Los billetes concentran hasta 3.000 tipos de microbios
Un artista expone cultivos de bacterias en el papel moneda para concienciar sobre los procesos biol¨®gicos y denunciar los conflictos mundiales
El hecho de que una bacteria consuma la figura de la reina de Inglaterra o la de George Washington impresas en un billete fue lo que m¨¢s sorprendi¨® e inspir¨® a Ken Rinaldo. Este artista estadounidense de 62 a?os expone este s¨¢bado su obra Borderless Bacteria / Colonialist Cash en el Laboratorio de Arte de Berl¨ªn para mostrar al p¨²blico un mundo invisible que desconoce: la vida en el interior de un trozo de papel que se maneja a diario. Este objeto es, seguramente, el que m¨¢s concentra bacterias y un veh¨ªculo de trasmisi¨®n. Estas pueden vivir varios d¨ªas, e incluso semanas, fuera del sistema biol¨®gico que las hospeda como, por ejemplo, la piel. Al posarse sobre un billete, que est¨¢ principalmente hecho de algod¨®n, el microorganismo se adapta y encuentra nuevos nutrientes que le ayudan a sobrevivir.
Un estudio realizado por investigadores del Centro de Genoma y Biolog¨ªa de Sistemas de la Universidad de Nueva York (NYU) publicado en 2017 demostr¨® que los d¨®lares de un mismo banco de Manhattan contienen 3.000 tipos de microbios. La mayor¨ªa vienen de la piel, la boca y la vagina. Esta cifra tiene sentido ya que el ser humano alberga 38 billones de bacterias, que por mililitro de orina infectada se encuentran 100.000 colonias y que la mitad del peso de las heces son bacterias.
Adem¨¢s, las personas intercambian esos microorganismos generalmente inofensivos cada d¨ªa, al dar un beso, al dar la mano, en el metro, al abrir una puerta y por supuesto, al utilizar dinero. Jane Cartlon, autora del estudio y directora del centro de investigaci¨®n de Nueva York, asegura que comprender la distribuci¨®n e interacciones de los microbios, importantes componentes del ecosistema, es clave para comprender el funcionamiento del planeta y que no hay que alarmarse. Eso s¨ª, "las personas deben continuar lav¨¢ndose las manos con frecuencia para evitar la transferencia de organismos de un lugar a otro", precisa.
Juan Fernando Alzate, bacteri¨®logo y director del Centro Nacional de Secuenciaci¨®n Gen¨®mica de Colombia, piensa que es muy interesante ofrecer una imagen de algo que no se puede ver. "La gente en general no sabe de microbios y al hacerlos tangibles, les permite entender mejor su organismo. Es tener conciencia de que, en un objeto aparentemente muerto, hay vida", opina antes de a?adir que si viviese en Berl¨ªn llevar¨ªa a sus hijos a ver la exposici¨®n de Rinaldo.
El cient¨ªfico explica que el billete es un veh¨ªculo de transmisi¨®n y seguramente el que m¨¢s concentraci¨®n de bacterias tenga al ser algod¨®n, de ah¨ª su inter¨¦s para m¨²ltiples investigadores. "No hay que crear alarmismo, por supuesto, y si suprimimos esos objetos de la circulaci¨®n, seguramente aparezca un sustituto. Sin embargo, hay que cuidar la higiene y cambiar el comportamiento", asevera. Al d¨ªa siguiente de publicar su estudio sobre los billetes colombianos donde se encontraron 233 g¨¦neros bacterianos de los cuales 12 corresponden a especies con potencial patog¨¦nico y que varios medios hablaran de ello, Alzate fue a tomar su caf¨¦ en el bar de siempre. Por primera vez, el camarero llevaba guantes para manejar el dinero y al experto le pareci¨® una buena iniciativa. "Que circule la microbiota en una casa me parece fabuloso, pero en un hospital o en centros que sirven comida, se tendr¨ªa que restringir el uso de billetes o, al menos, controlarlo", concluye.
El proyecto expositivo de Ken Rinaldo, seg¨²n cuenta, sirve tambi¨¦n para denunciar los conflictos econ¨®micos y pol¨ªticos actuales. ¡°Las bacterias son los primeros colonizadores y es gracioso ver c¨®mo son capaces de borrar el s¨ªmbolo del poder de un pa¨ªs¡±, comenta. El artista y cient¨ªfico utiliza el cultivo de estos microorganismos para dibujar la relaci¨®n entre Europa e Inglaterra o la de Estados Unidos y M¨¦xico y poner en evidencia las similitudes por encima de las diferencias. ¡°He adaptado mi primera colecci¨®n [de 12 parejas] de 2017 a nuestra actualidad¡±, justifica.
La primera idea del artista es que ¡°antes de ser personas somos ecosistemas¡±. Sus obras consisten en cajas transparentes enriquecidas de agar, una sustancia que solidifica los medios de cultivo, en las cuales cohabitan dos billetes. Con el paso del tiempo y en funci¨®n de las condiciones, aparecen manchas a veces uniformes, otras de colores distintos y formas dispares: el panorama microbiano, aunque incompleto, crece y se establece tras varias semanas. ¡°Ver en imagen las bacterias y las reacciones biol¨®gicas ayuda a la persona a entender c¨®mo se producen. Adem¨¢s, y sobre todo, permite ver que estamos todos conectados¡±, explica. El proyecto de Rinaldo, en definitiva, es una forma de saber si el yuan chino tiene las mismas comunidades de hongos y bacterias que un d¨®lar americano y proponer una mirada divertida del conflicto entre los dos pa¨ªses. "En el universo de las bacterias, no existen las barreras. El efectivo es un vector de cultivos biol¨®gicos comercializados mundialmente", a?ade el artista.
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