El l¨ªder que se agarra al poder

Israel est¨¢ gobernado por un jugador con fuerte apoyo popular, Benjam¨ªn Netanyahu. Se ha beneficiado de una fatiga electoral que ¨¦l ha fomentado. Su pol¨ªtica es crear la sensaci¨®n de que su presencia al frente del pa¨ªs es inevitable. Tras no ganar del todo las terceras elecciones consecutivas en menos de un a?o (faltan tres esca?os para la mayor¨ªa absoluta), acus¨® a su principal rival, Benny Gantz, l¨ªder del partido Azul y Blanco, de alinearse con los amigos de los terroristas y de poner en peligro la democracia israel¨ª.

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EDITORIAL | M¨¢s Netanyahu

Israel pone rumbo al ¡®apartheid¡¯

Quien lo dice tiene un problema legal grave: el 17 de este mes arranca un proceso en el que se le acusa de tres delitos de corrupci¨®n. Necesita posponer ese juicio, lograr el apoyo de 61 de los 120 diputados (tiene 58) y aprobar una ley retroactiva que le garantice la inmunidad.

El bloque de la derecha, que es de ultraderecha, trata de atraer a tres tr¨¢nsfugas de la llamada izquierda, o lograr el apoyo del no menos ultraderechista Avigdor Lieberman, cuya agenda laica (que los ultrarreligiosos hagan la mili) choca con la de los ultrarreligiosos aliados del primer ministro en funciones.

Con ¡°los amigos de los terroristas¡± se refiere a la Lista Conjunta ¨¢rabe israel¨ª, que ha logrado 15 esca?os. Es la gran sorpresa. Ha movilizado a su electorado pese a que su presencia en el Parlamento es irrelevante. El resto de los partidos le hacen el vac¨ªo.

Su ¨¦xito tiene que ver con la alarma creada por el plan de Trump, que incluye un cambio de soberan¨ªa para 10 poblaciones lim¨ªtrofes con la L¨ªnea Verde. Pasar¨ªan a la Autoridad Palestina. Sus habitantes perder¨ªan la nacionalidad israel¨ª. Los palestinos que la tienen suman el 20% de la poblaci¨®n.

Netanyahu gan¨® sin mayor¨ªa la primera elecci¨®n, la de abril de 2019, una situaci¨®n similar a la actual. Gantz gan¨® las segundas, tambi¨¦n sin mayor¨ªa. Ahora ha vuelto a la segunda posici¨®n. No se atrevi¨® a distanciarse del discurso ambiente. Netanyahu lleva 14 a?os en el cargo. Para conseguirlo ha destruido planes de paz e iniciativas para alcanzar un pacto con los palestinos. En casi tres lustros ha derechizado a la sociedad israel¨ª, que vive en un tobog¨¢n emocional. No ser¨¢ f¨¢cil que se vaya. Denuncia que le quieren robar la victoria. Habla de los tribunales.

Mientras que la juventud israel¨ª es cada vez m¨¢s derechista y aboga como Netanyahu por la anexi¨®n de gran parte de Cisjordania, la juventud estadounidense est¨¢ con Sanders, un jud¨ªo de Brooklyn que detesta las pol¨ªticas de Netanyahu. Hay varias partidas simult¨¢neas y en todas pierden los palestinos. El excelente resultado de la Lista Conjunta aviva el temor a una soluci¨®n Edward Said. Este gran intelectual palestino, ya fallecido, propon¨ªa renunciar al Estado propio y pedir en masa la nacionalidad israel¨ª. Ser¨ªan casi la mitad de la poblaci¨®n. Obligar¨ªa a resolver un dilema que no es nuevo: Estado jud¨ªo o democracia.