?Por qu¨¦ gan¨® Espa?a el Mundial? Seis claves de los equipos de alto rendimiento para aplicar al d¨ªa a d¨ªa

Para alcanzar resultados extraordinarios necesitamos un equipo de alto rendimiento. Ese ha sido el caso de la selecci¨®n espa?ola de baloncesto en el Mundial de China, donde se ha proclamado campeona. Y es tambi¨¦n el caso de los equipos deportivos o empresariales que logran objetivos ambiciosos. El talento de un equipo no lo determina la suma de las capacidades de sus integrantes. De hecho, estas pueden ser superiores o inferiores a la del conjunto. Todos conocemos profesionales que brillan en un equipo, pero que en otro solo parecen una sombra. Las din¨¢micas de los equipos son tan poderosas que son capaces de multiplicar y de dividir por s¨ª mismas las capacidades individuales. Veamos algunas de esas claves de los equipos de alto rendimiento, que bien podr¨ªamos aplicar en nuestro d¨ªa a d¨ªa.

1. Compartir un prop¨®sito com¨²n. Los integrantes de un equipo excelente persiguen un mismo objetivo. En el deporte suele ser f¨¢cil de identificar: ganar un partido o el campeonato. En el mundo de las organizaciones el prop¨®sito com¨²n no siempre est¨¢ tan compartido. Mientras unos desean mejorar el beneficio, otros anteponen permanecer en su puesto a cualquier precio. Si no hay prop¨®sito com¨²n es dif¨ªcil que haya alto rendimiento. As¨ª de f¨¢cil. Todos los integrantes del equipo deben perseguir un mismo objetivo. Si no es as¨ª, se debe dedicar tiempo a trabajarlo o a tomar decisiones para que todos remen en una misma direcci¨®n.

2. Claridad en los roles y expectativas de cada uno. En el baloncesto se sabe qui¨¦n es el base o el p¨ªvot, dos de las demarcaciones del juego. Eso no significa que los jugadores no puedan intercalar funciones en alg¨²n momento, pero existe cierta claridad y una expectativa de d¨®nde van a estar posicionados en la cancha. Esto mismo debe de trasladarse a los equipos empresariales. Es importante clarificar los roles, que sean complementarios, y definir las expectativas que se tienen sobre los dem¨¢s y sobre uno mismo. De este modo se evitan conflictos y malas interpretaciones. Para lograrlo, antes de comenzar cualquier proyecto hay que analizar las expectativas cruzadas y conversar sobre ello.

3. Confianza en los miembros de tu equipo. No se puede ganar un Mundial, ning¨²n campeonato, ni alcanzar objetivos de venta, o de lo que sea, si no se conf¨ªa en el compa?ero. La ausencia de confianza genera miedo, reproches o excusas de cualquier tipo. Un equipo de alto rendimiento se construye sobre la confianza. Sobre la certeza de que los dem¨¢s van a dar lo mejor de s¨ª mismos en aras del objetivo com¨²n. Normalmente, esa confianza suele sobrepasar los l¨ªmites puramente profesionales. Hace unos a?os un extraordinario y reconocido jugador de f¨²tbol me coment¨® que sab¨ªa desde la noche anterior a un partido si su equipo estaba en condiciones de ganarlo. Todo depend¨ªa de si sus compa?eros se quedaban conversando un poco despu¨¦s de la cena. Este hecho revela que hab¨ªa confianza e inter¨¦s por el otro. Si esto no sucede en nuestro equipo estamos desarrollando un trabajo, poco m¨¢s.

4. Fuerte empat¨ªa. M¨¢s all¨¢ de la confianza, hace falta empat¨ªa hac¨ªa los compa?eros. Esta habilidad supone conocer al otro y ponerse en sus zapatos. Cuando se alcanza ese nivel se consigue un car¨¢cter como equipo, como sucede en la empresa, y acabamos de ver en la selecci¨®n espa?ola de baloncesto, que no era favorita para alzarse con el triunfo. ¡°Se han reforzado unos a otros de forma admirable. El proyecto no comenz¨® bien y la presi¨®n externa amenazaba con disgregar su esfuerzo. Por fortuna, ten¨ªan el objetivo muy claro y se conocen mucho, cosa que adem¨¢s es necesaria mostrar con afecto y esfuerzo¡±, subraya Jos¨¦ Luis Llorente Gento, medallista ol¨ªmpico con la selecci¨®n espa?ola de baloncesto en los Juegos Ol¨ªmpicos de Los ?ngeles en 1984.

5. Calidad de las conversaciones. La confianza se alimenta de buenas y aut¨¦nticas conversaciones, tanto de lo que se comparte como de lo que se piensa. Se pueden definir buenos procesos, pero es el d¨ªa a d¨ªa el que se encarga de que haya errores, fracasos o problemas de planificaci¨®n. Si no existe la capacidad de conversar sobre lo que nos molesta, o sobre lo que nos hemos equivocado, ser¨¢ dif¨ªcil que se construyan relaciones s¨®lidas entre los miembros del equipo. El ¨¦xito, por tanto, estar¨¢ un poco m¨¢s lejos.

6. Reglas de juego definidas y compartidas. ?Qu¨¦ sucede cuando alguien se compromete a algo y no lo cumple? ?C¨®mo se reconocen los ¨¦xitos? ?C¨®mo se viven los fracasos? Las din¨¢micas sutiles tambi¨¦n son importantes para el funcionamiento de un equipo de alto rendimiento. El mundo de la empresa toma prestado del deporte el t¨¦rmino de reglas de juego para el funcionamiento de determinadas din¨¢micas sutiles que deben ser compartidas por todos sus integrantes. Solo de este modo se mantiene la cohesi¨®n del equipo y se alcanza un rendimiento excelente y sostenido en el tiempo.