Constance Wu, una actriz contra el patriarcado de Hollywood

ALGUIEN DECIDI? ¡ª?un publicista?, ?una m¨¢nager?, ?un periodista?, ?una activista?¡ª convertir a la actriz Constance Wu en la bandera de un color, de una comunidad, de una raza. Problema: nadie le pregunt¨® a ella si estaba de acuerdo. Es decir: si, adem¨¢s de ejercer su profesi¨®n de int¨¦rprete, deseaba erigirse en estandarte del cine asi¨¢tico en Hollywood. Otra cosa muy diferente es la defensa de una causa ¡ªla lucha por la igualdad de hombres y mujeres en el seno de la industria de Hollywood¡ª, con la que s¨ª se identifica en cuerpo y alma. Eso ha convertido a Constance Wu en uno de los nuevos rostros del MeToo. Aunque en el transcurso de una charla reciente ella insiste en su condici¨®n de actriz. ¡°De ser algo en la vida, soy sensible y dram¨¢tica, como todos los artistas¡±. Esa es su profesi¨®n de fe.

?Por qu¨¦ le ha tocado a la protagonista del pelotazo cinematogr¨¢fico del a?o pasado Crazy Rich Asians (Locamente millonarios) ser portavoz de una causa que no ha escogido? Es un tema del que sabe bastante alguien como Javier Bardem. El actor espa?ol lo intent¨® aclarar entre enfadado y divertido hace ya muchos a?os, desde la alfombra roja que le llev¨® a ganar el Oscar a mejor actor secundario por No es pa¨ªs para viejos (2007): el cine no es el f¨²tbol, y los nacionalismos hay que dejarlos en la puerta y apreciar, apoyar o incluso votar el trabajo de uno por sus m¨¦ritos, no por su origen. En parecidos t¨¦rminos se expres¨® la nueva estrella estadounidense Mahershala Ali: ¡°Cansa hablar todo el tiempo de temas como religi¨®n, racismo o discriminaci¨®n cuando en el mismo contexto a un actor blanco solo le preguntan por su proceso art¨ªstico¡±, se quej¨® el actor desde la misma alfombra que este a?o le condujo al Oscar por su papel en Green Book (2018). Y nadie le pide a Tom Cruise que sea el portavoz de los machos cauc¨¢sicos. Ni nadie insta a Brad Pitt a ser la imagen de los cincuentones. Pero as¨ª es exactamente como se siente Wu cuando escucha comentarios como el de la guionista y directora Lena Dunham alabando su labor en pro de la causa asi¨¢tica en el cine de hoy.

M¨¢s informaci¨®n

De la comedia al drama, Bel¨¦n Cuesta ya es otra pel¨ªcula

Pau, la leyenda interminable

¡°Soy hija de inmigrantes y mi familia era la ¨²nica asi¨¢tica en el barrio¡±, recuerda Constance Wu, una actriz de 37 a?os nacida en Virginia (Estados Unidos) de padres taiwaneses. Ella se esfuerza en recordar que nunca dej¨® que eso la definiera. ¡°Cierto es que cuando creces en un lugar donde tu rostro no es parte de la cultura dominante, eso marca. Pero para cuando tuve 20 a?os, en el Nueva York en el que viv¨ªa, cada vez que acud¨ªa a una audici¨®n, lo ¨²ltimo que ten¨ªa en la cabeza era mi raza¡±, explica la int¨¦rprete en un directo ejercicio de sinceridad.

El momento que est¨¢ viviendo hoy Wu es completamente diferente al de su primer largometraje de estudio, el bombazo que hace un a?o la lanz¨® al estrellato gracias a la primera pel¨ªcula asi¨¢tica de Hollywood en 25 a?os. Con ella obtuvo una candidatura al Globo de Oro, la primera para una actriz de origen asi¨¢tico en esa categor¨ªa a lo largo de 45 a?os. Su nombre pas¨® a formar parte de la lista de las 100 personas m¨¢s influyentes del a?o seg¨²n la revista Time. ¡°Yo fui la primera sorprendida. Nunca me esper¨¦ nada de esto¡±, afirma ahora con una cierta afectaci¨®n dram¨¢tica.

