El ejercicio extenuante afecta al cerebro y a la toma de decisiones

Un total de 19 atletas se enfrentaron a esta pregunta: ¡°?Qu¨¦ prefieres, 10 euros ahora o 100 euros dentro de 10 meses?¡± Contestaron de manera impulsiva que quer¨ªan los 10 euros aqu¨ª y ahora, cuando la "buena" respuesta era la segunda opci¨®n. Los deportistas terminaban?un entrenamiento extenuante de tres semanas. Es lo que explica Bastien Blain, uno de los autores de un estudio publicado este jueves en la revista Current Biology?que pone en relieve el impacto del deporte de alto nivel sobre el cerebro de un atleta.?Un deportista que se prepara para los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos no solo tiene que cuidar de su cuerpo, estirarlo, beber agua, comer prote¨ªna y dormir las horas necesarias para lograr su mejor rendimiento. Su cerebro tambi¨¦n es v¨ªctima de su ejercicio. Las c¨¦lulas del ¨®rgano no salen inmunes: la actividad de la regi¨®n responsable de la toma de decisi¨®n disminuye y altera el comportamiento del atleta.

Los investigadores del Instituto Nacional de Deporte, Experiencia y Rendimiento franc¨¦s (INSEP) y el Hospital de la Piti¨¦ Salp¨ºtri¨¨re de Par¨ªs del cual forma parte Blain, han probado, gracias a la actividad de 37 triatletas, que entrenar con un 40% m¨¢s de intensidad que la norma usual reprime la actividad de la corteza prefrontal lateral del cerebro, es decir, el n¨²cleo de las tomas de decisiones complejas. Para ello, los cient¨ªficos han dividido el grupo de atletas (que estaban en forma y no sufr¨ªan un agotamiento previo) en dos: unos entrenar¨ªan con exceso, los otros con normalidad. Durante nueve semanas, los atletas pasaron por diferentes fases, alternando esfuerzo y reposo. Despu¨¦s del entrenamiento, hac¨ªan tareas variadas como memorizar un n¨²mero de tel¨¦fono por ejemplo, o realizar m¨²ltiples actividades sin poder cometer errores: contestar a una llamada, manejar el correo electr¨®nico y escribir en un documento Word. Los resultados demuestran que el grupo que super¨® el esfuerzo aconsejado ten¨ªa un comportamiento m¨¢s impulsivo en comparaci¨®n con los otros. Adem¨¢s, la memoria se ve¨ªa m¨¢s afectada y hab¨ªa perdido cierta eficiencia. Blain no confirma que se pierdan neuronas aunque Trejo piensa que en circunstancias extremas de fatiga nacen menos.

Sufrir tal comportamiento y sentir un estr¨¦s extremo puede llevar al deportista a utilizar m¨¦todos ilegales como el dopaje

Los da?os son puntuales y las c¨¦lulas madres pueden, tras un reposo adecuado, volver a su oficio con normalidad. Pero los investigadores apuntan que sufrir tal comportamiento y sentir un estr¨¦s extremo puede llevar al deportista a utilizar m¨¦todos ilegales para luchar contra el cansancio f¨ªsico y mental y evitar depresiones.

El estudio ha sido financiado por la Agencia Francesa de Lucha contra el Dopaje (AFLD) porque uno de los principales objetivos de los an¨¢lisis, era entender una de las causas que pod¨ªan llevar a un atleta a recurrir al dopaje. El cient¨ªfico franc¨¦s explica que el INSEP ya hab¨ªa analizado los comportamientos de sus deportistas, pero nunca sac¨® resultados fiables. Frente a este problema que delata el estudio, Blain reitera que el ser humano no debe movilizar todos sus recursos en una sola actividad. ¡°Si la corteza prefrontal del lateral izquierdo [zona del cerebro responsable de la toma de decisiones] es la que se ve afectada es porque acumula demasiados residuos que la ahogan. En vez de aumentar su capacidad, el desbordamiento f¨ªsico la frena¡±, concluye. El experto aconseja que la carga de entrenamiento tiene que ser gradual, controlada y razonable para no poner en riesgo la salud mental y cognitiva de los atletas.

Entre las decisiones est¨¢ tambi¨¦n la de saber parar cuando el cuerpo lo pide, explica Jos¨¦ Luis Trejo, jefe del Laboratorio de Neurog¨¦nesis Adulta del Instituto Cajal (CSIC). Sin embargo, el estudio revela que al practicar ejercicio extremo prolongado el atleta se enfrenta a una competitividad consigo mismo por el mero hecho de tener una motivaci¨®n cognitiva. Quiere ser el campe¨®n y descansar no est¨¢ en sus prioridades. El deporte con exceso le provoca un subid¨®n, crea endorfinas y le permite soportar fatigas extremas. El humano piensa que a veces merece la pena sufrir. Trejo lo compara a un animal: "Un ciervo si se cansa al correr, parar¨¢ y pensar¨¢ ¡®?para qu¨¦ corro?¡¯" Los competidores no se hacen esa pregunta y ese sistema de defensa no es bueno para su salud mental, asevera Trejo. El jefe de laboratorio equipara incluso los efectos del ejercicio extremo sobre el cerebro a los del sedentarismo. Seg¨²n cuenta, el estr¨¦s revierte el sistema. Todos los beneficios de un ejercicio moderado se anulan. "Es como si el atleta fuese sedentario¡±, remata.