El espa?ol se queda sin hablantes en Gibraltar

GUY RECITA DE corrido el Quijote. Tambi¨¦n a Shakespeare. Habla, lee y disfruta el espa?ol y el ingl¨¦s, como buen ciudadano de Gibraltar. Aunque su devoci¨®n es Federico Garc¨ªa Lorca. Lo mismo recita un romance en mitad de Main Street, la calle Real para los hispanohablantes, o en las escuelas de un lado y otro de la frontera ante ni?os que est¨¢n perdiendo el inter¨¦s hacia el idioma de sus mayores. ¡°La culpa la tiene Facebook¡±, critica el llanito, ¡°que ha sacado a los ni?os de las calles¡±. El espa?ol se pierde en Gibraltar. ¡°Hace mucho que los ni?os no lo hablan¡±, confirma Olivero, propietario jubilado de un bar en Casemates Square.

La lengua de Cervantes nunca dej¨® de hablarse en Gibraltar. En la calle, el espa?ol se convirti¨® en el idioma principal incluso despu¨¦s de que la ciudad cayese en manos inglesas y los pobladores exiliados fundasen la ¡°Muy noble y m¨¢s leal ciudad de San Roque, donde reside la de Gibraltar¡±. La pujante econom¨ªa requer¨ªa mano de obra y quienes vieron fortuna en el Pe?¨®n ¡ªgenoveses, malteses, hebreos de vuelta a la Pen¨ªnsula e incluso espa?oles¡ª convinieron que se entend¨ªan mejor en castellano, el idioma de la comarca.

¡°Si la tirada del Gibraltar Chronicle, el peri¨®dico del establishment ingl¨¦s, ten¨ªa una tirada en 1890 de 500 ejemplares, El Calpense y El Anunciador, sus competidores en espa?ol, se vend¨ªan por miles¡±, explica el ling¨¹ista Lionel Cipollina, presidente saliente del Grupo Transfronterizo, que a¨²na a empresarios y sindicatos de ambos lados de la verja. Su voz es una de las que primero han alertado del poco uso que los j¨®venes hacen del espa?ol. Recuerda c¨®mo detr¨¢s de cada afrenta a su soberan¨ªa, los gibraltare?os fueron primando el uso del ingl¨¦s, incluso en el ¨¢mbito dom¨¦stico, y erosionando al espa?ol. ¡°El idioma se ha politizado, muchos de los pol¨ªticos ven negativo que se pierda el espa?ol, pero no se atreven a lanzar pol¨ªticas que vayan contra el ingl¨¦s¡±, dice. ¡°Gibraltar quiere seguir siendo biling¨¹e y, aunque hay voluntad pol¨ªtica, a este problema ya se ha llegado tarde¡±.

A Jade, Ashlyn y el resto de alumnas del Westside School de Gibraltar les ri?en sus abuelos, llanitos, por hablarles en ingl¨¦s. ¡°Mi abuela me pide que le hable en espa?ol, para que no se pierda, pero entre nosotros hablamos siempre en ingl¨¦s¡±, apunta Jade Romero, de 17 a?os. Y a?ade: ¡°Mi madre dice que ella piensa en espa?ol, pero yo ya pienso en ingl¨¦s¡±. Para Pie S¨¢nchez, gibraltare?a, profesora, directora del departamento de espa?ol y licenciada en Filolog¨ªa Hisp¨¢nica, la culpa de la p¨¦rdida del castellano entre los j¨®venes la tienen la televisi¨®n por sat¨¦lite y las redes sociales: ¡°Antes se ve¨ªa Canal Sur o La 1, en espa?ol; para m¨ª siempre ser¨¢ Pipi Calzaslargas y no Pippi Longstocking, o La abeja Maya, no Maya the Bee. Pero Instagram, Twitter o Facebook las usan en ingl¨¦s¡±.

Los alumnos gibraltare?os dan dos horas semanales de espa?ol desde los 12 a?os hasta los 16. El n¨²mero de horas se ha ampliado en otras etapas de la educaci¨®n obligatoria. Esta es la conclusi¨®n de Pie: ¡°El Gobierno se ha dado cuenta de que se estaba hablando poco y mal el espa?ol, un idioma que forma parte de la identidad de Gibraltar¡±.