S¨¦rgio Moro, rumbo a la disputa electoral

S¨¦rgio Moro, ministro de Justicia de Brasil, ha afirmado que Lula da Silva ¡°pertenece al pasado¡±, y al mismo tiempo, ha asegurado que Jair Bolsonaro ¡°es una persona muy digna¡±. Algo?que corroboran, dice, ¡°todos los que le conocen de cerca¡±. A su vez,?el presidente brasile?o ha empezado a enamorarse del exjuez del caso Lava Jato y ha?asegurado que a Moro ¡°le est¨¢ yendo muy bien¡± como pol¨ªtico. Hasta parecen?querer ir juntos por la reelecci¨®n en 2022. La relaci¨®n entre el exmagistrado y el mandatario no hab¨ªa empezado, sin?embargo, con buen pie. Hasta se lleg¨® a pensar que Moro iba a salir?del Gobierno.

Hoy todo parece haber cambiado y el ministro de Justicia no descarta presentarse como candidato a vicepresidente de Bolsonaro, aunque destac¨® diplom¨¢ticamente que el sucesor natural ser¨ªa el general Hamilton Mour?o,?una persona a la que dice ¡°respetar bastante¡±. A?adi¨® enseguida, sin embargo,?que la f¨®rmula presidencial que se postule en 2022 ¡°deber¨¢ ser construida m¨¢s adelante¡±, y que "cabe al presidente escoger¡±. ?Estar¨¢ ya todo decidido?

Bolsonaro est¨¢ aprendiendo a nadar en aguas pol¨ªticas y sabe que hoy los sondeos dan m¨¢s votos a su ministro que a ¨¦l mismo. ?Despreciar¨¢ esa ocasi¨®n? Votos son votos. Y Moro?podr¨¢ estar pensando cu¨¢ntos vicepresidentes han acabado siendo presidentes en Brasil.

De que el exjuez se prepara para las urnas ya quedan, pues, pocas dudas. Cuanto m¨¢s lo niega, m¨¢s presente se hace, en sus gestos y simbolismos, su acercamiento a la pol¨ªtica, algo que asombra a los mismos profesionales. Hasta el presidente del Congreso, Rodrigo Maia, que hab¨ªa iniciado mal su relaci¨®n con Moro tras recordarle que ¨¦l era solo un ¡°empleado del presidente¡±, hoy comenta sorprendido que ¡°est¨¢ aprendiendo muy r¨¢pido a ser pol¨ªtico¡±. Fue significativa la sonrisa del ministro cuando, d¨ªas atr¨¢s, en una reuni¨®n en la C¨¢mara alta fue presentado por equivocaci¨®n como el ¡°senador Moro¡±. El exmagistrado coment¨®, agasajado, ¡°que estaba siendo invitado tantas veces al Senado que lo hab¨ªan confundido con un senador m¨¢s¡±.

Despu¨¦s de haber tenido una relaci¨®n inicial conflictiva, Bolsonaro se deshace ahora en elogios al ministro, del que afirma que ¡°lo est¨¢ haciendo muy bien¡± y que, al mismo tiempo, ambos est¨¢n aprendiendo a hacer pol¨ªtica. Una admiraci¨®n que parece ser rec¨ªproca. Si alguien al principio se preguntaba qu¨¦ har¨ªa Moro frente a casos de corrupci¨®n que apareciesen en el Gobierno actual o si el caso Marielle se complicase, el exjuez acaba de adelantarse.

Sabiendo, en efecto, que no dejar¨¢n de aparecer esc¨¢ndalos de corrupci¨®n en el Ejecutivo de Bolsonaro, el ministro de Justicia se ha adelantado?maquiav¨¦licamente a explicar que ¡°siempre podr¨¢ haber casos de?ilegalidad en cualquier gobierno¡±, para a?adir enseguida que lo que ocurri¨® con el Partido de los Trabajadores, sin embargo, fue la implementaci¨®n de ¡°esquemas sistem¨¢ticos de soborno y corrupci¨®n dentro de la administraci¨®n?p¨²blica¡±. M¨¢s a¨²n, ha a?adido que los ¡°l¨ªderes del nuevo Gobierno?est¨¢n siendo, en este campo, un ejemplo¡±.

?Cabe mayor elogio a Bolsonaro? Y al mismo tiempo, el exjuez del Lava Jato justifica as¨ª su presencia cada vez m¨¢s fuerte?en el nuevo Gobierno de extrema derecha con el que se identifica en?la idea del combate duro a la delincuencia. Todo a costa de dar mano libre?a la polic¨ªa y al Ej¨¦rcito en su lucha contra los bandidos, que en el?lenguaje de Bolsonaro, siempre ¡°ser¨¢ mejor que est¨¦n muertos que vivos¡±.

A Moro le queda, sin embargo, un ¨²ltimo paso para injertarse de lleno en el Gobierno de Bolsonaro. Necesitar¨¢ salir ileso de las Horcas?Caudinas del Supremo Tribunal Federal que deber¨¢ juzgar si anular o no?sus sentencias contra Lula, a quien llev¨® a la c¨¢rcel.

Si el expresidente saliera exonerado del Supremo con las sentencias anuladas, Moro sufrir¨ªa un grave rev¨¦s de credibilidad que podr¨ªa parar su?carrera pol¨ªtica. Por ahora, en ese juego enigm¨¢tico de?lenguaje moriano, cuya sem¨¢ntica habr¨ªa que estudiar mejor, el ministro ha?adelantado con proverbial frialdad que Lula ¡°pertenece a?su pasado y al pasado del pa¨ªs¡±. ?Una profec¨ªa o un deseo

inconsciente? As¨ª, Lula pertenecer¨ªa al pasado de Brasil, mientras ¨¦l y?el nuevo Gobierno de Bolsonaro ser¨ªan el presente y el futuro.

?De veras?