Poco m¨¢s de un a?o m¨¢s tarde protagoniza junto a Jennifer Lopez Estafadoras de Wall Street, uno de los ¨¦xitos de taquilla de esta temporada. Corre ya el rumor de que JLo podr¨ªa aspirar al primer Oscar de su carrera. Pero los analistas y cr¨ªticos se han mostrado m¨¢s que sorprendidos ante el hecho de que la megaestrella de origen puertorrique?o no se come a Wu en la pantalla. ¡°Jennifer es de las que saben c¨®mo pisar un escenario¡±, reconoce Constance Wu acerca de su compa?era de reparto. ¡°Yo ni siquiera sab¨ªa ni qui¨¦n era cuando la contratamos¡±, recuerda Lopez, adem¨¢s de actriz, productora de la pel¨ªcula, ¡°pero Constance era perfecta para el papel de Destiny, una extra?a pareja para Ramona, el papel que interpreto. En el momento en el que comenzamos a trabajar juntas no pude m¨¢s que acogerla bajo mi manto¡±.

¡°Soy hija de inmigrantes. Pero cuando acud¨ªa a una audici¨®n, lo ¨²ltimo que ten¨ªa en la cabeza era mi raza¡±

Constance Wu nunca tuvo entre sus proyectos de vida ser estandarte de nada. S¨ª actriz. No portavoz de una comunidad. Actriz. Y si era posible, de teatro. Sus abuelos fueron pobres, granjeros en Taiw¨¢n, y sus padres llegaron a Estados Unidos buscando una vida mejor. Lo consiguieron, y ella se crio en una clase media acomodada sin mayores carencias que cualquiera de las otras actrices con las que se present¨® una y otra vez a una audici¨®n tras otra. ¡°Nac¨ª en una familia rodeada de hermanas, todas con doctorados menos yo, la loca de la familia¡±, recuerda. Prefiri¨® seguir una vocaci¨®n y, lo mismo que a otros les lleva a ser doctores o misioneros, en su caso hizo de ella una actriz. Alguien que incluso ahora, en medio de su fama, disfruta de sus d¨ªas de ocio acudiendo a clases de interpretaci¨®n como si fuera una principianta. Y que, pese a los a?os, tampoco abandona la tutela de su profesor de arte dram¨¢tico, Craig Archibald. Da igual el tiempo invertido en el instituto de teatro y cine Lee Strasberg, en el conservatorio estudiando a Meisner o interpretando a Shakespeare en Nueva York, incluso cuando las deudas la pod¨ªan, nunca recort¨® su tiempo o su dinero para las clases de Archibald.

Solo una vez le flaquearon las fuerzas y no fue debido a la cantidad de a?os que se pas¨® trabajando como camarera. Su pareja de entonces fue la raz¨®n por la que, tras a?os de probar sin ¨¦xito a ganarse la vida como actriz, pens¨® en sacarse un t¨ªtulo de logopeda. Parece que fue ayer: ¡°Fue un momento que rompi¨® mi coraz¨®n, pero que me hizo darme cuenta de que no pod¨ªa quedarme m¨¢s en Nueva York, donde ¨¦l viv¨ªa, que ten¨ªa que poner tierra de por medio. Me cruc¨¦ el continente para vivir en Los ?ngeles, donde resido ahora. Fue todo un cambio¡±, rememora hoy casi entre risas.

?C¨®mo escapar de una situaci¨®n que no has buscado? Vasta misi¨®n: ¡°A m¨ª me gustan las cosas simples, aunque mi vida se haya convertido en motivo de conversaci¨®n¡±, se lamenta Wu. Es una forma muy amable de describir el torbellino que la rodea, de nuevo no por su trabajo, sino por ese otro que le han asignado. Wu fue descubierta en los hogares estadounidenses en 2015 gracias a la serie Fresh Off The Boat, una comedia familiar centrada en las vivencias de una familia asi¨¢tica. En aquella ocasi¨®n, el papel de Wu como la madre coraje Jessica Huang no ten¨ªa nada que ver con su trabajo como la aparente mosquita muerta que se dedica a la danza acrob¨¢tica para alimentar a su familia en Estafadoras de Wall Street. O con la ni?a buena de Rachel Chu en Crazy Rich Asians (Locamente millonarios).

