No hag¨¢is tonter¨ªas
El PSOE no solo debe aspirar a poner en marcha una legislatura. Debe tambi¨¦n garantizar un gobierno que sume mayor¨ªas suficientes para consolidar un proyecto robusto de pa¨ªs
La frase la pronunci¨® Barak Obama en 2014 (¡°Don¡¯t do stupid shit¡±) en una conversaci¨®n con periodistas que desvel¨® Mark Landler en su libro Alter Egos (2016). El presidente norteamericano se refer¨ªa con acierto metaf¨®rico al enfoque con el que su administraci¨®n quer¨ªa orientar la pol¨ªtica exterior. La expresi¨®n traduce con sencillez la manera en la que un l¨ªder aspiraba a administrar el amplio poder del que dispon¨ªa y por el que deb¨ªa responder.
Vale la pena traer a colaci¨®n esta frase a una semana de la sesi¨®n de investidura de Pedro S¨¢nchez. Que exista Gobierno el 23 o el 25 de julio depende de que los grupos parlamentarios administren el poder que han recibido con la inteligencia suficiente para alinear los intereses personales y de partido con los generales del pa¨ªs. Desde este planteamiento, y obviando ahora a un PP y Ciudadanos que no parecen sentirse concernidos por la gobernabilidad de Espa?a, es evidente que el PSOE no solo debe aspirar a poner en marcha una legislatura. Debe tambi¨¦n garantizar un gobierno que sume mayor¨ªas suficientes para materializar una exigente agenda reformista que consolide un proyecto robusto de pa¨ªs. ?Es posible hacerlo en coalici¨®n con Unidas Podemos? Tengo serias dudas. Las incoherencias de un equipo de gobierno como el que imagina Pablo Iglesias no tardar¨ªan en manifestarse haciendo dif¨ªcil la cohabitaci¨®n interna hasta el punto de comprometer irreversiblemente su viabilidad.
Podemos tambi¨¦n necesita acertar al valorar c¨®mo quiere administrar un poder menguante de futuro incierto si, como parece, se consolidan alternativas pol¨ªticas impulsadas por viejos compa?eros de partido. ?Es la mejor estrategia para frenar su declive negociar la presencia de su l¨ªder en el Consejo de Ministros? Me cuesta creerlo. Obviamente Podemos aspira a rentabilizar los ¨¦xitos resultantes de un impulso en materia social, pero tambi¨¦n tiene incentivos para evitar quedar lastrado por aquellas decisiones de gobierno que puedan decepcionar a un electorado ubicado a la izquierda del PSOE. ?Podr¨ªa reservarse esos espacios de oposici¨®n si sus l¨ªderes son parte del ejecutivo? ?C¨®mo hacerlo sin incurrir en deslealtad con sus compa?eros de gobierno?
Los partidos implicados directamente en las conversaciones conducentes a negociar una f¨®rmula que impida el bloqueo institucional tendr¨¢n que dar respuesta a todas estas preguntas si quieren favorecer el ¨¦xito de un gobierno de progreso para los pr¨®ximos cuatro a?os. El proceso deber¨ªa estar inspirado en la defensa del inter¨¦s general, aunque no sea menor la influencia que pueda tener en su final las leg¨ªtimas aspiraciones, miedos y desconfianzas de quienes han obtenido un mandato representativo. Queda todav¨ªa una semana de trabajo que nadie deber¨ªa desaprovechar. Entre tanto, no est¨¢ dem¨¢s apelar a la responsabilidad de todos record¨¢ndoles la importancia de no hacer demasiadas tonter¨ªas. Espa?a no se lo puede permitir.
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