Adolfo Dom¨ªnguez, pionero y superviviente
El dise?ador, que acaba de recibir el Premio Nacional de Dise?o de Moda, defini¨® el estilo espa?ol de los ochenta con una compa?¨ªa textil que hoy se reformula para encarar el futuro
Para los espa?oles que ya han cumplido los cuarenta, el nombre de Adolfo Dom¨ªnguez est¨¢ indisolublemente unido a una frase: la arruga es bella. Con este eslogan, este dise?ador de 69 a?os revolucion¨® la moda de los ochenta y defini¨® su est¨¦tica sobria y de siluetas org¨¢nicas. Pero m¨¢s all¨¢ de su legado creativo, este gallego nacido en A Pobra de Trives es uno de los escasos creadores patrios que han conseguido convertir su marca en una aut¨¦ntica compa?¨ªa textil.
Todo una haza?a dentro de un sector bipolar donde solo existen gigantes con protagonismo global ¨CZara, Mango, Rosa Clar¨¢¨C y peque?os modistos que sobreviven gracias a las licencias y los vestidos elaborados a medida para bodas, bautizos y comuniones. La lista de proyectos llamados a llenar el espacio comprendido entre estos dos modelos de negocio antag¨®nicos es grande; la de los casos de ¨¦xito, m¨¢s corta que las ¨²ltimas negociaciones entre PSOE y Podemos.
En ella resiste el gallego, 43 a?os despu¨¦s de fundar su firma Adolfo Dominguez (la marca, a diferencia del nombre del dise?ador no lleva tilde). Y lo hace tras acometer un ERE, unificar sus tres firmas ¨CAD+, U y Adolfo Dominguez¨C y cerrar m¨¢s de 220 tiendas con el objetivo de reconducir al grupo que entr¨® en p¨¦rdidas en 2012, muy afectado por la crisis. En 2018 y bajo la nueva direcci¨®n de Adriana Dominguez, hija del dise?ador, la empresa consegu¨ªa reducir su deuda un 92% y alcanzar una facturaci¨®n de 111,7 millones de euros con alrededor de 1.200 empleados. Hace apenas una semana el Ministerio de Cultura y Deporte reconoc¨ªa con el Premio Nacional de Dise?o de Moda ¡°la important¨ªsima expansi¨®n internacional¡± del dise?ador y su significado ¡°en la historia contempor¨¢nea de la moda de Espa?a¡±.
Porque Dom¨ªnguez ha sido un empresario audaz y un pionero que abri¨® camino para muchos empresarios textiles que vinieron detr¨¢s. Empezando por los que conforman su propia familia: sus hermanos, propietarios de la cadena Purificaci¨®n Garc¨ªa; y sus sobrinas, de la marca Bimba y Lola.
Todo empez¨® en el seminario. O, m¨¢s concretamente, en su biblioteca, donde el dise?ador descubri¨® una pasi¨®n por la lectura y la historia que alimentar¨ªa su proceso creativo y su filosof¨ªa empresarial. All¨ª devor¨® a Darwin y decidi¨® que quer¨ªa estudiar Cine en Par¨ªs. ¡°La cola de meritorios era de cinco a?os. As¨ª que volv¨ª a casa, hice la mili y le propuse a mi padre que abri¨¦ramos una f¨¢brica¡±, cuenta en una entrevista concedida a El Pa¨ªs Semanal. Entonces ten¨ªa solo 19 a?os y consigui¨® convencer a sus padres, que regentaban una sastrer¨ªa. En 1976 abri¨® su primera tienda en Ourense y ya entonces la influencia de los dise?adores japoneses, que en ese momento defin¨ªan la vanguardia internacional ¨CIssey Miyake, Yohi Yamamoto¨C, se dejaba notar en sus prendas. ¡°Es que yo soy muy esencialista, minimalista, muy cartesiano. Me encanta lo japon¨¦s, y como tuvimos tiendas desde el principio en Jap¨®n, supongo que eso me marc¨®¡±, explica. De hecho, su hija Adriana, le define como un dise?ador ¡°gal¨¢ico japon¨¦s¡±. Con esta aproximaci¨®n al dise?o se convirti¨® en uno de los modistos de la Transici¨®n y visti¨® a la progres¨ªa en los ochenta. En los noventa, precisamente en el a?o en el que se inauguraba la d¨¦cada, se convirti¨® en el primer creador de moda espa?ol en comercializar una fragancia bajo su nombre: Agua Fresca, desarrollada en colaboraci¨®n con la compa?¨ªa catalana Puig. Despu¨¦s le seguir¨ªan todos los dem¨¢s: Jes¨²s del Pozo, Victorio & Lucchino o ?ngel Schelesser¡ En 1991, un incendio arrasar¨ªa el cuartel general de 6.000 metros cuadrados que la compa?¨ªa pose¨ªa en San Cipri¨¢n (Orense). Tocaba volver a empezar a partir de las cenizas y el creador lo hizo. Solo un a?o despu¨¦s acometer¨ªa la expansi¨®n internacional de la firma que llevar¨ªa a Adolfo Dominguez a B¨¦lgica, M¨¦xico, Reino Unido o Argentina. Y por supuesto Jap¨®n, donde siguen presentes en 21 puntos de venta. Fueron los a?os dorados de la casa, que culminar¨ªan con su salida a bolsa en 1997. Una vez m¨¢s, volv¨ªa a ser precursora entre las marcas espa?olas al convertirse en la primera en cotizar en el parqu¨¦ madrile?o. En 2001 sufrieron una OPA hostil por parte del grupo Cortefiel, a la que finalmente consiguieron sobrevivir.
Dom¨ªnguez tambi¨¦n ser¨ªa uno de los primeros creadores en entrar en el mercado de las llamadas tallas grandes ¨Ccon su ense?a AD+¨C y en eliminar el cuero y el ante de las colecciones textiles. Un legado que ahora recogen las tres hijas que ha tenido con Elena Gonz¨¢lez ?lvarez: Adriana, que fue actriz y hoy ocupa el puesto de consejera delegada; Valeria, responsable de la tienda online ¨Cque ha aumentado sus ventas un 22% en el ¨²ltimo a?o¨C y miembro del consejo de administraci¨®n; y Tiziana, que comenz¨® desfilando para su padre, tom¨® las riendas de la firma m¨¢s juvenil U en 2014 y que hoy ejerce como directora creativa de todo el grupo textil.
Mientras, Dom¨ªnguez contin¨²a al pie del ca?¨®n, involucrado desde el dise?o a la distribuci¨®n pero con m¨¢s tiempo para otros proyectos y pasiones. Porque el dise?ador es un hombre tambi¨¦n fuera del atelier. Ha sido, por ejemplo, uno de los impulsores de los vinos de la Ribera Sacra y este a?o ha publicado un libro Juan Griego (editorial Defausta), que lleva el mismo t¨ªtulo que el primero que firm¨® en 1992 y que est¨¢ centrado en la dictadura militar argentina.
?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.