Moro y Bolsonaro ante el abismo
La presencia del ministro de Justicia de Brasil en el Gobierno del ultraderechista en estos momentos cr¨ªticos se convierte doblemente importante, enigm¨¢tica e incluso peligrosa
Las noticias difundidas por todos los medios sobre las denuncias de presunta corrupci¨®n de la familia del presidente, Jair Bolsonaro, lo colocan a ¨¦l y a su ministro de Justicia, S¨¦rgio Moro, ante un abismo. Sobre todo porque ha sido el mismo mandatario brasile?o quien ha alertado de que pueden emerger nuevas noticias sobre el nunca resuelto caso Marielle, el fantasma que se niega a morir y que, seg¨²n ¨¦l, sus enemigos pol¨ªticos intentan resucitar.
La presencia de Moro en el Gobierno de Bolsonaro en estos momentos cr¨ªticos se convierte doblemente importante, enigm¨¢tica e incluso peligrosa. Hace solo unos d¨ªas, Moro confes¨® que el presidente de Brasil es una persona "muy digna" con quien, adem¨¢s, tiene buena relaci¨®n de trabajo. La impresi¨®n que se ten¨ªa es que S¨¦rgio Moro aparec¨ªa cada d¨ªa m¨¢s cercano al bolsonarismo m¨¢s duro y quien ni exclu¨ªa la idea de presentarse como vicepresidente en las pr¨®ximas elecciones. ?Y ahora? Es verdad que puede decir que ¨¦l ya no es el temido juez de la Lava Jato y solo ministro de Justicia. Eso en teor¨ªa. En la pr¨¢ctica, su figura e imagen de intransigencia contra la corrupci¨®n le coloca ahora en una situaci¨®n que podr¨ªa significar su prueba definitiva. Deber¨¢ escoger: ?seguir¨¢ apostando a favor de Bolsonaro y su familia ante los nuevos acontecimientos? ?Seguir¨¢ jugando al avestruz?
Otra pregunta que se impone es hasta qu¨¦ punto ahora Jair Bolsonaro seguir¨¢ confiando en su superministro o temer¨¢ que pueda ser traicionado, esto apoyado en el consenso popular que presenta S¨¦rgio Moro, superior al del presidente. Quiz¨¢ haya sido una simple casualidad, pero a estas horas ha aparecido la noticia de que el presidente piensa en desdoblar el Ministerio de Justicia para crear el ministerio de Seguridad P¨²blica, cuyo cometido est¨¢ resultando uno de los ¨¦xitos de Moro en el Gobierno. Esto basado en la disminuci¨®n de la criminalidad, aunque los expertos dicen que no hay elementos fiables para atribuir la ca¨ªda de las muertes violentas a pol¨ªticas implementadas. ?Ser¨¢ que Bolsonaro empieza a dudar de la lealtad de su ministro que le hacia tambi¨¦n de escudo, y tema una de esas traiciones de los largos cuchillos? ?Se estar¨¢ planteando desangrar los poderes de su ministro que pueda transformarse de escudo a su infierno?
Si es dif¨ªcil descifrar lo que piensa hoy la figura Moro sobre los nubarrones que se ciernen sobre la familia del presidente Bolsonaro (a la que se le est¨¢ rasgando una de las banderas fuertes de su programa: la lucha contra la corrupci¨®n a cualquier precio) no es menos enigm¨¢tico lo que Bolsonaro empieza a pensar sobre ¨¦l y sus esc¨¢ndalos que ya parecen haber roto sus m¨¢rgenes. ?El presidente podr¨¢ temer una traici¨®n de Moro, con su fama internacional de juez duro, al que no le tembl¨® la mano al meter en la c¨¢rcel al m¨ªtico expresidente Lula y que se intuye tener muchos a?os por delante en su a¨²n indescifrable vocaci¨®n de poder?
Lo m¨¢s seguro es que las pr¨®ximas semanas y meses, o quiz¨¢s solo d¨ªas, puedan ser definitivos en esa relaci¨®n de amor y odio que une hoy a los dos personajes con mayor poder en Brasil. Y que a la vez son seguidos en sus pasos peligrosamente por el gobernador de R¨ªo, el exjuez Wilson Witzel, no menos duro y ambicioso que ambos, quien no tiene reparos en anunciar ya desde ahora que podr¨¢ enfrentar a Bolsonaro en las urnas.
?Solo a Bolsonaro? ?Y si su contrincante en la disputa por la presidencia fuera Moro? Ambos han sido jueces. Ambos son a¨²n j¨®venes y con hambre de pol¨ªtica. Dos duros que han anunciado ser a favor de mano fuerte contra la delincuencia, lo que les brinda el aplauso de las huestes bolsonaristas. Quiz¨¢s ser¨ªa necesario, para intentar analizar el complejo panorama pol¨ªtico que han abierto las investigaciones cada vez m¨¢s importantes y sombr¨ªas sobre la familia del presidente, desenterrar el mito de la esfinge egipcia, que era un demonio destructivo con las alas manchadas de sangre y que S¨®focles la llamaba la ¡°cruel cantora¡±. Esfinge y enigma, hija del rey Layo, a quien se le hab¨ªa reconocido un secreto solo conocido por los monarcas de Tebas.
Para una pol¨ªtica correcta y no destructiva, m¨¢s que enigmas y secretos, se necesitar¨ªan, como se dec¨ªa una vez en el periodismo cl¨¢sico, de ¡°luz y taqu¨ªgrafos¡±, de transparencia y respeto por la verdad. Bolsonaro usa en su lema de Gobierno las palabras de la Biblia: ¡°la verdad os liberar¨¢¡±. La verdad que desintoxica la pol¨ªtica es lo que Brasil est¨¢ necesitando en estas horas en que parece estar viviendo los fantasmas de las pitonisas antiguas.?
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