No hay paz para los Sussex ni en Canad¨¢
Enrique de Inglaterra y Meghan Markle se ven obligados a blindar la intimidad de su casa con lonas, c¨¢maras y carteles
Este viernes se cumple un mes desde que los?duques de Sussex anunciaran, a trav¨¦s de su cuenta oficial de Instagram, que pon¨ªan tierra de por medio para abandonar gradualmente, durante 2020, las actividades y compromisos p¨²blicos que les impon¨ªa el palacio de Buckingham. "Pretendemos dar un paso atr¨¢s en nuestro papel de miembros s¨¦nior de la familia real y trabajar para ser econ¨®micamente independientes, a la vez que continuar¨¢ nuestro pleno apoyo a su majestad. (...) Planeamos equilibrar nuestro tiempo entre el Reino Unido y Am¨¦rica del Norte y seguir cumpliendo con nuestros deberes respecto a la reina, la Commonwealth [Comunidad de Naciones] y las organizaciones de nuestro patronazgo. Este equilibrio geogr¨¢fico nos permitir¨¢ educar a nuestro hijo en el aprecio a la tradici¨®n real en la que naci¨®, a la vez que aportar¨¢ espacio a nuestra familia para enfocarnos en un nuevo cap¨ªtulo [de su vida]", dec¨ªa el comunicado hecho p¨²blico por la pareja junto a una imagen de ambos realizada el d¨ªa que anunciaron su compromiso, en noviembre de 2017.
El revuelo que organiz¨® este anuncio y sus consecuencias est¨¢n ampliamente documentados. Markle regres¨® casi inmediatamente despu¨¦s del anuncio a Canad¨¢, donde la pareja hab¨ªa dejado a su hijo Archie al cuidado de una ni?era. Y el pr¨ªncipe Enrique lo hizo 11 d¨ªas despu¨¦s, sin pompas ni boatos reales. Ambos dispuestos a vivir una vida m¨¢s tranquila que les permita olvidarse del acoso de los medios y las cr¨ªticas incesantes a las que se han visto sometidos desde poco tiempo despu¨¦s de una boda que auguraba un cuento de hadas para la pareja.
Si la pareja pens¨® que una vez tomada la dr¨¢stica y dura decisi¨®n de dar un paso atr¨¢s en su vida como miembros de la familia real brit¨¢nica les dejar¨ªan en paz, se equivocaron. Al menos en el corto plazo la presi¨®n no cede para los duques de Sussex. El objetivo ahora es captar im¨¢genes de su nueva vida en Canad¨¢ donde, al menos de momento, viven en una lujosa vivienda?en North Saanich, una zona de la isla de Vancouver; la misma residencia en la que pasaron sus vacaciones navide?as.
Ante esta situaci¨®n, la pareja se ha visto obligada a tomar decisiones dr¨¢sticas. El portal estadounidense TMZ ha publicado im¨¢genes que dejan patente que los duques de Sussex han reforzado la seguridad alrededor de la mansi¨®n en la que se alojan. Los 16.000 metros cuadrados del recinto no hacen f¨¢cil la tarea, pero entre las medidas que han tomado se puede ver que han instalado c¨¢maras de seguridad, carteles de advertencia de que se trata de una propiedad privada ¨Cacompa?ados, eso s¨ª, de un "gracias" que se lee como una s¨²plica¨C, y lo m¨¢s sorprendente, unas lonas estrat¨¦gicamente colocadas que, aunque afean la propiedad, parece que evitan las miradas de los curiosos.?
No se trata de sistemas de seguridad muy sofisticados ni parecen definitivos y por este mismo motivo, algunos medios ya especulan que se debe a que no se trata de la vivienda en la que aspiran a vivir de forma definitiva. Otra propiedad situada al oeste de Vancouver con muros de seis metros de alto e incluso un posible traslado a Estados Unidos son las nuevas especulaciones que ocupan espacio en los medios brit¨¢nicos y estadounidenses.?
Todas estas medidas las han tomado despu¨¦s de que Markle fuera fotografiada paseando con su hijo y sus perros por un bosque cercano a su hogar. Unas im¨¢genes que provocaron que los abogados de la pareja advirtieran de que no dudar¨ªan en demandar a los fot¨®grafos a los que acusaban de asediarles durante las 24 horas del d¨ªa en los alrededores de su casa. Desde entonces, no ha existido ninguna nueva imagen de los duques de Sussex que ellos no hayan querido hacer p¨²blica. Ya lo dijo una de sus vecinas:?¡°D¨¦jenlos en paz. Este comportamiento no es canadiense. Se trata de dar espacio a las personas, de la libertad de vivir, de disfrutar de nuestro hermoso pa¨ªs¡±.
Otra cosa es la pol¨¦mica sobre qui¨¦n debe hacerse cargo de los gastos de seguridad de la pareja en Canad¨¢. Si se trata de eso, el 73% de los canadienses, encuestados por el Instituto Angus Reid, ha manifestado que est¨¢n en desacuerdo con que se destinen fondos del erario p¨²blico para cubrir cualquiera de sus gastos. Respecto a que vivan en su pa¨ªs, le resulta indiferente al 50% de los consultados, una idea estupenda al 39% y provoca malestar al 11% restante.?
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