Su contrastado talento dram¨¢tico no prepar¨® a Wu lo suficiente como para afrontar la que mont¨® cuando dej¨® escapar en su cuenta de Twitter su descontento ante la renovaci¨®n de la serie por una nueva temporada. Sus intentos de explicar de manera racional una reacci¨®n humana ante un contrato que le abri¨® las puertas del ¨¦xito, pero que ahora la retiene a la hora de escoger otros proyectos, solo empeoraron su imagen p¨²blica. Especialmente cuando uno cuenta con m¨¢s de un mill¨®n de seguidores en las redes. ¡°Mi respuesta deber¨ªa haber sido: ¡®Qu¨¦ contenta estoy con la renovaci¨®n¡¯. Porque lo estoy. Pero en un calent¨®n tambi¨¦n dije lo que sent¨ªa, algo que no ten¨ªa que ver con la serie, sino con que su renovaci¨®n me hac¨ªa perder un proyecto que llevaba buscando desde hac¨ªa tiempo y que me hac¨ªa mucha ilusi¨®n. Supongo que en el fondo sigo buscando qui¨¦n soy¡±, entona cual mea culpa pero sin falsos remordimientos.

Uno de los temas favoritos de Wu es el del combate contra el patriarcado de la industria del cine y la televisi¨®n, una causa que ¡ªa diferencia de los temas raciales o de diversidad¡ª cuenta con su total apoyo. Puede decirse sin temor a equivocarse que en ese territorio s¨ª que no le importa ser considerada como un altavoz. Su visi¨®n en estos asuntos fue buena parte de lo que la llev¨® a postularse como actriz para Estafadoras de Wall Street, aunque para ello tuviera que mostrar su talento en una prueba de v¨ªdeo, algo a lo que ya no est¨¢ obligada ahora que es una estrella desde que le llueven las ofertas. ¡°Ni en un mill¨®n de a?os me habr¨ªa imaginado hacer una pel¨ªcula as¨ª. Pero lo importante para m¨ª es encontrar artistas, realizadores, capaces de expresar lo que llevan en el coraz¨®n. Cuando los atletas utilizan su cuerpo para ganar competiciones y dinero los alabamos. Pero cuando estas chicas utilizan sus cuerpos para ganar dinero, el cielo se les cae encima. Eso es discriminaci¨®n. Lo que Estafadoras de Wall Street pide del espectador es que no las juzguemos, sino que las entendamos¡±, explica la actriz.

Uno de sus temas favoritos es el del combate contra el patriarcado en la industria del cine y la televisi¨®n

Se trata de personajes reales. Un grupo de chicas retratadas en el reportaje que Jessica Pressler escribi¨® para la revista New York Magazine en 2015 y que con el t¨ªtulo de ¡®The Hustlers at Scores¡¯ describi¨® a un grupo de bailarinas ex¨®ticas que en 2008, tras la crisis de Wall Street, sedujeron a sus clientes millonarios para obtener de ellos grandes sumas de dinero. Wu y el resto del reparto, que adem¨¢s de Jennifer Lopez incluye a Cardi B, Lizzo, Keke Palmer y Lili Reinhart a las ¨®rdenes de Lorene Scafaria y con Will Ferrell y Adam McKay entre los productores, describen esta pel¨ªcula como su versi¨®n de Uno de los nuestros, pero en lugar de centrarse en el mundo de la mafia, ambientado en los clubes de striptease. ¡°Una muestra de empoderamiento¡±, como repite machaconamente Lopez cada vez que habla de una pel¨ªcula en la que la interpretaci¨®n, la direcci¨®n, el guion y la producci¨®n estuvieron en manos de mujeres.

La conversaci¨®n con Wu deriva sobre los clubes que visit¨® para preparar su papel en Estafadoras de Wall Street y su aprendizaje en el campo de los bailes de striptease, especialmente en la barra vertical. Ah¨ª cont¨® con la ayuda de Cardi B, exstripper adem¨¢s de cantante, y de Johanna Sapakie, core¨®grafa con el Cirque du Soleil que trabaj¨® con anterioridad con Madonna y Miley Cyrus adem¨¢s de con JLo. Hollywood piensa seguir llamando a su puerta. Est¨¢ ¡°contractualmente obligada¡± a rodar otras dos entregas de Crazy Rich Asians (Locamente millonarios). No s¨¦ le ve especialmente alegre de volver a lo mismo, pero no va a cometer el mismo error que hizo con Fresh Off The Boat. Adem¨¢s, le alegra que se hable de estas secuelas ahora que la guionista original, Adele Lim, de origen chino-malayo, ha dejado el proyecto por la enorme discrepancia salarial con sus compa?eros de trabajo, hombres y cauc¨¢sicos. ¡°Eso s¨ª que soy, feminista y defensora de la igualdad¡±, ataja.?