Eva Millet: ¡°Muchos padres cr¨ªan en la sobreprotecci¨®n lo que genera una gran ansiedad en sus hijos¡±
La periodista ahonda en su ¨²ltimo libro sobre este trastorno psicol¨®gico e incide en que ¡°los ansiol¨ªticos se est¨¢n convirtiendo en una droga habitual entre nuestros j¨®venes¡±
La inquietud de la periodista Eva Millet (Barcelona, 51 a?os) por la educaci¨®n comenz¨®, hace 17 a?os, tras dar a luz al primero de sus dos hijos. Autora de Hiperpaternidad (2016) e Hiperni?os (2018), Millet ha tratado a fondo la crianza y las consecuencias de la sobreprotecci¨®n. Este lunes sale a la venta su ¨²ltimo libro: Ni?os, adolescentes y ansiedad. ?Un asunto de los hijos o de los padres?, de Plataforma Editorial, en el que diferencia entre la ansiedad como una emoci¨®n m¨¢s -que en ocasiones puede ser una aliada- y la patol¨®gica y profundiza en esta ¨²ltima teniendo en cuenta tanto a padres como a hijos y la sociedad. Repleto de testimonios, referencias y ejemplos pr¨¢cticos, Millet acerca la realidad de un trastorno psicol¨®gico que actualmente sufren m¨¢s de 260 millones de personas, seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud.
P. Usted comenta que: ¡°la ansiedad, como el dinosaurio, siempre ha estado ah¨ª¡±. Entonces, ?por qu¨¦ ahora parece que se est¨¢ dando un boom entre ni?os y adolescentes?
R. Hace unas d¨¦cadas se consideraba que los trastornos de ansiedad no eran cosa de ni?os sino algo poco frecuente, que se ir¨ªa con la edad. Hoy existe m¨¢s consciencia y diagnosis pero, tambi¨¦n, algo de alarmismo, porque hoy se ¡°patologiza¡± pr¨¢cticamente todo. Tambi¨¦n es cierto que corren tiempos muy ansi¨®genos y estamos m¨¢s comunicados e informados que nunca. Y que los padres de hoy en d¨ªa suelen criar en la sobreprotecci¨®n, que es una gran generadora de ansiedad.
P. ?Antes no lo hac¨ªan?
R. Las familias antes eran m¨¢s relajadas porque hab¨ªa otras prioridades. Adem¨¢s, las rutinas de los ni?os de hoy en d¨ªa son cada vez m¨¢s fren¨¦ticas. Todo est¨¢ tan planeado que no tienen tiempo y este estr¨¦s precoz crea ansiedad. Y a los ni?os peque?os hay que darles tiempo para que jueguen al aire libre y sin estructurar. Ese es un gran ant¨ªdoto contra la ansiedad infantil y la mejor extraescolar a los que les podemos apuntar.
P. ?Qu¨¦ m¨¢s puede hacer un padre para no criar j¨®venes con ansiedad patol¨®gica? ?C¨®mo se consigue dejar de ser un hiperpadre?
R. Debemos recordar que sobreproteger es desproteger. Los padres tenemos que educar en la valent¨ªa, una cualidad de car¨¢cter que reivindican expertos como Jos¨¦ Antonio Marina y que es mucho m¨¢s ¨²til que tener tres m¨¢steres. Hay que confiar en la capacidad de los hijos: los padres debemos saber que podemos contarles esos tradicionales cuentos de hadas en los que no todo va bien y que son capaces de resistirlos, como tambi¨¦n pueden hacer sus deberes solos sin traumarse. Pero una de las cosas que crea m¨¢s ansiedad en las personas es la posibilidad de equivocarnos.
P. Es una patolog¨ªa que afecta m¨¢s a las mujeres¡
R. Los estudios indican que en la adolescencia las chicas tienen el doble de ansiedad. Pero es verdad que las mujeres expresamos m¨¢s que los hombres. No nos da tanta verg¨¹enza ir al m¨¦dico y pedir ayuda. Ellos siguen criados en el ¡°los chicos no lloran¡± y por eso siguen guard¨¢ndose las cosas. Considero que es m¨¢s bien un problema cultural.
P. El Informe Estudes del 2017 del Plan Nacional sobre Drogas revel¨® que uno de cada seis adolescentes tom¨® ansiol¨ªticos para calmar tensiones, siendo 13,7 a?os la edad media en la que los prueban por primera vez. ?Cu¨¢l es la consecuencia de esto?
R. Es incre¨ªble. Uno de los datos interesantes era que las ¡°tensiones¡± eran situaciones como enfrentarse a un examen o una ruptura sentimental, algo que hemos superado millones de personas sin ansiol¨ªticos. La pregunta que me hago es: ?de d¨®nde sacan estos ansiol¨ªticos? Es cierto que estos medicamentos son la droga m¨¢s consumida en el mundo, pero no se recetan a la ligera. No s¨¦ c¨®mo los conseguir¨¢n, igual los sacan de la farmacia familiar, igual tienen en casa¡ No lo s¨¦ y el informe no lo responde. Pero los datos est¨¢n ah¨ª. Los ansiol¨ªticos se est¨¢n convirtiendo en una droga habitual entre nuestros j¨®venes.
P. ?Y qu¨¦ hay de este consumo desmedido?
R. Creo que est¨¢n pasando tres cosas. Una es que para el sistema es casi m¨¢s barato que te den una pastilla a que hagas terapia. La terapia es m¨¢s larga y m¨¢s cara. Por otro lado, vivimos en la sociedad de la inmediatez en la que con un click tienes un viaje y con una pastilla te arreglas el problema. Pero sin terapia, la ansiedad patol¨®gica no se cura. Cuando tienes una fobia, has de enfrentarte a ella. Y como pasa con la mayor¨ªa de patolog¨ªas, en los ni?os la cura es m¨¢s r¨¢pida que en los adultos.
P. Usted es madre de dos hijos, ?ha sido usted tambi¨¦n una hipermadre?
R. No, no creo que lo haya sido. Pero es verdad que he sido m¨¢s hipermadre de lo que fue la m¨ªa conmigo (risas). Pero es que est¨¢ en el aire; parece que tiene un efecto contagioso. Por ejemplo, est¨¢ apareciendo la figura del padre o madre que acompa?a a su hijo al examen de Selectividad. Recuerdo que hace unos a?os entrevistaban en t¨¦rminos elogiosos a una madre que se hab¨ªa pedido el d¨ªa libre para llevar a su hija, lo cual me parece horroroso porque esta prueba es un rito de pasaje a la edad adulta y, a menos que tu hijo tenga un problema serio, es algo que puede hacer solo. Pero quien vea desde casa a esta ¡°madre ejemplar¡± se acompleja y acaba yendo tambi¨¦n. Yo intento no caer en ello, pero a veces es inevitable y mis hijos me dicen ¡°?no seas supermadre!¡± (risas).
P. ?De qu¨¦ ir¨¢ el pr¨®ximo libro?
R. Uy, pues de momento no lo s¨¦. Aunque en muchas charlas a las que voy me piden que haga uno sobre los hiperabuelos. (risas). No creo que lo haga , pero me lo piden continuamente.
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