animales transparentes con algo parecido a un bot¨®n luminiscente en su interior. Cada uno de los individuos de esa cadena ¨Ccada Salpa fusiformis en nomenclatura cient¨ªfica¨C es un animal marino transparente con forma de tubo, que avanza bombeando agua a trav¨¦s de su cuerpo a modo de cohete y que, con el tama?o en edad adulta similar al de un dedo pulgar, se traslada por el mar en grandes cadenas de individuos a merced de las mareas y los vientos. Aunque muchos ba?istas puedan confundirlas con las medusas, no tienen ning¨²n efecto urticante ni suponen ning¨²n peligro para los ba?istas.

Los primeros avistamientos y las primeras llegadas masivas a la arena de la playa han tenido lugar el s¨¢bado, seg¨²n explica el bi¨®logo marino Jes¨²s Bellido, del Aula del Mar de M¨¢laga. A mediod¨ªa del lunes, aunque en menor medida, las salpas siguen llegando a las costas granadinas. Los zapaticos no son desconocidos para los ba?istas de la costa de Almu?¨¦car o Motril, como muestra el hecho de que tienen denominaci¨®n popular aunque, como hace tiempo que no arribaban en la cantidad en que han llegado este fin de semana, es posible que los m¨¢s j¨®venes no los conozcan. Y no son extra?os para quienes veranean en esas playas porque no vienen de muy lejos. Las salpas son aut¨®ctonas de la zona, solo que no se dejan ver mucho. Como cuenta Bellido, este plancton navega a su aire por el mar de Albor¨¢n, donde se alimenta de microplancton.

Los cient¨ªficos del Aula del Mar de M¨¢laga no son capaces de determinar exactamente la raz¨®n para la llegada masiva de este fin de semana

Los cient¨ªficos del Aula del Mar no son capaces de determinar exactamente la raz¨®n para la llegada masiva de este fin de semana. Para Bellido puede explicarse a un cambio del viento ¡°que haya desgajado parte de un banco y las haya acercado a la costa¡± o, como explica la doctora en bioqu¨ªmica y biolog¨ªa molecular Rosa Porcel, que fue de las primeras en advertir de la situaci¨®n en Twitter, ¡°se puede deber a un bloom o subid¨®n en la cantidad de fitoplancton de la zona debido a la temperatura del agua en este momento. Las salpas se alimentan de eso y puede ser que, gracias a esa gran cantidad de nutrientes, hayan aprovechado para alimentarse y reproducirse masivamente¡±. Porque igual que se trasladan por miles, los zapaticos tienen la facilidad de reproducirse por miles, describe Porcel.

Su reproducci¨®n, adem¨¢s de vertiginosa, puede ocurrir de forma variada, asexual o sexual. O lo que es lo mismo, solas o acompa?adas. En el caso de la primera, es muy r¨¢pida, pr¨¢cticamente una clonaci¨®n. ¡°A partir de un individuo se pueden generar cadenas de cientos de individuos iguales¡±, dice Porcel. Ese efecto, multiplicado por miles, genera bancos gigantescos de esta especie de supositorios transparentes. Y del mismo modo que estos invertebrados gelatinosos nacen y viajan en grandes cantidades, cuando llegan a la costa mueren en esa misma medida porque, una vez quedan sobre la arena fuera del agua, ya les resulta imposible volver al mar y acaban muriendo.

La llegada de las salpas o zapaticos ha impresionado a los ba?istas y, en consecuencia, ha inundado Twitter. Rosa Porcel (@bioamara) fue de las primeras en advertir de la llegada de estos animales. Como cient¨ªfica y divulgadora de la ciencia su objetivo fue, adem¨¢s, que los ba?istas no les hicieran da?o. A partir de ah¨ª, el hilo abierto, con m¨¢s de 16.000 me gusta, ha servido?para divulgar a estos peque?os animales de aspecto antediluviano y m¨¢xima simplicidad y casi desconocidos hasta el momento. Estos zapaticos hacen su aportaci¨®n a la lucha contra el cambio clim¨¢tico cuando fijan di¨®xido de carbono.